*****•••••*****•••••*****•••••*****•••••>>> Rouse: Mi primer experiencia sexual fue más incĂłmoda que dolorosa, pero era una colegiala enamorada y cedĂ por completo al chico que era mi primer amor. DespuĂ©s de eso, cada vez que tenĂamos relaciones, sentĂa que Ă©ramos los Ăşnicos en el mundo, querĂa que tomara todo de mĂ y soñaba infantilmente con un perfecto futuro a su lado. ¡La vida me golpeĂł con fuerza! No se hizo como soñé, terminĂ© llorando la muerte de mi padre, sufriendo la enfermedad de mi madre y la infidelidad de mi novio. TerminĂ© trabajando de una y otra cosa recogiendo el dinero necesario para sobrevivir un mes más. Fui reclutada para la agencia AM MILLER y las cosas comenzaron a marchar un poco mejor hasta que comenzaron a llegar mejores chicas, más hermosas, más fotogĂ©nicas, más experimentadas y más dispuestas a cualquier cosa para escalar a lo alto.
Varios dĂas despuĂ©s, en la clĂnica privada de los Parker. — ¡Mamiiii! — ExclamĂł el pequeño James lanzándose a abrazar a su querida madre, Rouse Becker. Ella correspondido al pequeño, inclinándose lo más que pudo, para despuĂ©s darle un beso en la frente al sonriente niño.  — Cariño, mamá te ha extrañado muchĂsimo~ — SonriĂł Rouse. — Toma, tu mami fue de compras con sus amigos Alice y Harold antes de venir aquĂ y te he traĂdo una pijama muy bonita. Rouse entregĂł el paquete donde venĂa la pijama más parecida que encontrĂł a la que usaba Leandro en las fotografĂas que anteriormente el niño habĂa visto en el telĂ©fono de su madre. James sacĂł rápidamente las dos piezas de tela viendo la pijama y se emocionĂł en ese instante. — ¡Oh! ¡Mami si son como de aquel modelo! ¡Mami en la fieta de tĂa Annie o vĂ! ¡AhĂ taba Ă©l, mamiii! — DecĂa el pequeño James emocionado mientras brincaba sosteniendo en sus bra
Un dĂa despuĂ©s. Rouse terminaba de almorzar, cuando pensaba salir a dar un paseo al jardĂn trasero de la mansiĂłn, aprovechando que habĂa un clima refrescante y agradable ya que no llovĂa. Se abrigo bien y en esta ocasiĂłn, Alice si llevaba el paraguas consigo por si llovĂa. — ÂżAsĂ que es una niña? ÂżYa decidiĂł que nombre le pondrá? — PreguntĂł la asistente emocionada. Rouse sonriĂł para despuĂ©s encogerse de hombros. — No lo sé… La verdad, creo que Ă©l deberĂa ponerle un nombre. Ya que fuĂ yo la que escogiĂł el de James. — ÂżAh, si? ÂżPero como hará que le ponga de niña si piensa mentirle y darle a entender que es un niño? Rouse volviĂł a ver fijamente a su amiga para despuĂ©s exhalar. — Bueno… Una mentira más ya no importará mucho, despuĂ©s de todo pienso decirle la verdad antes de que termine el mes; asĂ que estaba pensando en que esta noche podrĂamos ponernos a elegir
Esa misma noche, en la mansiĂłn del CEO Carletti. — ¡Cariño! Llegas justo a tiempo~ — Se lanzĂł Rouse a los brazos de Leandro apenas Ă©l ingresĂł. — ÂżJusto a tiempo? Estás muy entusiasmada, ÂżHa sucedido algo bueno? — PreguntĂł para despuĂ©s darle un beso con cariño a su novia en la frente. Rouse seguĂa sonriendo y llamĂł a Steven que mostrĂł unos libros dentro de una pequeña caja blanca. A Leandro le bastĂł leer de reojo para darse cuenta de que se trataba. — ÂżNombres? ÂżYa? Pero—— ÂżIremos juntos al ultrasonido lo olvidaste? — PreguntĂł Rouse interrumpiendo a su amado. — Inclusive lo retrasamos un poco por tu agenda atareada~ pero eso está bien, no, es más, eso es perfecto~ ÂżSabes por quĂ©? — DecĂa la bella ex modelo de manera coqueta. — ÂżMmm, por quĂ©? — ¡AsĂ ya tendrá un nombre cuando lo conozcamos! No tendremos que decirle "bebĂ©" nada más, tenemos que elegir un nombre
El dĂa del segundo ultrasonido de Rouse habĂa llegado. La bella ex modelo no dejaba de ver nerviosa a su amiga, quien a su vez la veĂa de vez en cuando. — ÂżQuĂ© es? ÂżPor quĂ© guarda tanto silencio? — PreguntĂł Leandro Carletti que estaba sentado al lado de la camilla en la que se encontraba su novia. — Es un poco difĂcil, el bebĂ© no está en una posiciĂłn cĂłmoda para verle. — ComentĂł Annie. — SeguirĂ© intentando un poco más, por favor señor Carletti, tenga paciencia. — Vamos cariño~ ya veremos quiĂ©n es~ ÂżSerá Liliane o será James? No tienes que ser tan impaciente mi amor~ — DecĂa Rouse animada. …..La noche en la que elegĂan nombres Rouse despuĂ©s de calmarse volviĂł a seguir con la elecciĂłn junto a su novio y ella logrĂł persuadir a Leandro para que ambos eligieran uno. Él eligirĂa el de niña y ella el de niño. Leandro no entendiĂł por quĂ© su novia querĂa que las cosas fueran de ese modo.Pero ya que Rouse estaba muy sensible, Ă©l no querĂa que ella se sintiera mal de nuevo o llorará y si
El CEO Carletti apartĂł su mirada de su mejor amigo Mason, para posar ahora sus ojos verdes en Thomas. — Como te habĂa mencionado antes necesito de tu ayuda, quiero que la compañĂa de tu familia se ocupe del anillo para Rouse. — PidiĂł Leandro a Thomas, quiĂ©n era el CEO de las mĂşltiples tiendas de joyerĂa bajo el apellido de los Davis. — Oh, perfecto, dĂ©jamelo a mĂ hermano. Me encargarĂ© de que tĂş pedido se anteponga a todos los demás. — SonriĂł Thomas emocionando. — ÂżQue tipo de diamante estás bus— — Si me disculpan, me voy a retirar, tengo cosas que hacer más que quedarme aquĂ escuchado esta charla. — InterrumpiĂł Mason a su primo. Leandro y Thomas se le quedaron viendo fijamente sin decir nada aĂşn. Mason se levantĂł y comenzĂł a irse, en ese momento, Thomas se disculpĂł con Leandro diciĂ©ndole que volverĂa enseguida, para despuĂ©s, salir corriendo tras su primo. …..— ¡¿Es en serio,
— Señor Miller… Usted… ÂżQuĂ© hace aquĂ? — SusurrĂł Rouse al ver a ese hombre de pie a menos de un metro de distancia de ella. — TenĂa que venir a verte. — SonriĂł Ă©l. — Levantará sospechas, será mejor que se aleje de mĂ. — ComentĂł Rouse mientras caminaba alejándose de Ă©l. — CĂłmo puede escuchar los rumores, lo estoy haciendo terrible. — Eso es solo por quĂ© estás nerviosa, solo deberĂas relajarte y hacerlo como en los viejos tiempos, Layla~ ¡SĂ© que puedes callarles la boca a todos esos imbĂ©ciles! — ¡Suficiente! No soy Layla, no lo diga en voz alta, creerán que si lo soy. — Jaja~ ÂżNo lo eres? Solo mĂrate bien, luces… CĂłmo antes, estás brillante. Rouse no pudo evitar sentirse un poco feliz por ese agradable comentario. Ella se dirigiĂł a la salida con la excusa de que necesitaba caminar un poco y ese hombre fue tras de ella.  …..Ya en las afueras del se
— Mmm~ Rouse hizo un sonido mientras estaba forcejeando para que su nuevamente jefe, Mason Miller, la soltara. Finalmente, ella logrĂł su cometido empujando a ese apuesto hombre rubio, de inmediato Rouse comenzĂł a caminar en direcciĂłn a Leandro que venĂa hacia ellos a pasos rápidos. Mason hasta ese instante, se dio cuenta que ahĂ estaba su mejor amigo terminando sorprendido sin decir ni media palabra. — Leandro no es que lo que estás— Antes de Rouse poder terminara de hablar, Leandro le pasĂł caminando al lado sin siquiera volverla a ver. Ella se girĂł hacia atrás de inmediato, siguiendo a su novio con la mirada y guardĂł silencio. ¡PAF!  Leandro le diĂł un golpe a puño cerrado a Mason a tal punto que ese hombre rubio perdiĂł el equilibrio y terminĂł cayendo sentado. Rouse se asustĂł. — ¡No¡ ¡DĂ©jalo Leandro! — GritĂł ella intentando que su