Zenda
Después de salir de la ducha no encontré a Alessandro. Pero si una nota en la que dice que no hace falta que le espere a cenar y que no llegará a dormir. Frunzo el ceño, ¿dónde irá? Suspiro y dejo la nota en su sitio. Me meto en la cama y trato de dormir. En realidad, estoy agotada y no hice absolutamente nada.
(...)
Me levanto por un ruido y veo que es la puerta abriéndose. Miro el reloj y veo que son las tres de la mañana. Maldigo, seguro que es Alex. Y definitivamente lo es.
-Zenda, levántate.
Frunzo el ceño. Y me giro cuando enciende la luz. Esta loco.
-Alessandro, son las tres de la mañana. ¿Que coño quieres?- Cuando irrumpen mi sueño soy peor que Maléfica.
Alessandro se sorprende.
-Esa boca, joder. Uno viene en buena fé y le reciben mal.
-¿Estas borracho?-Le digo incorporándome.
ZendaNo puedo dormir. Aún cuando tengo al hombre que supuestamente es mi esposo, al que también supuestamente quiero a mi lado, abrazándome como si su vida dependiera de ello. Y sé la razón. Simple...Un día, una fecha. Suspiro con melancolía. ¿Por qué mi vida no puede ser normal?¿Por qué jodidamente todo tiene que ser tan difícil? Hoy mi yo depende de dos personas. Cuando pasa algo que me afectó mucho en el pasado, mis dos yos salen a flote. ¿Cuándo? No lo sé. Lo que si se, es que está soy yo. La Zenda que sus problemas le afectan más de lo que pueda admitir, aquella chica que aún cuando su vida esta jodida...Ella intenta pensar en alguna solución aún cuando sea la peor de las soluciones, aquella que creía que todo el mundo estaba en su contra cuando nunca fue así, aquella que creía que nunca podría volver a sentir lo mismo dos veces, aquella que en algún momento llegará a su fin. Sonrío, aún así, valió la pena. Todo. Todo valió la p
AlessandroMe incorporo rápidamente al ver como a Zenda se le contrae la cara del dolor, mientras niega retiradas veces.—Zenda, ¿qué te pasa?— Le digo frustrado al no saber nada. Le acuno la cara con mis manos y le hago mirarme. Jadeo horrorizado, sus ojos estaban en blanco y estaba quieta, muy quieta.—¡Zenda, joder!—Grito asustado como la m****a. Intento buscar alguna solución, pero es en vano ya que parece que estoy en un estado de shock.—Vaya, vaya. El gran halcón negro sin saber que hacer. No es una novedad.—Dice Zenda sarcásticamente para a continuación empezar a reírse.—¿Qué?—Consigo decir.— Pero, Zen..—Me callo de inmediato al darme cuenta del error que hice. Maldigo en mi interior.—¡Oh! Zenda te gritaría posiblemente con el carácter de dura fingido que tiene. Pero yo...no soy Zen.—Se burla.—Dulces sueños, querido.— Es lo último que escucho para después ver
Te tienes que mudar...no tienes opción.Pero,¿a dónde? Piensa Zenda...Suena el teléfono.-¿Quién es?-Digo con mal humor, sentada en un sillón viejo.-Hermanitaa, hola.Bufo.-¿Qué quieres Lili? -Mal momento para que me hablen y sobretodo Lili.-Que humor eh,¿acaso no puedo llamar a mi queridita hermanita pequeña?- Quiere algo, la conozco.-Al grano Liliana María Moore.- Sé que odia que la llamen por su nombre completo.-Sabes que no me gusta mi nombre, Zenda Moore,- respondió ella un tanto brusca.-Bueno a lo que íbamos...¿Te gustaría venirte a pasar algunos meses aquí en Ibiza con tu preciosa hermana y tu cuñado favorito?- Dice Lili alegre.-No.- Respondo en un tono seco.-Pero...¿Por qué?-Dice ella con un tono triste.-Porque no Lili, sabes perfectamente que soporto a tu
Han pasado varios días desde que llamé a Lili para ir a Ibiza. Ahora mismo estoy en el avión y les tengo fobia.Sí, yo Zenda Moore les tengo miedo a los aviones, más bien fobia. Porque odio, repito, odio increíblemente los viajes en avión.Si por mí fuera, eliminaría todos los aviones del planeta entero, pero me toca aguantar y rezar que no se caiga este bicho del demonio.Después de bajar del avión, vi a mi hermana Lili y fuimos a su casa. No hace falta decir que intenté por todos los medios hacer el amago de llevarme bien con su marido. Pero os juro que él lo hace aposta, han sido las peores 24 horas de mi vida.(...)Ahora mismo estoy delante de la famosísima-nótese el sarcasmo- empresa del señor...no me acuerdo de su nombre.Lo que si sé, es que es bastante fa
4 malditos días.Eso es lo que llevo esperando la jodida llamada y soportando al idiota de mi cuñado. Un infierno.Ibiza es bastante bonita;las playas, la gente es amable,el clima,parques de atracciones..Los chicos...- Dice en tono de burla, siempre molestando, cada día, cada hora, cada maldito segundo de mi vida,tengo que terminar esto en cuánto antes - Zen...te quedan exactamente...unos 10 meses y 2 semanas....- se está riendo de mí, lo sé, la conozco demasiado diría yo - y todavía no tienes ni un plan, voy a disfrutarlo- ríe.- Quién ríe último, ríe mejor querida - Le respondo distraída con mi móvil.*Llamada desconocida*-¿Diga?-¿Es uste
Estoy caminando para Industrial Boss Rizzo. Por fin llegó el día. Llevo mis Vans de siempre, un pantalón vaquero y una blusa azul, un poco de rímel y labial. No me gusta mucho el maquillaje que digamos.Llegué. Ahora que me doy cuenta, es enorme pero eso no me intimida. No estoy nerviosa porque confío en mi, con el tiempo aprendí a confiar en mí. Otra vez la rubia Barbie.-Hola, ¿me podría decir en qué piso se encuentra la secretaria del señor Rizzo?- Si, piso 45, a la izquierda la encontrarás - Me dice con voz chillona. Te juro que cada vez la soporto menos.No le doy las gracias, paso. Voy al piso correspondiente y después de 20 minutos, básicamente, me dice las normas,mi horario y me cuenta por encima que debo hacer y/o decir en cada ocasi&
ZendaListo, ya terminé de revisar la mitad del papeleo. Mira el reloj y veo que ya es lo hora del descanso. La secretaria, que por cierto es agradable, me dijo que había una cafetería que es de la empresa.Entonces, iré ahí.Ya en la cafetería, veo que es bastante amplia y hay varios empleados. Es muy tipo vintage. Me gusta.- Hola,¿ me pone un bocadillo y un capuchino cremoso por favor?- Le digo a la chica que está en el mostrador.-Si, en 5 minutos está. ¿Para llevar o para comer aquí?- Aquí.- Le sonrío y me siento en una mesa, alejada de los demás,en la esquina.Al cabo de unos 5 minutos mirando la ciudad,viene la chica.-Aquí tiene. Que lo disfrute.-Gracias.Estoy distraída en mis pensamientos, que
Vaya día. He trabajado bien para mi primer día, no había reuniones ni juntas así que me he ahorrado eso. Solo tenía que pasarle algunos papeles a Alessandro, que no es nada amable con sus empleados, es más, exige más y más. A mi de momento no, pero no me extrañaría que mañana a primera hora me gritase o algo.En fin, estoy tumbada en la cama de la habitación de huéspedes de Lili.Ellos no están, me dijeron que estarían 6 meses haciendo un tour por el mundo. Mejor para mí en realidad.Estoy casi por dormirme cuando me vibra el móvil:*2 mensajes de números desconocidos* Abro el primer mensaje y veo que es Anto:-Holiss Zendiii, te quería decir buenas noches y que me has caído muy bieen. A ver para cuando un café.
Último capítulo