35

Al día siguiente August se entrevistó con Horace, el hombre que, junto a Abel Robinson, llevaba sus empresas. Era un hombre en sus cincuenta bien parecido, obsesionado por la limpieza, de carácter mucho más afable que el de su compañero, pero igual de eficiente en lo que se proponía. Había sido socio de su padre, y luego suyo. Cuando él tomó las riendas de los negocios, en vez de menospreciarlo por su edad, lo que hizo fue apoyarlo y guiarlo.

Apreciaba mucho a este hombre, y lo respetaba, pero no sabía bien cómo se comportaría con alguien con quien no tenía lazos de ningún tipo, ni era de su mismo estrato social. Sospechaba que no lo discriminaría, pero no estaría totalmente seguro de eso hasta experimentarlo en carne propia.

Lucía un traje, uno que había comprado esa misma mañana, y aunque no era ni la mitad de bueno que el

Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo