Shi Minzhe es un joven hombre aficionado a las novelas web 'danmei'. Aparte de eso, no tiene otros gustos interesantes, incluso lleva una vida común como un fracasado estudiante de universidad. ¿Pero que hará cuando un día despierte y descubra que el personaje de su libro favorito está durmiendo a su lado? Es más, ¿por qué se estaba sintiendo atraído por él? ¡Si incluso tenía novia!
Leer más“Xin’er… No puedo más”Bing Wen se sorprendió con el aguante que tenía Xin’er. No sabía cuántas veces lo habían hecho, pues había perdido la cuenta hace tiempo. Su cuerpo estaba extremadamente sensible, y cada toque en su piel le hacía perder la cabeza. Pero Xin'er no parecía tener intenciones de parar. Volvió a besarlo mientras una de sus manos acariciaba su abdomen y llegaba hasta su miembro. Bing Wen jadeó cuando comenzó a masturbarlo de nuevo, siendo la sobre estimulación demasiado para él. Los fluidos de las veces anteriores actuaban como lubricante, provocando que el toque fuera más fácil. Los besos de Xin'er bajaron hasta su cuello, dejando marcas nuevas sobre las anteriores. No podía controlarse cuando tenía a Bing Wen así para él. Bing Wen mordió su labio inferior cuando los movimientos de Xin’er se acentuaron, tocando cada zona de aquella parte tan sensible. No tardó mucho más en correrse, aunque apenas salió nada ya que su cuerpo estaba al límite. Aún así, Xin’er aprovec
76. Cálidas flores de primavera (IV) *** Al igual que Bing Wen, Xin’er no podía pensar con claridad. Después de tanto tiempo enamorado de él, después de tanto esperar… Había conseguido que Bing Wen le correspondiera de todas las formas. Bing Wen terminó por quitarle la parte superior de su túnica, dejando su piel al descubierto, la cual aún continuaba un poco húmeda. El cuerpo de Xin’er estaba muy bien formado y Bing Wen no podía dejar de observarlo. Su tez de un color ligeramente canela, la definición de sus músculos y el rápido subir y bajar de su pecho debido a la anticipación. No sabía muy bien que hacer ni que decir, así que se quedó así unos segundos, admirando su belleza. Xin’er aprovechó para besarlo en ese momento, y así ocultar su creciente nerviosismo. Aún así, Bing Wen continuó con lo que estaba haciendo. Su mano tocó su torso para después continuar bajando hasta llegar a la parte superior de sus pantalones. “Espera…” justo en ese instante, Xin’er se separó un m
“Ah…” Esa respuesta tan sincera y repentina tomó por sorpresa a Shi Minzhe, pues no se esperaba que Xin’er le confesara la verdad así sin más. Sus planes de molestarlo fueron arruinados por completo.“¿Entonces ya no necesitas esto?” Shi Minzhe agitó la pintura en su mano.“No, ¡digo si!”Xin’er cogió la pintura y la observó durante unos segundos. Una expresión difícil de descifrar pasó por su rostro, antes de volver a su habitual sonrisa.“Bueno, ¿y cómo es que ahora estáis juntos?” Ante esa pregunta, Xin’er sujetó una de sus manos, lo arrastró dentro de su habitación y después cerró la puerta. A Shi Minzhe ni siquiera le dio tiempo a reaccionar.“En realidad no estamos juntos, pero espero que en un futuro próximo si” Xin’er comenzó a hablar. “Aún tiene que ordenar sus sentimientos”Esa era la explicación que a Shi Minzhe se le hacía más razonable, pues sabía que los sentimientos de Bing Wen hacía Xu AnRong eran muy fuertes. “De momento es mejor llevarlo en secreto… Ya sabes. Conf
Bing Wen sabía que a Xin’er no le bastaría con solo un beso más. Después de tanto tiempo juntos, conocía a la perfección su personalidad tan ansiosa. Los sentimientos de ambos inundaron la habitación, creando un ambiente romántico que Bing Wen jamás se imaginó experimentar en su vida. Sus intenciones al entrar en la habitación de Xin’er eran confesar esos pensamientos que habían estado rondando su mente durante tanto tiempo, pero las cosas terminaron de una manera bastante distinta. Xin’er lo llevó a su cama, donde lo llenó de caricias en su rostro y besos en sus labios, los cuales se sintieron como las cálidas flores de la primavera. Después de un rato, Bing Wen dejó que Xin’er se pusiera encima suya y aprovechó esa posición para pasar una mano detrás de su cabeza, afianzando el agarre. Xin’er no se esperaba esa reacción, pero tampoco es como si tuviera algo en contra. Bing Wen recibió un beso en sus labios, en su frente, en su nariz y de nuevo en sus labios. La presenci
Shi Minzhe aún no había tenido la oportunidad de hablar con Ming Hui sobre la pintura y su pasado. El ambiente en Senshi Xu cambió de un momento para otro y el trabajo se incrementó. Tanto ella como todos los pertenecientes a Senshi Xu se volcaron en la seguridad de la secta. Era algo que tenía que ocurrir. Los sucesos extraños que habían sucedido de forma continuada encendieron las alarmas de cada una de las personas. No podían permitirse otra catástrofe. Pues todavía los recuerdos de aquella guerra continuaban presentes en los corazones de muchos, si bien ya no existían los Muguang ni ningún emperador tirano. Shi Minzhe se había acostumbrado a la presencia de Bing Wen, Bing Ming y Xin'er a su alrededor. También a la de Ming Hui. Pero ahora, ya habían pasado tantos días sin estar con ellos, que perdió la cuenta del paso del tiempo. Lo sucedido lo devolvió a la realidad. Sabía que no pertenecía a este lugar, que solo estaba de paso. Él era un extraño en un mundo donde todos s
“Xin’er, Xin’er…” unas suaves manos acariciaron su rostro mientras lo llamaban. “¿Has estado llorando? Tus ojos están hinchados”“Mm…”Sintiendo su cuerpo pesado, Xin’er intentó despertar del todo. Se acomodó en medio de la cama y lo primero que vio con claridad, fue el amable rostro de Fang Yin. “¿Entonces no fue un sueño? ¿De verdad esta es mi voz? Y la tuya…” los ojos de Xin’er volvieron a brillar, llenándose de hermosas lágrimas llenas de felicidad. “Es real” Fang Yin dijo con firmeza. Xin’er asintió. Al final había salido todo bien. Al fin podía escuchar. Al fin podía escuchar la voz de la mujer que lo había estado cuidando durante todo este tiempo. El médico que lo había tratado, le había dicho que se trataba de una sordera parcial. Como ya había nacido con ella, no existía una cura que le permitiera escuchar para siempre, solo de forma temporal en ciertas ocasiones.Pero a Xin’er no le importaba. Mientras existiera una solución, él sería feliz. Xin’er no sabía si llorar o
"¿Así que estabas preocupado por mi? ¡Que tierno Xin'er!"Cuando regresaron a la habitación, Xin'er le explicó la situación y lo que había hablado con Xia He. "No…" enseguida sus mejillas se sonrojaron."En realidad me fui lejos porque necesitaba hablar con alguien que podría curar tu sordera"Esas últimas palabras captaron toda la atención de Xin'er. "¿De verdad?""Si, es un médico bastante reputado de esta zona. Tiene muchos pacientes y siempre está ocupado. Pero en cuanto le comenté tu caso, llamé su atención y aceptó ayudarnos" Fang Yin le explicó emocionada. "Mm…" pero de repente Xin'er ya no parecía tan convencido. "¿Ayudarnos así sin más? ¿Estás segura de que no quiere nada de ti?" Xin'er se cruzó de brazos. "No sé a qué te refieres" Fang Yin se echó a reír. "Tranquilo, nos ayudará como sea. Solo que hasta dentro de catorce días no puede venir. Así que tendremos que esperar" "Entonces, ojalá sea así. Yo, tengo curiosidad por saber cómo se escucha mi voz, y la tuya… A veces
Fang Yin y Xin'er caminaron durante un largo tiempo. Xin'er se encontraba débil. Aún así, se esforzó en seguir en pie. La nieve calaba en sus huesos y su respiración era débil. Se preguntaba cómo había acabado así. Xin'er en ningún momento dejó de observar a Fang Yin, quien desbordaba una increíble energía. Además, era hermosa en todos los sentidos. ¿Por qué lo había ayudado?Fue cuando Xin'er cayó en la cuenta. Estaba siguiendo a una extraña. Aunque tampoco tenía más opciones. Quizás, si ella no lo hubiera encontrado, ya habría muerto bajo la crueldad de la espesa nieve. Debía estar agradecido. ***"Ya casi estamos llegando. Por suerte, esta ha sido una de las pocas zonas que no ha sufrido tantos daños a causa de la guerra" Fang Yin estaba a su lado, así que Xin'er no escuchó sus palabras. Solo vio como numerosas luces se mezclaban entre los edificios. Como el florecimiento de las flores en la primavera. Siguió a Fang Yin a un lujoso edificio. Fuera, varios farolillos rojos de
Después de encontrarse con Shi MinZhe, Xu AnRong no durmió el resto de la noche. Había ido al estudio de Ming Hui para revisar sus registros sobre el cultivo dual, o más bien para llevárselos a su habitación. Pero la presencia de la otra persona lo tomó por sorpresa. Y al final se fue con las manos vacías. ¿De verdad esta era la única solución? Desde la muerte de Xiaolang no vio sentido enamorarse y mucho menos acostarse con nadie. Sin embargo, Baixue arruinó sus planes. No recordaba todos los detalles de ese momento, pero sabía que había hecho algo horrible. Sabía que le había hecho daño. Y sobre todo, sabía que era algo que nunca podría cambiar.Lo odiaba. Y el sentimiento era mutuo. Sólo que, tanto sus pensamientos como sentimientos, le traicionaban más de lo que le gustaría. Al igual que su cuerpo. Aquel acontecimiento despertó ciertas sensaciones que creía dormidas, como la excitación sexual. No tenía ganas de acostarse con nadie, pero su cuerpo le reclamaba atención. Medi