34

Isabella miraba el teléfono en sus manos, los ojos bien abiertos, el ceño fruncido y las manos temblorosas.

No podía creer lo que acababa de suceder. Simón le había cortado la llamada sin miramientos, de manera abrupta, como si ella no mereciera ni una palabra más.

Su pecho ardía, mezcla de rabia y dolor, y sentía la furia creciendo dentro de ella como una marea incontrolable.

—¿Cómo se atreve? —murmuró, apretando el teléfono con fuerza.

Durante los últimos años, Isabella había soportado desplantes, largas ausencias y esa obsesión enfermiza de Simón por Natalia, esa mujer que parecía haber dejado una marca imborrable en él.

Esa llamada le había dejado claro que Simón no tenía reparos en tratarla como un mero accesorio, un objeto que podía silenciar cuando quisiera. Había cruzado una línea.

De pronto su celular sonó e Isabella observó la notificación en su celular: una transferencia de Simón. El mensaje adjunto decía simplemente *"Lo siento"*.

Lo leyó varias veces, buscando algo má
Sigue leyendo en Buenovela
Escanea el código para descargar la APP

Capítulos relacionados

Último capítulo

Escanea el código para leer en la APP