Mes y medio después...
Observo a todas las modelos recoger sus cosas para marcharse, hoy tuve una sesión de fotos en una montaña, todo ha sido para la empresa de Stephen.
Sinceramente está sesión no fue muy de mí gusto, los atuendos me encantaron, Stephen ha estado innovando, la ropa que tengo puesta es ropa que va a lanzar a la venta, pero caminar en la montaña y con tacones de aguja, altos y ropa así, es demasiado complicado, lo bueno es que no me caí, les juro que se me hubiese visto todo y que vergüenza.La cabaña que nos dieron para cambiarnos es un poco complicada, no tiene ni una sola ventana, sólo en el techo y la puerta se ha trabado demasiado, hace rato dos chicas se quedaron encerradas y fue todo un caos.- ¿Te podrías quedar unos minutos? Necesito hablar contigo - Dice Stephen entrando a la cabaña.
- Sin problema, igual aún no guardo mis cosas y no me he cambiado. - Respondo.
- Sabes que puedes quedarte con la ropa, todas se han quedado con los atuendos que modelaron.
- Gracias. - Respondo sonriendo un poco.
- Dejaré que guardes tus cosas mientras despido a las demás personas. - Dice y sale de la cabaña.
Entro a el cuarto en donde puse todas mis pertenencias, comienzo a meter cosas en mí pequeña maleta, tuve que traer algunas cosas porque uno nunca sabe que puede hacer falta o que imprevisto puede salir.
Escucho un fuerte portazo en la cabaña y salgo rápidamente, veo a Stephen frente a mi, al parecer se paralizó con el portazo.
- ¿Qué paso? - Pregunto asustada.
- El aire, entre y seguido se cerró la puerta.
- Casi me da un infarto - Digo poniendo mi mano en mí pecho.
- ¡Jenny! Esta puerta se traba.
Stephen se acerca rápidamente a la puerta y trata de abrirla pero no lo logra.
- ¿Qué vamos a hacer? Ya está haciéndose de noche.
- Mí celular está en mí carro, ¿En donde tienes el tuyo? - Pregunta alterado.
Entro al pequeño cuarto y tomo mí celular, trato de hacer una llamada a Leila pero mí celular no tiene señal.
- Sin señal - Digo nerviosa.
- No podemos tener tan mala suerte Jenny. - Dice nervioso también.
- ¿Qué vamos a hacer Stephen?
Veo a Stephen caminar nervioso de un lado a otro, puedo notar sus manos temblar, sus ojos buscan desesperadamente alguna manera de salir, pero realmente no hay manera de salir, sólo es posible por la puerta y bueno, gracias al aire no será posible.
- ¿Estás bien Stephen? - Pregunto al ver como se deja caer recargado en una pared.
- Soy claustrofóbico, estoy tratando de controlarme pero no puedo.
Veo como abraza sus piernas y entierra su cabeza entre sus brazos. ¿Qué carajo se hace en estos casos?
Tomo mi celular y comienzo a buscar un poco de señal.- ¡Sí! - Grito cuando he encontrado señal.
Escribo un mensaje para Leila en donde le doy la ubicación, le pido que no le diga a James, no creo que le agrade encontrarme encerrada con Stephen y de noche.
Espero hasta que el mensaje sea enviado y bajo de la pequeña silla en la que me subí para encontrar señal.- Pude m****r un mensaje, pronto vendrán por nosotros Stephen.
Me siento a su lado y comienzo a acariciar su cabello, puedo ver como su espalda se va relajado poco a poco, hasta que escucho un pequeño ronquido.
■■■■
- ¿Qué hora es? - Pregunta Stephen despertando.
- Las diez de la noche y estoy muriendo de frío. - Digo sentada aún a su lado.
- Ya llevamos mucho tiempo aquí, espero la ayuda no tarde.
Stephen se quita el suéter que traía puesto y me lo entrega, me lo pongo sin pensarlo y es curioso pero me queda casi del mismo largo que la falda que tengo puesta.
- Gracias. - Digo y Stephen asiente.
- A todo esto, dijiste que querías hablar conmigo. ¿Qué sucede?
- Es verdad, lo que quería decirte es que estamos comenzando a meter cosas nuevas a nuestra línea de ropa. Paulina quiere que comencemos a meter vestidos, pero quiere una línea completa de vestidos con brillos y esas cosas.
- Entiendo, pero yo no soy diseñadora. - Digo confundida.
- Lo sé y no te necesito como diseñadora, te necesito como modelo. Paulina quiere hacer los vestidos y que tu seas como su maniquí.
- Ahora sí ya entiendo, es lo más pesado que me han pedido hasta ahora.
- Lo sé, son demasiadas horas de dedicación, también es como trabajar al ritmo de Paulina. No siempre está inspirada, a veces está de malas, es complicado trabajar con ella, por eso pensamos específicamente en ti.
- Claro, la que va a sufrir seré yo. - Respondo riendo.
- Técnicamente sí. - Dice riendo también.
- Pues sí, sin problema puedo hacerlo. Sólo me gustaría hablar con Paulina para que podamos llegar a un acuerdo de horarios, no es como que quiera estar parada a las cuatro de la mañana. - Digo observando a Stephen.
- Suerte con eso. - Dice y ríe un poco.
Escucho el sonido de algunos autos, espero que sea Leila que vino con ayuda, de verdad ya no quiero estar aquí.
Escucho algunas voces fuera, los golpes en la puerta tratando de abrirla se hacen presentes.- Pensé que moririamos aquí. - Dice Stephen ya mucho más tranquilo.
- Seguramente nadie lo notaría. - Respondo riendo.
- Dirás de ti por que a mí me buscarían por cielo, mar y tierra. - Dice y ríe.
- Uy sí, Stephen la persona más importante del mundo ¿no?
Ambos reímos y la puerta es abierta de golpe, veo a James observandonos a ambos, su rostro es bastante serio al ver las sonrisas que tenemos Stephen y yo.
- ¡Por fin libres! - Grita Stephen y me da un abrazo.
- A descansar. - Digo y ambos nos alejamos.
James no dice nada y sólo nos observa, veo a las personas que James trajo para poder abrir, Stephen se acerca y agradece a todos por habernos sacado de ahí.
- Le diré a Paulina y te llamo después. - Dice sonriente.
- Hasta pronto. - Digo y Stephen sube a su auto.
Yo entró al pequeño cuarto para sacar ahora sí mis cosas, puedo sentir los pasos de James detrás de mí. ¿Alguien entiende su seriedad? Por que realmente yo no entiendo absolutamente nada.
- ¿Y bien? - Pregunta serio.
- ¿Qué quieres que diga? Realmente estoy agradecida contigo por sacarme de aquí pero no entiendo la molestia en tu rostro.
- ¿No la entiendes? Resulta que estoy en la oficina y a Leila le llega un mensaje en donde claramente le pides que no me diga que estas aquí sola con ese tal Stephen.
- ¿Por qué agarras el celular de Leila?
- Coincidió porque ella me estaba mostrando los diseños que mandaron las personas de una construcción. Y ese no es el punto de esto Jenny.
- Sólo nos quedamos encerrados James, realmente no es para que te pongas de esa manera. Le pedí a Leila que no te dijera precisamente porque sabía que te pondrías así, ya sabía que te enojarias.
- ¿Y con que pensabas justificar tu asusencia está noche? ¿Pensabas esperar a que los reporteros se enterarán de esto y me hicieran quedar como un idiota con cuernos? - James grita esto último y lo observó.
- James, de verdad relajate mucho, estoy muy cansada y no tengo ganas de estar discutiendo contigo.
Salgo de la cabaña y me subo a la camioneta de James con mis cosas, seguido sube James y arranca para que podamos ir a casa a descansar.
- ¿Y por qué tienes puesto el suéter de el? - Pregunta en un tono de reclamo.
- ¡Porque tenía frío James! - Respondo furiosa y el lo nota.
Contenido +18. Llegamos a casa de James y decido bajar rápidamente del vehículo, para ser sincera, no tengo ganas de pelar más con el; estoy segura de que solo serán gritos y más gritos. En una ocasión ya tuvimos una discusión fuerte y James término yendose a dormir a otro lado; yo mejor me regresé a mí departamento y depués James me anduvo buscando por todos lados como loquito. Yo lo sé, posiblemente somos muy exagerados al discutir pero esto es porque ninguno de los dos aceptamos nuestra parte de culpa y para nosotros, el culpable siempre será el otro. De cierta manera, somos demasiado orgullosos pero créanme que eso no esta para nada bien, llegará un día en el que vamos a discutir demasiado feo y nos vamos a cansar de esta situación, después ya no vamos a querer estar juntos y todo lo bonito que teníamos se habra ido en una discusión de diez minutos. Abro la nevera y encuentro un poco de pastel, decido sacarlo para comermelo, la ver
Comienzo a arreglarme un poco para ir a verme con Stephen, parece que somos buenos trabajando juntos, hasta ahorita, todo lo que hemos hecho juntos ha dado buenos frutos para ambos. Por supuesto James no esta de acuerdo con esto pero creo que cada quien trabaja a su manera, yo no me meto en su trabajo así que no le voy a permitir meterse en mí trabajo. Lista con mi short de vestir verde badera, un saco del mismo color y una camisa blanca, tomo unos tacones transparentes con bastante pedreria de decoración. Salgo rápidamente y al salir veo a Samantha parada afuera, por lo que veo, esta esperando a alguien pero James ya se fue y no hay nadie más en la casa. Decido ignorarla y seguir con mi camino, he decidido que voy a caminar, el día es demasiado bonito y prefiero caminar, sentir el aire fresco en mi rostro. - ¡Jenny! - Escucho la voz de Samantha a mis espaldas. Ruedo los ojos, volteo a verla y detengo mi paso, ella acelera su p
Contenido +18 Narra James. (La mañana en que sucedió todo) Despierto y lo primero que veo es a Jenny a mí lado, se ve muy hermosa así al natural. ¿Saben? Esto es un poco complicado, no me siento enamorado de Jenny pero acepté estar con ella como un favor porque ella me esta ayudando demasiado con lo del contrato para que me pueda quedar con la empresa que me ha hecho crecer. En mi relación con Jenny las cosas son un poco complicadas, quisiera sentir algo por ella pero es muy complicado; no puedo sentir cosas por ella tan rápido. He tratado de convivir con ella durante estos meses, la quiero y le tengo cariño pero no la amo, sin embargo, estoy seguro de que en algún momento voy a sentir amor por ella. Me arreglo un poco, me coloco una playera de cuello alto y manga larga gris, un pantalon de mezclilla negro, un abrigo café y unos zapatos cafés. Salgo del baño y la veo aún dormida, me acerco lentamente y deposito un
1 semanadespués. Narra Jenny. Me levanto y entró de inmediato a bañarme, la verdad en esta semana no he querido ver a James para nada, sólo he estado evitando el tema de Samantha a toda costa.He recibido algunas llamadas de James, no las he contestado y después de unos minutos sólo le he mandado un mensaje en donde le digo que tengo mucho trabajo y que cuando pueda le llamaré o nos veremos.En cierta parte le he mentido y en cierta parte no, trabajar con Paulina es complicado, de repente se siente con motivación a las diez de la noche y ahí me tienen en su estudio de trabajo con ella. Salgo y comienzo a buscar lo que usaré el día de hoy, debo ir presentable, hoy voy a conocer a un abogado para divorciar
Me miro en el espejo y arreglo un poco mí maquillaje, hoy he optado por vestirme con un traje color palo de rosa, una blusa de encaje palo de rosa, por supuesto mís tacones y bolsa, van a juego. Hoy debo ir a la empresa de James y quiero llegar al mismo tiempo que los abogados, no quiero quedarme a solas con James esperando a que los abogados lleguen, sé que si nos quedamos a solas, James haría todo lo posible para convencerme de que no terminemos nuestro falso matrimonio. Es obvio que no le conviene. - Estoy lista. - Digo mientras salgo de la habitación. - Y luego la gente se pregunta por qué soy bisexual. - Dice Paulina viendome con una sonrisa en los labios. - Yo no te culpo, realmente Jenny se ve incréible. - Contesta Stephen viéndome con cariño. - Por algo es de las modelos más solicitadas chicos. - Dice Leila a un lado de ellos. - Gracias chicos, eso calma un poco mís nervios. - Digo sonriendo un poco.
Llegamos a la casa de James y suelto un suspiro, claramente es el ultimo lugar al que quería venir pero ya que puedo hacer, supongo que lo hizo por el tema de los reporteros, en fin, sabíamos como era este juego desde un principio. Entramos y James me observa dudoso, trata de regalarme una sonrisa pero no lo logra y solo sale una mueca, yo suspiro y veo como una de las chicas de la limpieza viene a nosotros. - Señor, la señorita Samantha lo esta esperando en su despacho. - Dice la chica un poco incomoda. - ¿Para qué vino? - Pregunta James y frota el puente de su nariz en señal de fastidio. - Ni idea señor, me retiro. - La chica se da la vuelta y desaparece de nuestra vista. Cruzo los brazos y observo a James, es obvio que Samantha no es la persona que quiero ver ahorita. James me mira sin saber que hacer y yo niego con la cabeza, supongo que Samantha viene a hablar con el sobre lo que paso, no sé. - Escucha James,
1 semana después... "Ya estoy llegando, nos vemos en el parque acordado" Leo el mensaje que me ha enviado Carol, hemos quedado para hablar especificamente sobre James y Samantha. Le dije a Carol que tenía que contarle algunas cosas, por supuesto Carol acepto contarme toda la historia de James con Samantha, la unica condición es que no cuente nada y por supuesto no pienso hacerlo. Me coloco un vestido menta con florecitas, es bastante comodo este vestido y casual, lo he acompañado con unos tenis menta y todo listo. Salgo y subo a mí carro, pongo un poco de música y me pongo en marcha hacía el parque en donde quede con Carol. Espero que James no se enteré de esto aunque podriamos ir de compras y justificar que Carol este aquí en la ciudad. - Hola guapa. - Digo acercandome a Carol con una sonrisa en los labios. - Hola cuñada, dime ¿comó van las cosas? - Pregunta mientras tomo asiento a su lado.
Despierto y lo primero que ven mis ojos es a James que aún duerme placidamente a mi lado, frunzo el ceño reaccionando ¿qué hora es? normalmente yo despierto y James ya no se encuentra aquí. Reviso mí celular y veo que aún es demasiado temprano, por eso James sigue aquí. - Me choca despertar y ya no poder volver a dormir. - Digo con fastidio poniendome de pie. Decido entrar a darme una ducha, tomo la ropa que usaré hoy y entro al baño sin hacer mucho ruido. Supongo que iré a dar una vuelta o algo, sinceramente no tengo nada por hacer hoy; Paulina salió de viaje y como saben, me encuentro trabajando con ella y con Stephen por el momento. Salgo lista del baño, hoy hace un poco de frío así que me coloque unos pantalones de piel, una playera negra, unos tacones color piel y un abrigo largo color beige. Por supuesto una bolsa a juego color negra. Levanto la cabeza y me encuentro con James terminando de acomodar la cama, el también le