Capítulo 346
Mario los contempló en silencio, evocando su primer encuentro con Ana. Aunque no fue precisamente idílico, resultó inolvidable y satisfactorio, motivos suficientes para decidirse a casarse.

Ana, quien también miraba a la pareja, tenía los ojos brillantes por los recuerdos. Mario la rodeó con el brazo, un gesto protector y cálido. Durante el check-out, notaron la mirada penetrante de la recepcionista.

«¡Señor Lewis, eso fue rápido!», comentó ella en su interior, una observación que revelaba más de lo pretendido.

La pantalla de la computadora marcaba que apenas habían transcurrido treinta minutos desde su llegada, sin contar los preparativos…

Ella le entregó la factura a Mario, su voz cargada de un respeto forzado:

—Señor Lewis, que tengan un buen viaje.

Mario, percibiendo el juicio velado en su tono, la miró fijamente. Su mirada oscura y ligeramente irritada tenía un atractivo particular, dejando a la recepcionista casi incapaz de sostener su mirada...

Una vez afuera, Mateo, el chofer,
Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo