Missie Vincents, viviendo un amargo momento en su adolescencia, conoce a un joven hombre que la ayuda y le brinda apoyo, en esa circunstancia adversa. Al pasar los días se da cuenta que el rostro y la mirada de aquel chico no los puede olvidar y decide buscarlo para entender lo que ella estaba sintiendo… Sin embargo el destino la lleva a otras fronteras. Una historia de amor… Un amor a prueba…
Leer másCapítulo 97“Dónde siempre hay amor”Entraron corriendo al cuarto de Elizabeth y Lois Vincents tenía su cuerpo abrazado mientras lloraba. –Mamá –Gritó Missie. Y Lois Vincents movió su cabeza negativamente.Missie corrió y se abrazó a su padre, juntos tenían en medio el cuerpo de Elizabeth Leanders, Missie como la madre maravillosa que le tocó tener, Lois Vincents, como la madre de su hija y la mujer que amo como a ninguna otra. Después de mucho rato Juanne levantó a Missie y Loís recostó en la cama el cuerpo sin vida de la bella Elizabeth Leanders. Dos días después sus cenizas fueron esparcidas en medio de las aguas del río Misisipi, afluente que ella defendió siempre y para el cual hizo innumerables campañas de limpieza y purificación de sus aguas para los habitantes de los lugares aledaños. Missie y Juanne junto con los niños regresaron al rancho después de pasar una larga temporada en la Villa de los Vincents en Luisiana. –Naty y Lois, si quieren quedarse en la villa pueden
“Un Matrimonio y un adiós”Missie y Juanne llegaron al rancho y todos los esperaban. La casa estaba ya adornada con arcos de Jazmines por todos lados. Su madre escogió esta vez solo jazmines ya que esa era la flor preferida de su hija.Missie casi corre a donde estaban sus mellizos en sus cochecitos tomando el sol de la mañana. Verlos le llenó de alegría y regocijo. Los cargó a los dos y Juanne la regaño llamando enseguida a las enfermeras para que los pusieran en sus coches.–Missie no te sobrecargues de peso que no estás para eso. Por favor evita agitarte.Missie sólo sonrió y le pasó la mano acariciando su mejilla.Sus padres también estaban muy emocionados.–Hija que feliz estoy hoy –le recibió su madre risueña pero Missie notó enseguida el sobre maquillaje que se había tenido que poner para disimular lo pronunciado de sus ojeras y la palidez de su rostro.Legaban en ese momento los del s
“Tu mirada en mis recuerdos”Juanne fue abriendo los ojos de a poco mientras Missie lo miraba con sus ojos brillantes y felices. Corrió al pasillo gritando–¡Doctor, Doctor!Enseguida llegaron los médicos hasta el cuarto y constataron el estado de salud de Juanne.–Ya estamos de vuelta –le dijo el médico a Missie, sonriendo complacido con la evolución del muchacho.Juanne sólo veía a Missie y le apretaba las manos. Missie temblaba en todo su cuerpo.Cuando el médico iba saliendo.Juanne Gritó:–Doctor por favor agarre a mi mujer por favor –. El doctor corrió y apenas si la pudo sostener al caer la muchacha desmayada en sus brazos. La llevó a una silla. La sintió que estaba ardiendo en fiebre.El doctor llamó a la enfermera y trajeron enseguida una camilla y se la llevaron.Juanne con mucho esfuerzo se puso de pie. Venía entrando Loraín con Dereck y le ayudaron a l
“ No me dejes sólo con tu mirada en mis recuerdos”Helen ya estaba nerviosa porque tenían mucho rato dentro de la casa grande y no lograban encontrar a los mellizos, su cometido era llevarse a los niños para después negociar con Juanne el trueque por su hijo. Pero Missie estaba dispuesta a lo que fuera con tal de tener a sus hijos fuera del alcance de esa mujer.Afuera se comenzaron a oír detonaciones y algarabías, de repente se oyó la voz de Gordon desde afuera gritar:–Juanne ¿están bien allá adentro?Missie se levantó corriendo para abrir la puerta, pero los hombres que acompañaban a Helen y a Roland no se lo permitieron.Empujándola la lanzaron sobre Juanne, quien sangraba. Éste se puso de pie como pudo, pues se mantenía mareado tras el golpe tan fuerte en su cabeza y su sangrado era a torrentes.&n
“Entre amigos”Al cabo de unos minutos regresó Eva a la cocina con Juanne.–Señora Olga, ¿cómo esta? –le saludó Juanne –sé que quieren conocer a los niños y saludar a Missie pero está muy tarde…–No Joven Juanne. No es por eso. Mire yo estoy aquí porque yo le vengo a rogar que saque a su familia de aquí ahora mismo. Esa gente ya están en el Rancho Los Luceros, en la región de del alto y dicen que vienen para acá. La señorita Missie y los niños están en peligro. Sáquelos de aquí ahora mismo.Juanne se puso serio.–Eva tráeme a los hombres de Rockie y del turco. Los quiero ahora mismo aquí –le dijo – Mamá Tulia démele un tecito a la señora Olga para que se tranquilice y usted señora Olga no se me mueva de aquí por favor.Juanne subió al despacho y llamó a Gordon, éste le confirmó la versión de la señora Olga. Juanne le pidió que le mandara a sus hombres y éste le dijo que ya estaban en camino desplegánd
¡Se descubren más trampas!Pasadas las dos últimas semanas y viendo que ya el rancho estaba a escasas reparaciones en los anexos solamente. Juanne decide aflojar con la seguridad para que las mujeres no se sintieran tan presionadas, especialmente Missie.Mandó a que los hombres que custodiaban la casa grande sólo fueran 6 y así disminuyó todo el personal cercano. Excepto en el bosque y las cominerías como tampoco en toda la falda de la montaña. Los Rancheríos los dejó a custodia de los mismos trabajadores que lo habitaban, ya que entre ellos mismos siempre se estaban cuidando.Nick y Andrea también estaban ya barrigones. Esa noche Nick les fue a visitar y habló con Juanne.–Esa gente me tienen es llevando información, ellos lo que quieren es dar con el paradero del niño joven Juanne. Esa mujer se vuelve como loca cada vez que l
AbombadosJuanne se preparaba para sacar el ganado junto con los demás trabajadores. Esa noche por la lluvia habían recogido todo el ganado que queda a desgranado de noche. A Juanne le avisaron que en el sur cerquita a la frontera se habían metido en un rancho y habían arrasado con todo. Los mismos pobladores se escondieron cuando vieron bajar de sendos rústicos donde hombres y mujeres muy bien plantados y armados hasta los dientes, sometieron a todos y no dejaron ni las alacenas con algo de comida.Inmediatamente lo llamó Gordon, le informó que habían robado simultáneamente otro rancho pero ese si estaba más hacía los lados de los rancheríos del rancho los 4 hermanos.Juanne se puso nervioso, pero Gordon lo tranquilizó. En un rancho se les en el rancho a la frontera se les cayó un bolso con pasaportes y permisos para pasar a Argentina. En ellos consiguieron los documentos falsos de Helen Heminway, como Valentina Rodríguez, e incluso u
“Cuestión de cotidianidad”Juanne y Missie llegaron al Bar “Mis recuerdos” y todos los recibieron como de costumbre con mucho entusiasmo.Se acercaron varios de los trabajadores y luego hicieron un grupo ameno. Pasado un buen rato llegó Nick el forastero y echándole un ojo afuera señaló a Missie y a Juanne. Los muchachos esperaron un rato y se despidieron de los presentes. El viejo Curry le dio un grito a Nick.–Nick, el patrón ya se va para el rancho, aprovecha esa cola hasta allá –se rió fuerte comentando a la vez –a ver si hoy me libro de tener que llevarte a cuestas y me duermo temprano.Los demás en el bar, le rieron la broma.Nick salió corriendo del baño aún subiéndose el cierre del pantalón.Cuando arrancaron. Missie miró a Nick dudosa.–Nick, ¿eso es verdad
Nick–Nick, no quiero que se estén arriesgando más. Eso es suficiente. Podemos averiguar por cuenta de las autoridades que rancho sería y que se haga el cerco allá. Eso sería lo ideal.–Eso no será suficiente y los vamos a perder otra vez. Déjeme actuar a mi Joven, yo sé cómo hacer las cosas.–Espera y hablamos mañana en la mañana o yo te mandó respuesta con Eva, temprano. Déjame discutirlo con Gordon y otros rancheros cercanos que están involucrados en esto.–Bueno listo joven. Mañana hablamos.Juanne mandó a Eva al anexo de Andrea y Nick temprano, pero cuando ésta regresó le dijo:–Ya el muchacho tomó, el solito, la decisión, se fue a la movida de hoy. Ese fue el mensaje que dejó con la señorita Andrea.–Eva en cuanto lo v