Capítulo 3

4 malditos días.Eso es lo que llevo esperando la jodida llamada y soportando al idiota de mi cuñado. Un infierno.

Ibiza es bastante bonita;las playas, la gente es amable,el clima,parques de atracciones..


Los chicos...- Dice en tono de burla, siempre molestando, cada día, cada hora, cada maldito segundo de mi vida,tengo que terminar esto en cuánto antes - Zen...te quedan exactamente...unos 10 meses  y 2 semanas....- se está riendo de mí, lo sé, la conozco demasiado diría yo - y todavía no tienes ni un plan, voy a disfrutarlo- ríe.


- Quién ríe último, ríe mejor querida - Le respondo distraída con mi móvil.


*Llamada desconocida*


-¿Diga?


-¿Es usted la señorita Zenda Moore?


Extrañada, le respondo- Si....¿Por qué?


-Le llamamos desde la empresa Industrial Boss Rizzo, le informo que el señor Rizzo, aprobó su currículum y su entrevista. Ya tiene usted el trabajo de asistenta personal.


No me lo puedo creer...es un sueño - ¡SÍ!- Grito, sin darme cuenta que todavía estoy en línea.- ¿Qué día empiezo? - La felicidad no me cabe, esto podría ser mi salvación.


-coles....¿Le vendría bien?-Me pregunta, no sé lo que me pregunto porque estaba muy distraída por tanta emoción.


-Ehm...perdone, no le preste atención, ¿podría repetir? - Le digo algo apenada.


- Le decía que si le parece bien empezar el miércoles a primera hora de la mañana

Hoy estamos a lunes....entonces pasado mañana - Me viene perfecto, gracias- Le digo.


- Bien, pasase primero a la oficina de la secretaria del señor Rizzo, le tiene que informar algunas cosas primero. Que tenga buen día- Me cuelga.


Seré libre, al fin.

Aunque este escasa de dinero, esto merece una cena, como a mí me gusta, sola y con compañía de alcohol.

No tengo amigos y tampoco estoy necesitada de ellos, viví casi toda mi vida sin ellos, se alejaban de mi por lo que tengo, era la típica "nerd"....sufrí muchísimo. Pero no es hora de recordar el pasado, el punto es que se que lo lograré.


Estoy apunto de dormir, cuando me vibra el móvil avisando la llegada de un nuevo mensaje. No sé quién puede ser a estas horas, tampoco es que tenga muchos contactos.

*Jesús abogado*


-Buenas noches, Zenda. Venía a informarte de que tienes todavía de plazo 10 meses y 2 semanas aproximadamente por si quiere cambiar de opinión. Estamos hablando de una buena fortuna y usted es la única que sabe esto, su madre lo dejó para ti.


-Buenas noches, Jesús. Usted sabe que necesito la herencia, para mí es lo más importante. Pero, me niego, me niego a cumplir la supuesta condición. Todavía me debe explicar el porque yo no sabía de esto y porfavor le agradecería que no se metiese en mis asuntos.


-Bueno Zenda, esto se hablaría mejor en persona...¿Qué tal mañana en la Cafetería Coffe a las 12?


-Ahora mismo no estoy en la ciudad. Y me gustaría que fuera en otra parte, sabe perfectamente que no me gusta donde vivo.


- Perfecto, ya me dirás. Que tengas buenas noches.


Miro el mensaje y apago el móvil. De verdad, esto es desagradable. Se que me tocó está vida y la tengo que aguantar.

Aún así, creo que no me merezco esto.

La Zenda del pasado estaría llorando, recordando y lamentándose.

La Zenda de ahora, no se aproxima a eso. Lloré, es verdad, pero eso me hizo más fuerte, ellos me hicieron más fuerte.

El me dijo que nunca confiase en nadie y tuve que aprender por las malas.

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