Capítulo 2

Estoy tomando una malteada, mientras mi chico realiza las labores de ser director del diario de la escuela y la zorra mayor está ahí de encimosa tratando de llamar la atención, es tan tonta que cree que nadie se dio cuenta por qué está metida aquí, falta poco para la graduación y está dando patadas de ahogada como diría Pedro el chico dominicano que esta de intercambio por aquí y por cierto hace unos postres magníficos, yo solo ruedo los ojos porque sé que mi grandote me ama y jamás voltearía a verla.

—Grandote ¿Falta mucho? — Y le doy una sonrisa para que no piense que estoy aburrida, si con tan hermosa vista quien se aburriría.

—No sé qué haces aquí en realidad, si no eres parte de periódico estas demás. — Juro que quiero llevar la fiesta en paz, pero ella y su veneno no ayudan, me bajo del pupitre y estoy a punto de cantarle sus cuatro verdades, cuando mi grandote se acerca y me sujeta de la cintura con una mano, creo que con un dedo sería suficiente.

—La que esta demás aquí eres tu Lena, ya cánsate te lo dije desde el primer día en que entraste aquí y mandaste al imprimir los folletos con un día equivocado, no sirves para periodista, eres un cero a la izquierda aquí dentro.

Termina lanzando unos folletos al suelo y yo solo me rio de ella, ya que se va zapateando como niña chiquita y me lanza una mirada que si matara yo estaría tres metros bajo tierra con florecita y todo

» No deberías dejar que esa bruja te saque de tus casillas amor — Esa manera tan dulce en que me lo dice me derrite, es como un oso gigante y apachurrable, me subo sobre una silla y me lanzo a sus brazos besándolo, me siento tan afortunada de tenerlo como aquel día en que

—No es una broma princesa, desde que te vi y mi mano y la tuya se sintieron juro que sentí una corriente eléctrica recorrer todo mi ser, nunca me había pasado y me di cuenta de que eras la indicada, me gustas Vanesa Parker, me gustas tanto que todo el día me la paso pensando en ti, la vez pasada casi llego tarde porque toda la noche me quede pensando en ti, es tan difícil decirte esto, pero si no lo hago mi corazón explotara ¿Quieres ser mi novia?

Juro que mi corazón se derrito y lo están recogiendo con una pala, este hombre que me lleva más de una cabeza de diferencia, está con los ojos cerrados y esperando una respuesta mía, ¿Cómo podría decirle que no? Si yo también me muero de amor por él, no tengo derecho al amor, no tengo derecho a tener una vida normal, pero ¿cuándo tendré la oportunidad que el chico que quiero se fije en mí y vivíamos ese romance adolescente con que todas sueñan?, seriamos la pareja más dispareja que ha existido, pero no quiero vivir pensando ¿Qué hubiera sido sí? Quiero vivir, quiero sentirme viva, sé que mis padres no apoyaran una locura como esta, pero al diablo por una maldita vez haré lo que yo quiero de verdad hacer que es hacer feliz a este grandote a partir de ahora será mi grandote.

—¡Si quiero ser tu novia Sebastián! Yo también no he dejado de pensar en ti desde que te conocí — Y me toma de la cintura cargándome como si yo fuera pluma y sus labios se juntan con los míos sin dejar de darme vueltas, es como un sueño soy la novia del mejor chico del mundo solo espero que la vida este de mi lado esta vez.

Estoy en casa con mamá que me está ayudando con mi vestido Borgoña Corte A Fuera del hombro Asimétrico Tul Vestidos de baile de graduación con Cuentas Lentejuela, me siento tan hermosa solo por un momento me permito salir de mi caparazón, solo por un momento me retiro estos brakets, solo por un momento me retiro los enormes anteojos que siempre traigo y me suelto el cabello por completo haciendo que caiga hasta donde empiezan mis caderas, me veo al espejo y quiero llorar de poder observarme, mamá me abraza fuerte sabe lo que esto significa para mí.

—Te vez tan hermosa, cariño juro que serías la niña más hermosa del baile, siento mucho que todo se dé de esta manera. — Pero ella es la que llora al final me permite tomarme una fotografía sola y otra junta a ella al final papá se nos une y tengo que volver a retocar mi maquillaje.

—Hija perdóname por hacerte pasar todo esto, eres una hija tan buena que no te mereces padecer esta tortura, soy un mal padre por arrastrarte a todo esto

Yo me inclino lo que el vestido me permite y lo veo haciendo que saque las manos de su rostro.

—Papá no digas algo como eso, estoy muy orgullosa del padre que la vida me dio, eres íntegro y es el mejor ejemplo que nos puedes dar a mis hermanos y a mí. Nunca dudes de lo buen padre y ejemplo que eres para tu familia.

Estoy dándole un beso en la mejilla cuando el timbre suena, él se levanta, ambos saben quién es

—Antes que se vayan voy a hablar con ese jovencito — Mientras él baja a saludarlo o amedrentarlo dándole una clase de educación sexual lo pienso, porque lo creo capaz soy su niña como dice el, porque mi papá es perro que ladra no muerde, aprovecho para que antes de volver a mis brakets, mis lentes, me veo por última vez recordando MI VERDADERO YO solo faltaba mi cabello rubio para decir esa que está en el espejo de verdad era yo.

—Cariño solo te puedo aconsejar que esta noche no hagas nada que después te puedas arrepentir. — Yo solo le sonrió, es que claro que esta noche no hare nada que haga que luego me arrepienta, lo que pase esta noche será algo con lo que quiero vivir toda mi vida, aunque solo sea una adolescente no soy como el resto, ellas no han vivido los últimos tres años siendo alguien que no son, ellos no han vivido en vilo del peligro con el miedo constante, no han vivido con ese temor de un día alguien te arranque los sueños y a los seres que más amas, esta noche será la más especial de mi vida, le voy a demostrar a Sebastián cuanto lo amo y que soy suya en cuerpo y alma.

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