Sammy Benson, es una chica jovial, alegre y optimista, con una seguridad que convence hasta el más incrédulo. Aún cree en los príncipes azules, aunque en su corta vida amorosa se ha topado con hombres que no han sido más que patanes que la desilusionan temporalmente, aun así, ese brillo, esa luz, esa esperanza sigue viva en su interior. Siempre ha creído que un día llegará ese príncipe decidido a ver más allá que el aspecto físico, un hombre digno de ella que descubra su alma y desnude su interior de tal forma que, él no querrá irse nunca. La forma tan positiva de pensar que tiene ante las adversidades, hace que pienses dos veces para darte por vencido Pero ¿qué pasará cuando encuentre su talón de Aquiles? Un mal momento en su vida la hará caer en un abismo tan oscuro, tan profundo que, olvidará su seguridad, el sentido de la vida, que esa luz en su interior muera y la hará perderse. ¿Podrá Sammy reencontrarse con ella misma después de ese golpe tan bajo del destino? ¿Creerá nuevamente en los príncipes azules? Conoce a Sammy, a sus fantasmas, conoce sus luchas y como le cuenta a su nuevo amigo “Sebastián” sus temores. Esto es: A pesar de las decisiones
Leer más“No podemos resolver nuestros problemas con el mismo pensamiento que usamos cuando los creamos”.(Albert Einstein)SammyCierro los ojos, saco un suspiro cansado, llevo dos semanas intentando hacer que Pene-Lope, haga su trabajo, el cual termino haciendo yo.Es irrespetuosa conmigo, se la pasa en otros departamentos y no sé qué es lo que está pensando. Se supone que la tengo para ayudarme, es cierto que soy la mujer maravilla, pero no puedo con todo sola.Así que, desde que regresé, tengo estrés, no tengo tiempo para relajarme y cargo con el triple de la presión laboral sobre mis hombros y eso, no es nada bueno, para colmo, satanás sigue de vacaciones.Emma y Julia, aconsejan que debo hablar con el jefecito y plantearle la situación. No quería llegar a eso, me gusta solucionar los problemas laborales, de no ser que la situación se salga de mis manos.—No, no, no, no debo molestarlo con insignificancias. El problema es que no quiero perder la paciencia y detonar.—Sammy, debes hacerlo
Cada hombre es una historia que no se parece a ninguna otra (Alexis Carrel) Samuel Murphy…Y Luce, era su hermana.Cuando escucho que dice eso, algo hace clic en mi cabeza, es como si el cerebro se detuviera justo en ese momento. Paso mis manos por el rostro—respira, muchacho—me anima entonces, siento su leve caricia sobre mi espalda—respira, inhala y exhala, eso es—intento imitarlo—imagina que William viera como te culpas cada día, por algo que solo estaba en sus manos, ¿crees que descansaría en paz? ¿le harías eso a tu mejor amigo?—Yo, debí ver las señales, papá—aparece una sensación en mi pecho, como si algo lo aprisionara, inhalo y exhalo, prácticamente boqueando, mi padre sigue con esa leve caricia sobre mi espalda—duele, papá—entonces, la sorpresa aparece cuando las lágrimas acumuladas por tanto tiempo salen, las limpio con rapidez, pero es en vano, vi muchas personas llorar en el transcurso de mi vida, yo no recuerdo cuando fue la ultima vez que lo hice, pero ahora, no puedo
En ciertos momentos, la única forma de tener razón es perdiéndola José BergamínSamuel Murphy… Ahora sé lo que sentía Benson, al estar frente al edificio de Fontaine, la diferencia es que yo, no tengo quien me dé un empujón. De verdad deseo marcharme de aquí. Siento que con cada paso que doy, aumentan las probabilidades de que sufra un ataque de ansiedad.La casa donde me crie ha cambiado al paso del tiempo, eso sí, el jardín se está recuperando tras unos años sin que mi progenitor estuviera en casa.Mientras me acerco, veo un sombrero que me transporta a mi niñez, me detengo y siento como si fuese ayer, cuando me sentaba en una de las sillas junto a la mesa rodeado de tan bellas flores, con una pila de libros mientras mi padre cuidaba del jardín.Cuando compraron esta casa, se encargó de plantar diferentes tipos de plantas florales. Jamás fui de ayuda, no me interesan esas cosas, lo mío son los números, sin embargo, disfrutaba de ese tiempo con él.No tengo un pasa tiempo favor
Se mide la inteligencia de un individuo por la cantidad de incertidumbres que es capaz de soportarImmanuel KantSamuel MurphyVeo tras la ventana del automóvil intentado deshacer los nudos emocionales que están enmarañados en mi cerebro, cierro los ojos y lucho con pensar en cosas positivas.Voy en la parte trasera del auto, por recomendaciones de Ernesto, no debo conducir en un tiempo. El celular vibra dentro del bolsillo de mi saco y veo quien es.—No te escuché irte—su voz tiene un poco de pesar.—Lo siento, quería que durmieras más tiempo.—¿Lograste dormir algo?—Si, no te preocupes, tengo noches buenas.—Querido, por favor cualquier cosa, sabes que estoy aquí.—Lo sé—susurro—nos vemos más tarde, te amo.—Yo también te amo.Mi esposa cuelga la llamada. No estuvimos en buenos términos, pero, logramos regresar a estar juntos y eso, me reconforta.No quería perderla ni a ella ni a mi hija, así que me esforcé por mejorar, sin embargo… Después de pasar dos semanas con mis ahijadas, S
"No podemos estar en modo de supervivencia. Tenemos que estar en modo de crecimiento". Jeff Bezos.Actualizar tanta información en el trabajo me tiene con dolor de cabeza, ¿Cómo es posible que haya cambiado tanto en casi ocho meses?Mi tableta de trabajo que estaba en manos de la tal Pene-lope, está vacía, sin ninguna información como si la hubiesen reseteado de fábrica.Ni siquiera tiene instalado el sistema que se utiliza para la agenda del jefe, en donde está la información detallada de cada uno de los clientes de Fontaine.—¿Qué le hiciste Sammy? —interroga Julio, el chico de informática—perdiste información importante.—¿Que le hice? Llevo media hora aquí y me la acaban de entregar, así tal y como la estás viendo.—¿Fue Penélope?—¿Otro que la odia? —pregunto sorprendida.—Yo no odio a las personas, ellas no es más que un usuario para mí, sin embargo, tengo entendido que ella si me detesta, cosa que no me quita el sueño ni la tranquilidad, si ella te la dio así quiere decir que f
«Aunque tu mente esté confundida, tu corazón siempre sabe la respuesta»AnónimoYa era tarde para bajar del vehículo, además que los asientos son cómodos y huele a nuevo.—Buenos días Sammy—sus ojos azules me escudriñan mientras yo sigo mi investigación científica de como se respira. —Bu, bu, bu—aclaro mi garganta en el vano intento de corresponder al saludo.—Buenos días Arturo, repite después de mi—se burla cuando intenta hacer que repita entre risas, entonces, me doy por vencida.—Te iba a llamar—una excusa barata es la que sale0—lo siento— junto a una simple disculpa.—No te disculpes, no es necesario, simplemente fue una tortura para mí.—No era mi intención—inquiero apenada y nerviosa.—Debía darte tiempo, pero me estaba matando la incertidumbre, no sabía que ignorabas, tú sabes…Se refiere a mi aspecto físico—no es tu culpa, es mía.Eso no es cierto—se levanta para sentarse a mi lado, toma mi mano y la acuna entre las suyas—nada de esto es tu culpa, fuiste víctima de las circu
«La vida se encoge o se expande en proporción a tu coraje»Anaïs NinLa expresión de “trágame tierra” es ideal en esta situación en la que me encuentro.Su seriedad es el vivo reflejo de que estoy en serios problemas, me siento como una adolescente que se tatuó sin el permiso de sus padres y que ahora mismo esta apunto de ser reprendida por ello.—¿No soy bienvenido? —trago sintiendo mi pecho arder y el corazón galopando como un caballo alocado. —Cla, claro—me aparto para darle paso, se detiene junto frente a mí, se inclina para darme un beso en la sien.—No voy a morder Sammy, solo que—camina hasta el sillón, si sienta entonces se cruza de brazos—no me has respondido las llamadas, ni los mensajes.—Je, jefecito, digo ex jefecito—digo en tono de súplica— es que las cosas se complicaron un poquitín—Siéntate Sammy—ordena mi ex jefecito Valentino Fontaine y como niña buena y obediente, hago lo que dice.—Tengo una explicación para ello—me excuso, mas, no tengo ninguna excusa en mente,
«¿Qué dosis de verdad puede soportar un hombre?».Friedrich NietzscheMuchas personas ven el suicido como una manera de huir, otras por su parte, lo ven como una cobardía, y hay muchos que lo toman como una forma de valentía. En mi caso, lo veo como algo doloroso tanto para el ejecutor como para su familia. ¿Qué tanto debes sufrir para llegar a ese extremo? No lo sé, sin embargo, Luce, al parecer, si lo sabe.—¿Qué? —una interrogante que sale como un susurro, que oprime mi pecho. —Sucedió hace tres años—continua—fue difícil para los que estábamos a su alrededor, primero queda en un torbellino dando vueltas y vueltas en tu cabeza, luego los interrogantes que…—Llegan los ¿Por qué? —interrumpe el señor Murphy, que entra en la cocina, con ayuda de su esposa, se sienta en la silla frente a mi— Y te atacan como cuando activan un bombardeo en plena guerra. Tomen el día libre, la generala se hará cargo, descansen.—Vamos a viajar, nos tomaremos una semana en familia—indica Antonella lo que
El remordimiento es como un perro mordiendo una piedra: una estupidez Friedrich Nietzsche Cuando escucho decir al señor Samuel, nueve once, mi mente se dispara por completo, vienen a mi cabeza imágenes de un accidente… Luce, cambia por completo, la chica alegre y positiva desaparece por completo, maldice muchas veces mientras corre hasta el vehículo, la sigo de inmediato asiente cuando subo con ella. Su cajita de fósforos como ella le llama a su auto, va a una velocidad que jamás pensé que iría un auto, maldice en cada semáforo y no llegamos en cinco minutos, llegamos en diez, a pesar del tráfico. Según lo que escucho, el señor Samuel no tiene ningún accidente, sino, un ataque de pánico. ¿Cómo es eso posible? Samuel, el demonio engendrado por Satanás, ¿tiene un ataque de pánico? Samuel Murphy, es un hombre sin filtros, ni tabúes, está lleno de una sinceridad escalofriante. Tiene el don de dar justo en el clavo cuando le toca dar consejos, se toma muy enserio su trabajo y es ene