Vaya día. He trabajado bien para mi primer día, no había reuniones ni juntas así que me he ahorrado eso. Solo tenía que pasarle algunos papeles a Alessandro, que no es nada amable con sus empleados, es más, exige más y más.
A mi de momento no, pero no me extrañaría que mañana a primera hora me gritase o algo.
En fin, estoy tumbada en la cama de la habitación de huéspedes de Lili.
Ellos no están, me dijeron que estarían 6 meses haciendo un tour por el mundo. Mejor para mí en realidad.Estoy casi por dormirme cuando me vibra el móvil:*2 mensajes de números desconocidos*
Abro el primer mensaje y veo que es Anto:-Holiss Zendiii, te quería decir buenas noches y que me has caído muy bieen. A ver para cuando un café.
-Buenas noches, Anto. - Lo primero, es bastante exagerado y pone apodos bastante raros, pero aún así es buena persona.
Le agrego como Antoo y voy al segundo mensaje:
*Desconocido*-Hola señorita Moore, soy Alessandro, quería informarle que mañana iremos a Italia para cerrar un acuerdo con unos inversionistas. Estate a las 7:00 en el Aeropuerto de Ibiza.
¿Iremos?¿Alessandro?¿Aeropuerto? - pienso aterrada- Hola señor Rizzo, claro.
¿Cuántos días estaremos? -Es mejor estar de acuerdo, no me apetece que me regañe o algo.- Estaremos una semana. Tráete algún vestido de gala, iremos lo más probable a una fiesta. Que tenga buenas noches.
Le dejo en visto y apago el móvil, pero antes le agrego como: Alex
Me gusta más así, el nombre digo.
Suspiró y voy a dormir, mañana será un gran y cansado día. Espero que todo salga bien.Alessandro
Veo que ya ha visto el mensaje y se ha desconectado.Dejo el móvil en la mesilla. Estos inversionistas que vamos a ver son de los más importantes en mi ciudad natal. Tengo que cerrar varios acuerdos con ellos. Y ella tiene q estar, es decir, mi asistenta.
Estoy algo agobiado, con lo del trato con mi padre, por las empresas...
* Un nuevo mensaje*
Cojo el movil y veo que es Alisson.Ella es una rubia, con bastantes curvas y me satisface bastante.-Hola amor,¿puedo ir a dormir contigo hoy? No puedo dormir,gatito.
Es muy empalagosa, no entiende que para mí es una más.
-No - Mañana tengo que madrugar, es mejor estar descansado.
Apago el móvil de inmediato para que no me moleste y me duermo pensando en esos ojos azules eléctricos.
No...no..no,no,no- ¡No! - grito respirando agitadamente.- Ay no, otra vez no...- Digo tapándome la cara con las manos.Eran pesadillas, las mismas de siempre, el mismo escenario. Ya decía yo que últimamente dormía algo mejor.Miro la hora y veo que son las 6:30.-¡Mierda, el viaje! - Digo levantándome de un salto. Dios, no me dará tiempo.Entro a la ducha rápidamente y en 5 minutos ya estoy duchada y perfumada. Bajo a hacerme el desayuno mientras pienso que poner en la maleta, tampoco es que tenga gran cosa pero me es suficiente.Tendré que cogerle algún vestido a Lili. Jamás he visto Italia, pero cogeré de todo un poco; camisetas de manga corta, de manga larga,shorts y pantalones. Y llevaré mis Vans de siempre.Veo la hora y...¡Oh mierda! Se me hace tarde. Hago la maleta lo más rápido que puedo s
No, no puedo seguir así. Si no muero por culpa del jet, moriré de un infarto. He dejado pasar los ruidos esos extraños, pero ahora ya definitivamente no. Otra vez los malditos ruidos pero ahora con más insistencia.A la mierda todo, tengo miedo e iré a donde Alessandro. Ya pensaré en las consecuencias después.Hay 3 habitaciones, dos de ellas abiertas. Así que supongo que la última estará él. Tomo algunas respiraciones y toco la puerta. Nadie. Toco con más insistencia y nada. Entro despacio y le llamo en susurros:- Alessandro, Alessandro...pssÉl se remueve y se gira en mi dirección abriendo un poco los ojos.-¿Qué pasa señorita Moore? - Dice adormilado y ahora que me doy cuenta...no sé qué decirle.
Dios, que patética soy. ¿Por qué soy tan impulsiva? Pasé la mayor vergüenza de mi vida y todo por mis impulsos. En 10 minutos aterrizaremos , según el piloto. Cuando faltan ya 5 minutos, siento una mano encima de la mía, estoy por quitarla bruscamente cuando me doy cuenta que es Alessandro. Hago de todos mis intentos para no quitársela.Porque la mini-siesta que me eché me ha servido de algo, aparte de pasar vergüenza, me ha hecho reflexionar algo; está claro que por más que trabaje, no conseguiré el dinero.Está claro que no, Zen -dice - tendrás que hacerlo...si no, sabes cuáles son las consecuencias. Aunque, no me gustaría irme - dice con pena fingida.No puedo responderle, ya que Alessandro está cerca mía.AlessandroYa tengo a mi presa, me servirá. Mis padres la adorar
Ya llegamos a Italia. Ha superado mis expectativas. Es muy grande y con varios sitios turísticos. No he cerrado la boca en todo el viaje del coche al hotel. Seguramente Alessandro piense que soy patética,pero en mi vida he visto Italia. Es impresionante.-¿Cuánto queda por llegar? - Le pregunto.- 15 minutos - Dice él sin mirarme con su móvil de último modelo. Veo que lo tendré difícil.Después de 15 minutos, llegamos al hotel. Que la palabra hotel le queda pequeña, es gigante y muy moderno a decir verdad. Vamos a recepción, Alessandro es el que habla.-Hola,¿en qué puedo ayudarle? - Dice él recepcionista.-Tengo dos habitaciones individuales a nombre de Alessandro Rizzo.
Me remuevo en la cama. Y ya me estoy estresando. Dos cosas, hace mucho calor y algo está sonando. Veo que tengo un agarre en mi cintura. Confusa me giro y lo veo.-Alessandro, pss -Le digo susurrando.-Mmmm....un ratito. -Dice con voz ronca.-Levántate, tenemos que ir a la dichosa cena.-Le digo queriéndome apartar, -anda ya, suéltame.-No quiero,- aprieta más el agarre en mi cintura. Es como un niño pequeño.Veo que lo que suena es la alarma,me estiro un poco y la apago...pero gran error. Al bajar la mirada, el señorito ya está despierto...y estamos cara a cara, a pocos centímetros de nuestras bocas. En un rápido movimiento me pone debajo de él.
Tierra trágame. Estoy de lo más aburrida. Llevo una hora tragándome a un montón de magnates, empresarios, inversores....y mi boca duele de tanto sonreír. Quiero quitarme estos tacones del infierno y comer algo. Pero como es algo imposible toca aguantarme ir de la mano a todos los jodidos lados con el adonis.-Alessandro, estoy cansada.¿Nos podemos sentar al menos 5 minutos? -Digo exasperada ya.Me ignora y me lleva a una mesa donde hay una señora y señor de avanzada edad.-Alessandro, viejo amigo.- Dice el señor, sonriendo.-Angelo, Martina. Un placer verlos de nuevo.-¿Qué tal muchacho? - Dice Martina.-Muy bien,¿y usted?- Nada de formalismo chico, te conozco aún cuando llevabas pañales. ¿Y quien es esta señorita ta
Estoy en un profundo abismo. No veo nada, pero si siento que están hablando. Me duele la cabeza y justamente me viene una punzada de dolor, emito un quejido. Siento la garganta seca y quiero abrir los ojos, pero no puedo. Supongo que estoy en un hospital por el olor. Nunca me llegaron a gustar del todo los hospitales.Intento abrir los ojos otra vez y no puedo, tampoco puedo moverme. Entro en pánico de suponer la opción de...-Zenda, tranquila. Hay mucho sedante en tu organismo por eso no puedes moverte, intenta abrir los ojos. -Dice Alessandro.Siento un alivio en mi inmediatamente al escuchar sus palabras.Intento otra vez abrir los ojos y está vez si lo logro, pero solo por un lapso tiempo ya que me cega la luz. Esta vez sí puedo abrir los ojos y lo primero que veo es el rostro de Alessandro.
Creo que para conseguir a tu futura presa debiste de ser algo menos dura ¿O no, querida?Ya hasta te echaba de menos, pienso sarcástica.—Hola, señorita Zenda. Soy el doctor Steve, tendremos que hacerle algunos exámenes para verificar que está usted bien.-Dice entrando un doctor interrumpiendo. Salvada de una discusión.—Claro, sin ningún problema.-Le digo intentado sonreírle.Después de media hora de chequeos y exámenes al fin me dan el alta. Voy hacia al auto blindado que está en frente del hospital.—Hola, Julio.-Le digo al chófer sonriendo, creo que es el único el que en tan poco tiempo me cae bien.—Hola, señorita. La llevaré al hotel.-Dice mirándome a través