Había dormido con muchos hombres a lo largo de su vida en un intento de distraerse de sus problemas obteniendo a cambio satisfacción y un momento agradable dónde olvidaba el caos en que se había convertido su existencia desde hacía años, lo cierto es que si había pasado una noche junto a aquel muchacho era como si se hubiera borrado de su memoria por completo, pero de ser así.
¿Cómo sabía su nombre?En casos como esos era mejor fingir demencia hasta que sus recuerdos regresaran a su lugar y ella pudiera recibir algo de dinero para compensar aquel mal rato.— No sé de qué hablas, ni siquiera tengo idea de quién eres — Respondió levantándose del suelo.Aquello no le hizo gracia al joven, pero prefería discimular su descontento pese a que fuera un enorme golpe a su ego.— Me sorprende, dijiste que jamás olvidarías al hombre que te enseñó a hacer ciertas cosas...— Aparte de grosero y mal educado ahora también eres acosador sexual — Soltó indignada.— Te equivocas tarada, nosotros fuimos novios en secundaria, soy Mathew Hoogen, ¿Acaso no recuerdas los besos bajo el escritorio?Entonces cayó en cuenta de quién era el hombre que la miraba fijamente con esos ojos claros e intensos, lo recordaba, porque realmente le resultaba seductora aquella sonrisa o su voz ronca y agradable de oír, siempre fantaseaba con la idea de salir con un chico de un curso superior al suyo y de cierta forma lo logró.Aquel hombre era hijo de un personaje importante en el norte de Chicago pero ella con su poca paciencia y arranques de locura había logrado conquistarlo y no terminaba allí, habían tenido un apasionante romance en dónde ella siendo una adolescente inocente y sin experiencia decidió que su primera vez tenía que ser memorable.Y vaya que lo fué, lo cierto es que los años pasan y todas las responsabilidades que conllevan ser adulto hacen que incluso olvides muchos eventos de tu vida o solo le restes importancia.Eso explicaría por qué alguien no recordaría a su novio de secundaria.— Jamás pensé que aquel chico se convertiría en un completo idiota que va por la vida atropellando personas con una furgoneta.— Bueno para empezar todo esto es tu culpa, ya veo que no has cambiado nada, sigues siendo la misma psicópata de siempre y espero dejes el lío así o de lo contrario tienes las de perder...— Oh, déjame adivinar, dirás que tú papito te va a sacar de apuros, pensaba que podías valerte por ti mismo, ya veo que no — Lo insultó molesta.Ella tenía claro que era una mujer altamente impulsiva pero eso no significaba que dejaría que alguien cuya reputación también era cuestionable la llamara de esa forma.— Nunca dije eso y no me conoces en lo absoluto para suponer algo así.— ¿Ah no? Nosotros rompimos porque eras un puto títere que no pensaba por si mismo.— Rompimos porque te acostaste con mi mejor amigo...— Ay por favor, eso ni siquiera cuenta, tu habías terminado conmigo porque a ti te importaba lo que los demás pensaran de mi, y para tu información no me acosté con él, solo nos besamos y ya no estábamos juntos.— ¿Y eso lo hace menos importante? Cuestionó el muchacho con obstinación.— No he dicho lo contrario, pero el punto es que ni siquiera sé por qué que estamos discutiendo por algo que sucedió hace años, ya ni siquiera me interesa que me hayas golpeado con tu auto, me largo de aquí — Respondió con obstinación.Mathew la miró con seriedad mientras ella se sacudía su ropa y pretendía alejarse de él, sin lugar a dudas no era una buena forma de iniciar su día.— ¿Entonces sólo te irás? — Se atrevió a preguntar.— ¿Y que quieres que haga idiota? Sólo estoy perdiendo mi tiempo.— ¿Tu? Tengo cosas mucho más importantes que quedarme discutiendo con una estúpida que se atravesó en mi camino.— Entonces lárgate pedazo de m****a — Atacó Ivy está vez más furiosa.Lo que sea que su ex novio de secundaria tuviera que decir lo ignoraria, siguió su camino rápidamente hasta perderlo de vista, pero lo que más lamentaba realmente era saber que no había logrado sacarle dinero para variar. Tal vez debía resignarse y volver a casa a darse un descanso.Derrotada y con pocas ganas de vivir llegó a su vivienda en dónde no parecía haber nadie en esos momentos, el lado bueno es que podría dormir sin ningún ruido y despejar su mente.***********— Eres una desgraciada, ¿Sabes cuántas llamadas te dejé en el celular? Pensé que estabas muerta.Ivy no tenía que abrir sus ojos para saber quién le estaba dando almohadazos en la cabeza mientras pretendía dormir, Cristopher era su amigo desde hacía unos dos años, lo había conocido en la sala de espera rumbo a una depilación completa, era de esas amistades que no necesitaban conocerse de toda la vida para volverse especial y honestamente el único que tenía.— El que estará muerto serás tu si sigues fastidiadome, pretendía dormir ¿Sabes?— Me importa un carajo Ivy, ¿Sabes a quien me conseguí afuera del departamento?— Ni idea, pero ya que no logré descansar podrías decirme.— Es un hombre divino en todo el sentido de la palabra, con un cuerpazo, un culazo y unos ojos que te dejarían hipnotizada y...— Muy bien, ya basta de características físicas, ¿Quién era?— El me dijo que es tu ex, cosa que me sorprende porque madre mía, tu nunca te relacionas con nadie — Respondió mirándola con asombro.— Maldito Mathew...— ¿Quién es él? Bueno, lo que sea que esté sucediendo te mandó esto.Sacó un sobre de su bolso louis vutton y se lo extendió a su mejor amiga esperando alguna respuesta concreta de su parte, porque estaba pensando cosas no muy gratas.— ¿Cómo demonios sabe que somos amigos? — Cuestionó perturbada.— No me preguntes, yo soy el confundido aquí.— Dios mío, me dió cincuenta mil dólares en efectivo...— Ivy, no me digas que ahora te estás prostituyendo — Le reprochó mirando a su amiga con terror.— Por supuesto que no Cris, el me atropelló y ahora supongo que me está compensando por eso, es todo — Respondió la joven contando el dinero y sacando una pequeña nota que estaba al fondo."Si necesitas más para cerrar la boca avísame, dinero me sobra además de que es gratificante y hermoso verte sin decir una sola palabra"— Creo que no le agradas mucho a tu ex — Dijo Cristopher observando la carta.— Es un idiota, fuimos novios en secundaria, con quién perdí mi virginidad y el resto es historia.— Maldición Ivy, nunca cuentas las historias mas candentes.— Si te soy honesta no lo recordaba, nunca esperas que un romance de secundaria prevalezca con el paso de los años.— Pues el destino ha dicho lo contrario amiga.— Yo no creo en el destino, aunque no me molesta en lo absoluto que me haya enviado dinero, ya debo pagar el alquiler.— ¿No crees que estás cargando con demasiado tu sola? — Le preguntó mirándola con preocupación.— No tengo más alternativas, mamá está indispuesta y mis hermanos necesitan una buena vida, quiero que sean lo que yo nunca pude ser ¿Entiendes?— Y lo comprendo cariño, pero pienso que deberías tomarte unos días para descansar, tu madre está teniendo éxito vendiendo pasteles, ella lo entenderá, y con esa mini fortuna que te envío ese bombón bastará por un tiempo.— Quizás tengas razón, pero no quiero arriesgarme.Permanecieron en silencio por unos cinco minutos, Ivy había pensado un montón de veces en lo cansada que estaba pero amaba a su madre, adoraba a sus hermanos y le dolía que su vida estuviera arruinada gracias a alguien que ni siquiera existía y estaba descansando pese a todo el sufrimiento que había ocasionado.Merecía sufrir el mismo dolor que ella había vivido cuando Tim Montana una vez perdido todo en la mesa de juegos decidió que sería buena idea apostar a su esposa.Ivy tenía sólo diecinueve años cuando ocurrió la desgracia, se había decidido a vivir su vida enfocada en su futuro y en obtener buenas calificaciones pero últimamente las discusiones entre su madre y padre eran más intensas, algunas veces tenía que interferir y le dolía que el hombre que le dió la vida no hiciera ni el más mínimo esfuerzo en mejorar, ellos no tenían muchos objetos de valor en su hogar, él lo había vendido todo para poder seguir apostando.Era increíble como pasaron de tener una vida arreglada y buena posición económica a no tener estabilidad, una prueba más de que no había garantía de nada.Aún recordaba el nudo en su garganta al ver personas de mucho poder intentar llevarse a su madre, Ivy tenía presente que alguien debía cuidar de sus hermanos pequeños, no podían quedarse sin mamá, así que fué ella quién se entregó a aquel hombre sabiendo que cosas malas podrían ocurrirle pero importaba más que no lastimaran al resto de su familia, intuía que las apuestas acabarían
Cuando la policía se involucró en el caso por su desaparición no encontraron ni un solo rastro de aquel demente obsesionado con torturar mujeres, sólo a la joven desnuda suspendida con cuerdas desde el techo con múltiples heridas y lesiones en todo su cuerpo, Ivy no pudo hablar durante meses tras su experiencia en aquel lugar y su agresor jamás pagó porque este huyó.Supo también que su padre había sido asesinado a disparos unos días después de que ella fuera ingresada a emergencia. Richie era el responsable, tenía contactos y Frank le debía dinero que se suponía estaría pagado una vez ella se fuera con él, no sabía que le dolía más, que le hubieran hecho daño o la traición de su propio padre, el mismo hombre que de niña le contaba historias antes de dormir para tranquilizarse.Quien se suponía debía protegerla.La pesadilla nuevamente se hizo presente en la vida de Ivy cuando pensaba que al fin podía sentirse tranquila, su verdugo la había encontrado otra vez.— ¡Vengan niños! — Grit
Pov Mathew.— Esto es inaceptable, eres una maldita decepción Mathew, ¿Que no piensas antes de hacer las cosas? — Honestamente no.Leonard Hoogen, el ingeniero y CEO de una de la compañía de cosméticos Hoogen Beauty sabía que no viviría por siempre y tenía los ojos puestos en su único hijo, había depositado sus esperanzas en que Mathew pudiera sacar a la familia y todos sus negocios adelante pero no había hecho más que meterse en problemas y despilfarrar el dinero en fiestas, alcohol y mujeres.Se suponía que a los 25 años empiezas a tomar buenas decisiones, pero su hijo cada vez estaba más lejos de un futuro estable con una familia y vida honorable.— Estoy harto de sacarte los pies del lodo y arreglar todo con dinero, si vuelven a arrestarte por conducir a exceso de velocidad dejaré que te pudras en la cárcel — Sentenció alzando la voz.— Ay por favor papá, sabes que solo intentó pasarla bien, el trabajo es agotador...— Tus primos hacen el doble de lo que tú y no están quejándose
Pov Ivy.Por supuesto que se iba a embriagar, había tenido que alejar a su familia porque nuevamente alguien que había arruinado su vida amenazaba con regresar, a Ivy no le importaba en lo absoluto lo que pudiera sucederle, se lo repetía una y otra vez mientras se miraba en el espejo de aquel club, las personas que de verdad amaba ya estaban a salvo.¿Entonces por que sentía que todo se estaba destruyendo a su alrededor?Quizás porque asi era, en su empleo habían hecho reducción de personal y ya no la necesitaban, lo único positivo es que su madre había dividido el dinero y tenía lo suficiente para pagar alquiler y sobrevivir por un tiempo, era lo unico importante suponía. Otra idea que se cruzaba por su mente era poner fin a su vida, lo dejaría como el plan c.— Vamos amiga, vinimos a divertirnos, entiendo que te sientas mal de que ya no vivas con tu madre y los gemelos pero es por un bien — La animó Cristopher dandole palmaditas en sus hombros.— Sólo quiero embriagarme hasta fallec
— No creo que este sea el lugar indicado para tocar un tema como ese ahora que nos pusimos serios.Ivy tenía muchos sentimientos encontrados, si algo tenía claro es que no deseaba casarse nunca, mucho menos tener hijos, ya había sufrido demasiado y sabía que requería de mucho valor y estabilidad para ese paso, dos características que precisamente ella no tenía, por primera vez en mucho tiempo se sentía de más en aquel club, echó un vistazo por la pista en busca de su mejor amigo y lo pudo hallar pasándola en grande con su compañero de baile.Pensó que era mejor dejarlo disfrutar mientras ella hablaba con su ex quién guardaba silencio en la espera de una respuesta de la muchacha.— Podemos hablar afuera y luego regresar por tu amigo cuando volvamos adentro — Acabó proponiendo Mathew.A diferencia de ella, lucía tranquilo, tenía el control de la situación y sunque le enojara asintió. Sólo deseaba que su familia estuviera a salvo y tener una vida tranquila.— ¿Y si yo aceptará cuánto din
Ivy siempre desde niña soñaba con convertirse en alguien importante de quién pudiera sentirse orgullosa algun día, tenía todo lo necesario para lograrlo y agallas le sobraban, algo que en el presente le causaba una enorme decepción. No dejaba de pensar en aquella noche frente a Mathew Hoogen, sus ojos mirándola fijamente esperando una respuesta de su parte conteniendo una sonrisa siniestra, como si supiera que obtendría un "sí" antes de que la joven hablara.Era inevitable un amargo final como ese cuando la desesperación era cada vez mas evidente, todos tenían un precio, asi que cuando Ivy aclaró su garganta y aceptó el trato sabiendo que era una decisión arriesgada, la sonrisa del joven se hizo mas grande, le había dado lo que quería y sólo Dios sabía cuál sería su destino.— Hiciste lo correcto cariño, no te arrepentirás y saldrás bien premiada una vez se cumpla el plazo que planifiqué — Respondió tocando su hombro.— No me toques, y que conste, lo hago porque realmente necesito el
Ivy se sentía indefensa y jamás imaginó que volvería a experimentar una sensación como esa, de solo recordar todos los golpes que recibió y la forma en que fue abusada le daban escalofríos, el como su cuerpo fue ultrajado y usado como si de un juguete se tratase le generaba tanta impotencia dentro de si misma que alimentaba su furia, no entendía por qué la maldad siempre destrozaba a las personas buenas y estas se tenían que ver obligadas a sacrificar sus ideales para alcanzar una vida plena.Era exactamente como se sentía, pese a que Mathew le hablaba durante todo el trayecto a casa de sus nuevos suegros ella continuaba perdida en sus pensamientos, sabía que las mujeres de carácter inquebrantable no eran esposas sumisas y obedientes, pero también que debía actuar a la altura si queria conseguir el premio y lograr el objetivo de prosperar.— Te sienta increible el color blanco ¿Lo sabes no? Viniendo de alguien como Mat ese era sin duda un elogio destacable, él en cambio le restó impo
Cuando llegaron a la casa el lugar ya estaba bloqueado por la policía y completamente en llamas, Ivy intentó ingresar pero Mathew no se lo permitió, sabía que ya no tenía caso tener esperanzas de que su familia estuviera bien. La jóven en cambio estaba destrozada y por mucho que trató de contenerse, lágrimas empezaron a caer de su rostro acompañadas de la desesperación de tan solo imaginar todo el sufrimiento que tuvieron que vivir en su ausencia.Ella se esforzó hasta el final y estaba dispuesta a seguirlo intentando hasta que dejara de respirar, asi que cuando vió como trasladaban dos cuerpos sintió lo que era el verdadero horror y entendió que no existia la esperanza.—¡Mis niños! — Gritó sintiendo como un nudo se formaba en su garganta.Se aferró a los brazos de Mathew mientras Intentaba tomar aire y no desvanecerse hasta que a lo lejos vió a su madre correr hasta ella angustiada con sus hermanitos.¿O era solo un espejismo? — ¡Ivy! — No entiendo nada — Murmuró Mathew observando