FAMILIA MONTENEGRO: -Matrimonio: Francisca de Montenegro y Claudio Montenegro -Hijos: Raúl, Francisco y Alma. ------- FAMILIA VALENCIA: -Matrimonio: Sarah de Valencia y Rogelio Valencia -Hijos: Juan Carlos, Christian y Pablo. ------- FAMILIA SANTODOMINGO: -Matrimonio: Mariela de Santodomingo y Pedro Santodomingo -Hijos: Manuel y Lucía. ------- FAMILIA DE LA ESPRIELLA -Matrimonio: Cecilia de la Espriella (Viuda) y Ovidio de la Espriella (RIP) -Hijos: Mariana, Carolina y Vanesa. (…) Dicen que la vida de un sacerdote no es fácil de sobrellevar cuando renuncia a tener una esposa, hijos, nietos, generaciones de lo que pudo ser se desvanecen dándole paso a las obras que Dios nos permita hacer en vida. Jamás vi lo malo en eso, desde mi juventud supe lo que quería y nunca me arrepentí de las decisiones que tomé respecto al tema. Sin embargo, sí existe algo que pesa en la consciencia de todo hombre que decide entregar su vida a Dios y es el secreto de confesión, aquel acto tan
Abrí mis ojos con una infernal ola de calor recorriendo mi cuerpo ante el sueño que tuve, uno de muchos que me acompaña desde hace ocho años en la mayoría de mis noches. Mi mente trae el recuerdo de todo lo que vivimos en esos meses que significaron tanto para mí, que trajo muchas lecciones de vida y todo gracias a un hombre que no he podido olvidar, que mi corazón se niega a sacar del lugar que hizo para él con sus sonrisas, su caballerosidad y su bondad.Me levanto al saber que no seguiré durmiendo aun cuando todavía sea de madrugada, no necesito ver la hora para saber que son las cuatro en punto, misma hora en la que su bus partió de este pueblo alejándose para siempre de mi vida y dejándome un gran vacío que no he podido llenar con nada ni nadie.Primero dejé el agua fría recorrer mi piel para calmar este calor veraniego de la época y el que me produjo su rostro en sueños, cuando estoy tranquila paso a la templada y enjabono mi cuerpo pensando en todo lo que haré el día de hoy. Un
ChristianEl retorno a casa no fue corto, de hecho, no recuerdo que el día de mi partida tardase tantas horas entre un punto y otro, pero al menos tuve tiempo para pensar en todo y calmar mis ideas, la ola de emociones que me generaba el regresar a la tierra que me vio nacer y sobre todo, el pensar que quizás volvería a verla era demasiado para mí.Muchas veces a lo largo de estos años deseé tener una fotografía de nosotros, pero solo en recuerdos y sueños era posible tenerla conmigo nuevamente. No mentiré, muchas veces mi cabeza me jugó una mala pasada recordándome la última semana que estuve con ella y en la cual emergió el pecado en nosotros, claro está que en ese entonces no era sacerdote y bien podía estar con todas las mujeres que quisiera, pero ella fue la primera y única a la cual me entregué en cuerpo, mente, alma y corazón.Asimismo, hubo muchas ocasiones en las que quise volver, renunciar a mi sueño y estar con ella, quizás trabajaría en el campo igual que mi padre y mi her
ChristianAl día siguiente me dediqué a revisar todo lo que tenía el padre Ocampo, año a año desde que me fui estuve informándome de lo que hizo, los matrimonios, bautizos y demás eventos celebrados por él, también revisé las finanzas confirmando lo que había dicho mi madre la noche anterior, Alma estuvo muy al pendiente de todo en este lugar e incluso apoyó económicamente varios proyectos.No pude evitar sentirme feliz ante cada palabra registrada por ambos y ver todo lo que ella hizo por la iglesia, el padre y este pueblo, especialmente los niños, pues gracias a ella comenzaron una tradición dos años después de que me fuera donde se hacía una fiesta exclusivamente para ellos y de las ventas que hacía, se llevaban las ganancias al hospital para brindar atención a los que más lo necesitaran en el área de pediatría y maternidad, todo eso me provocaba una inmensa felicidad.Aunque por muy feliz que me hiciera ver todas estas acciones, también me hizo preguntarme qué fue de la vida de el
ChristianEsas fueron las primeras palabras que escuché de sus rosáceos labios, su voz seguía siendo angelical y al mismo tiempo guardaba algo en ella, no sabría decir si era dolor, ira, resentimiento o quizás era producto de mi imaginación ante la tensión que sentía por verla nuevamente. Me dije mentalmente que no debía desfallecer, lo pasado es pasado y ahora eran ocho años los que nos separaban, años en los que pasaron muchas cosas con nosotros, años en los que cada uno hizo una vida lejos de aquí, del otro… y aun así me hacía sentir tan nervioso ante su presencia.—Gracias, me alegra saber que estás aquí y por lo visto muy bien —dije. Sus mejillas se ruborizaron haciéndonos esbozar una sonrisa maravillosa.—Es usted muy amable… padre Valencia.Debí tragar grueso ante su pecaminosa voz con rostro celestial, pero en mi nerviosismo intenté retomar el autocontrol.—No veo motivos para no serlo cuando todos se han portado bien conmigo.—¿Yo me he portado bien con usted? Vaya, me halaga
Alma El camino a casa de los Valencia fue un poco extraño para mí, pese a que los hermanos iban al frente en la camioneta, éramos Juanca y yo los que conversábamos mientras Christian iba con un cara de pocos amigos mirando por la ventana en silencio, intentamos involucrarlo en la conversación un par de veces, pero sus cortas respuestas me dieron a entender que no se sentía cómodo con nosotros, no quise sacar conclusiones apresuradas, pero es algo que abordaría con él cuando estuviéramos nuevamente a solas. Al llegar a casa fuimos recibidos con una cálida bienvenida, todo estaba servido en el comedor y cada uno fue tomando asiento, aunque se me hizo extraño la “sutil” insinuación de Sarah, que no tuvo en verdad nada de sutil porque prácticamente fue a empujones que ella nos organizó a Christian y a mí para dejarnos juntos, igual ninguno pronunció nada y comimos tranquilamente entre conversaciones triviales. Poco a poco nos fuimos relajando dejándonos llevar por todos, él se involucr
Hacienda MontenegroAlmaEsta semana ha sido bastante entretenida para mí, desde aquel domingo que hablamos volviéndonos amigos otra vez las cosas han estado bien entre Christian y yo, lo mejor de todo han sido los juegos provocativos que suelen dejarlo muy nervioso, pero que a mí me sacan más de una sonrisa, especialmente porque no me atrevo a cruzar el límite de lo físico como antes, aunque no lo negaré, ansío hacerlo, pero sé que él está muy metido en ese tema de la castidad y ahora mismo le traería muchos problemas, por lo que disfruto de esta manera.Otro punto que me ha gustado bastante es que he podido conocerlo mucho más, me ha contado sobre lo que ha hecho a lo largo de los años en la capital, también que estuvo viajando bastante como voluntario en algunos pueblos remotos ayudando a muchas familias de escasos recursos, algo que me encantaba de él pues no se enfocaba en tomar una biblia para convencerlos de Dios, sino que él se mostraba y veía a otros como lo que eran, persona
Christian Todos se quedaron viendo en mi dirección dejándome un poco nervioso y muy avergonzado, pero igual no lo hice notar, aunque sin duda el rostro de Alma me dio mucha tranquilidad desde que llegué al jardín en compañía de uno de los empleados que amablemente me guio hasta aquí, pero entre más la veía, más relucía esa sonrisa traviesa que ya conocía a la perfección y que definitivamente se convertía en mi advertencia de que ella saldría con algo en cualquier momento, tal y como hizo cada día de esta semana. Igual no lo negaré, pese a todas las bromas que me jugó me hacía muy feliz el tenerla a mi lado, ella mejoraba significativamente mis días y al estar con Emilio las locuras eran mayores porque él le seguía el juego en algunas, suponiendo que no cayera en otras al ser tan inocente como yo, o bueno, mucho más inocente que yo, porque hasta ahora ese niño no tenía ni idea de lo que era siquiera un beso en la boca. En ese instante el padre de Alma se acerca a mí estirando su man