Cuarenta y tres.3

¿La policía? No puedo creer que los interrogaran, pero tiene todo el sentido del mundo. Claro que debieron haber investigado algo. Uriel maldice en otro idioma y después se levanta, enfadado. A regañadientes me da la mano para ayudarme a levantar, su tacto es frío, envía una corriente eléctrica por mi brazo. Me suelta rápidamente y camina de vuelta a las escaleras.

―Yo nunca dije que tus hermanos fueran los asesinos, creo que soy la única que cree que son buenos.

Se detiene en seco, de espaldas parece mucho más imponente, cuando me mira de nuevo, veo cierta desconfianza, como si quisiera creerme, pero su instinto le dijera que no se puede confiar en una extraña.

―Gracias, pero debes irte ―esquiva un objeto en el suelo―. Te agradecería infinitamente si no dijeras que me viste, de verdad me metería en un problema enorme.

Se da la vuelta para subir las escaleras y pega la oreja en la escotilla para escuchar. Mi teléfono se ilumina y vibra en el suelo. Rayos, olvidé recogerlo cuando caí,
Sigue leyendo en Buenovela
Escanea el código para descargar la APP

Capítulos relacionados

Último capítulo

Escanea el código para leer en la APP