CAPITULO 144

A partir de ese día, las cosas fluyeron despacio entre Eros, su madre y yo.

Liam regresó para que pudiéramos ponernos de acuerdo en relación a los tiempos que el niño compartiría con cada uno y ambos decidimos que estuviera cada tres meses conmigo. Por supuesto, su madre nos acompañaría hasta que creciera un poco más y pudiera hacerme cargo sin su ayuda.

Del beso que le di, nada. No volvimos a tocar el tema, tampoco hablar de él y su vida a su lado. Era lo mejor. Meter el dedo en la llaga más dolorosa de nuestras vidas no borraría lo que ya sucedió.

Las negociaciones entre nuestros abogados fueron más difíciles que el acuerdo en común al que había llegado con ella de manera rápida. Al parecer, Mónica era aún un tema delicado entre ellos. Sin embargo, de buena gana, ambos decidimos que los primeros tres meses el niño se quedaría conmigo para que pudiéramos conocernos. Aunque no estaba demasiado seguro, le pedí a Ana que se mudaran directamente conmigo y con Marcel.

Adecuamos la habitac
Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo