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Narra James. (La mañana en que sucedió todo)
Despierto y lo primero que veo es a Jenny a mí lado, se ve muy hermosa así al natural. ¿Saben? Esto es un poco complicado, no me siento enamorado de Jenny pero acepté estar con ella como un favor porque ella me esta ayudando demasiado con lo del contrato para que me pueda quedar con la empresa que me ha hecho crecer. En mi relación con Jenny las cosas son un poco complicadas, quisiera sentir algo por ella pero es muy complicado; no puedo sentir cosas por ella tan rápido. He tratado de convivir con ella durante estos meses, la quiero y le tengo cariño pero no la amo, sin embargo, estoy seguro de que en algún momento voy a sentir amor por ella.
Me arreglo un poco, me coloco una playera de cuello alto y manga larga gris, un pantalon de mezclilla negro, un abrigo café y unos zapatos cafés. Salgo del baño y la veo aún dormida, me acerco lentamente y deposito un beso en su cabeza, la observo unos segundos y deposito otro beso en su mejilla. Salgo de la habitación y me encuentro con una de las chicas que se encarga de la limpieza, me regala los buenos días y sonrio.
- Buenos días, por favor tengan todo listo por si la señora quiere salir. - Digo acomodando mi reloj y ella asiente.
- Sí señor, que tenga buen día.
Salgo de la casa y subo a la camioneta que ya me estaba esperando para ir al trabajo, llegamos a la oficina y bajo de la camioneta, entro a la empresa y empiezo a recibir los buenos días de todos mis trabajadores, estamos a punto de lanzar un nuevo proyecto; es un proyecto grande, lo único que espero, es que mi padre decida dejar la empresa en mis manos, he trabajado demasiado para conseguir esto.
- Muy buenos días James. - Dice Samantha subiendo al elevador conmigo.
- Buenos días Samantha, tenemos mucho trabajo hoy y necesito que estés en la oficina conmigo. - Digo con seriedad.
- ¿Dentro? Es que James, no tengo permitido estar ahí contigo. - La observo y muerde su labio con nervios. Además ¿comó que no lo tiene permitido? ¿Quién le prohibió la entrada?
- Samantha, las ordenes aquí las doy yo. Y dime ¿Quién te prohibió estar en mí oficina?
- Tú querida esposa, me dijo claramente que no podia estar ahí contigo. - Dice con un poco de burla.
- Esto es por trabajo, ve por tus cosas ahorita y te veo en mí oficina.
Salgo del elevador y veo a Leila parada afuera de mí oficina, ya lista para comenzar su día de trabajo.
- Buenos días jefe, su café ya se encuentra en su escritorio, la reunión de hoy será a las dos de la tarde; necesito que termine de revisar los planos y las fotografías que ya nos enviaron. Oh y también tiene que firmar unos documentos.
- Esta bien Leila, entregalé los documentos a Samantha para que me los traíga.
Leila asiente sin decir más y se va a su oficina para hacer el trabajo que le he encargado, yo entro a mí oficina, tomo un poco del café que me trajo Leila y comienzo con el trabajo que tengo pendiente.
....
Me acerco un poco a Samantha para poder ver los documentos que tiene, observo el documento y le voy indicando lo que tiene que ir poniendo. Llevo mi mirada a ella al ver que no me presta atención, veo que tiene su atención en mís labios, llevo mí vista a sus labios y veo que muerde un poco su labio. Observo sus ojos y ambos nos observamos, no se los voy a negar; Samantha es demasiado guapa, obvio no es más hermosa que Jenny pero sí es bonita.
Nuestros labios se juntan y giro la silla de Samantha para poder besarla bien de frente, ella se levanta de inmediato y yo la tomo de la cintura para sentirla más cerca de mi. Comienzo a hacerla retroceder hasta que llegamos al sofa de la oficina, ambos tomamos asiento en el y comienzo a desabotonar su blusa para tener acceso a su piel, comienzo a repartir besos por su pecho y la escucho disfrutar un poco. Samantha comienza a desabrochar mí camisa, la tomo de la cadera y la siento en mis piernas; ella continua besandome y yo acaricio sus gluteos descaradamente.
En mi mente comienzan a aparecer imagenes la noche con Jenny, sus palabras suenan en mí cabeza y quito a Samantha de inmediato con brusquedad.
- ¡Maldita sea! - Me levanto rápidamente y golpeo mí frente con la palma de mi mano.
- Lo lamento James. - Dice Samantha mientras acomoda su ropa.
- Dejalo ya Samantha, lo único que te pido es que no digas nada, esto queda entre nosotros y en realidad no paso nada.
- Esta bien pero tampoco me parece que me utilices así. - Dice haciendose la indignada.
- Nadie te esta utilizando, es complicado Samantha. Mejor sal y tienes el día libre, no necesito verte.
Tomo asiento en mí lugar y comienzo a trabajar de nuevo, veo como Samantha comienza a recoger todas sus cosas y sale de mi oficina dando un portazo. Apenas sale y yo suelto un gran suspiro ¿qué acabo de hacer y por qué? Lo único que me tranquiliza, es que Jenny no se va a enterar de esto o todo podría venirse abajo.
Después de un rato, tomo el teléfono y decido hacer una llamada a la casa, seguramente hablar con Jenny me va hacer entrar un poco en razón, no puedo estar así.
- Residencia Brook, diga. - Escucho la voz de la chica de la limpieza.
- Comunicame con Jenny, por favor. - Digo de inmediato y puedo sentir unos grandes nervios llegar a mí.
- La señorita ha salido, no aviso a donde iría y tampoco quisó llevar auto.
- Esta bien, seguro fue a trabajar. - Digo con tranquilidad.
Cuelgo la llamada y decido seguir trabajando, al rato que nos veamos espero no sentirme muy culpable, entiendo que estamos casados pero no es real, sin embargo, estamos viviendo una relación un poco más real desde hace poco. Y yo he arruinado esto por idiota, espero jamás se entere de esto.
1 semanadespués. Narra Jenny. Me levanto y entró de inmediato a bañarme, la verdad en esta semana no he querido ver a James para nada, sólo he estado evitando el tema de Samantha a toda costa.He recibido algunas llamadas de James, no las he contestado y después de unos minutos sólo le he mandado un mensaje en donde le digo que tengo mucho trabajo y que cuando pueda le llamaré o nos veremos.En cierta parte le he mentido y en cierta parte no, trabajar con Paulina es complicado, de repente se siente con motivación a las diez de la noche y ahí me tienen en su estudio de trabajo con ella. Salgo y comienzo a buscar lo que usaré el día de hoy, debo ir presentable, hoy voy a conocer a un abogado para divorciar
Me miro en el espejo y arreglo un poco mí maquillaje, hoy he optado por vestirme con un traje color palo de rosa, una blusa de encaje palo de rosa, por supuesto mís tacones y bolsa, van a juego. Hoy debo ir a la empresa de James y quiero llegar al mismo tiempo que los abogados, no quiero quedarme a solas con James esperando a que los abogados lleguen, sé que si nos quedamos a solas, James haría todo lo posible para convencerme de que no terminemos nuestro falso matrimonio. Es obvio que no le conviene. - Estoy lista. - Digo mientras salgo de la habitación. - Y luego la gente se pregunta por qué soy bisexual. - Dice Paulina viendome con una sonrisa en los labios. - Yo no te culpo, realmente Jenny se ve incréible. - Contesta Stephen viéndome con cariño. - Por algo es de las modelos más solicitadas chicos. - Dice Leila a un lado de ellos. - Gracias chicos, eso calma un poco mís nervios. - Digo sonriendo un poco.
Llegamos a la casa de James y suelto un suspiro, claramente es el ultimo lugar al que quería venir pero ya que puedo hacer, supongo que lo hizo por el tema de los reporteros, en fin, sabíamos como era este juego desde un principio. Entramos y James me observa dudoso, trata de regalarme una sonrisa pero no lo logra y solo sale una mueca, yo suspiro y veo como una de las chicas de la limpieza viene a nosotros. - Señor, la señorita Samantha lo esta esperando en su despacho. - Dice la chica un poco incomoda. - ¿Para qué vino? - Pregunta James y frota el puente de su nariz en señal de fastidio. - Ni idea señor, me retiro. - La chica se da la vuelta y desaparece de nuestra vista. Cruzo los brazos y observo a James, es obvio que Samantha no es la persona que quiero ver ahorita. James me mira sin saber que hacer y yo niego con la cabeza, supongo que Samantha viene a hablar con el sobre lo que paso, no sé. - Escucha James,
1 semana después... "Ya estoy llegando, nos vemos en el parque acordado" Leo el mensaje que me ha enviado Carol, hemos quedado para hablar especificamente sobre James y Samantha. Le dije a Carol que tenía que contarle algunas cosas, por supuesto Carol acepto contarme toda la historia de James con Samantha, la unica condición es que no cuente nada y por supuesto no pienso hacerlo. Me coloco un vestido menta con florecitas, es bastante comodo este vestido y casual, lo he acompañado con unos tenis menta y todo listo. Salgo y subo a mí carro, pongo un poco de música y me pongo en marcha hacía el parque en donde quede con Carol. Espero que James no se enteré de esto aunque podriamos ir de compras y justificar que Carol este aquí en la ciudad. - Hola guapa. - Digo acercandome a Carol con una sonrisa en los labios. - Hola cuñada, dime ¿comó van las cosas? - Pregunta mientras tomo asiento a su lado.
Despierto y lo primero que ven mis ojos es a James que aún duerme placidamente a mi lado, frunzo el ceño reaccionando ¿qué hora es? normalmente yo despierto y James ya no se encuentra aquí. Reviso mí celular y veo que aún es demasiado temprano, por eso James sigue aquí. - Me choca despertar y ya no poder volver a dormir. - Digo con fastidio poniendome de pie. Decido entrar a darme una ducha, tomo la ropa que usaré hoy y entro al baño sin hacer mucho ruido. Supongo que iré a dar una vuelta o algo, sinceramente no tengo nada por hacer hoy; Paulina salió de viaje y como saben, me encuentro trabajando con ella y con Stephen por el momento. Salgo lista del baño, hoy hace un poco de frío así que me coloque unos pantalones de piel, una playera negra, unos tacones color piel y un abrigo largo color beige. Por supuesto una bolsa a juego color negra. Levanto la cabeza y me encuentro con James terminando de acomodar la cama, el también le
Continuo observando con demasiados nervios la puerta del despacho de James aquí en su casa. Hemos venido aquí porque como ya saben, los padres de James quieren hablar con el y bueno, llevan como una hora ahí dentro, me desespero porque no logro escuchar nada y no ha salido ninguno de los tres. Espero que todo salga como lo teniamos planeado. - ¿Por qué estas tan nerviosa? - Pregunta Carol mientras toma asiento a mi lado. - Estoy nerviosa porque no sé como estan saliendo las cosas ahí dentro. - Respondo moviendo mí pierna en señal de nervios. - Jenny, por favor seamos sinceras, es más que obvio que mí papá le va a dar el cargo de la empresa a James, ninguno de mís dos hermanos esta preparado para esto y James se ha preparado toda su vida para recibir la empresa. - ¿De verdad? Es que no he tenido oportunidad de convivir con tus dos hermanos. - Lo sé pero te aseguro que James es el único que esta listo para esto. Mís
Narra James. :) Observo con bastante atención como Jenny y el tal Stephen se van, suelto un suspiro sin dejar de verlos y decido entrar de nuevo a la casa. Ayer después de que mí padre me dijera que yo iba a dirigir la empresa, llame a Leila y le pedí que cancelara todo el trabajo que tuviese para hoy y todo porque mí familia decidio quedarse aquí. Para mí mala suerte, Jenny decide ir a trabajar con su adorado Stephen. Por lo que veo, el tal Stephen le habla y Jenny en segundos ya esta lista para lo que el llegue a necesitar. Decido entrar a darme una ducha para alejar estos malos pensamientos de mi mente, lo único que espero es que este día no sea muy fastidioso o me voy a volver loco. Me coloco un pantalon palo de rosa con cuadros cafés, una playera blanca que se ajusta a mis musculos y unos tenis blancos. El estilo de hoy es demasiado casual pero porque como se los mencioné antes, hoy no tengo cosas importantes para ha
Narra Jenny. Despierto y reviso mí celular, son las doce del día. ¡Joder! ¿por qué nadie me desperto? Observo a mi lado y no veo a James, tomo ropa y entró rápidamente al baño para darme una ducha. Me coloco una falda tornasol corta y pegada a mí cuerpo, también me coloco un top negro de tirantes ajustado. Bajo rápidamente y veo a los padres de a James sentados en la sala, ambos están conversando sobre no se que. - Buenas tardes hija. - Dice la madre de James al verme. - Buenas tardes, me quedé dormida y debo ir a trabajar. - Digo con pena. - James está en el jardín con sus hermanos. - Dice su padre de James y le regalo una sonrisa. Salgo y veo a James a lo lejos conversando con sus