18. Camino al infierno.
Llegamos al domicilio de Guachiré, Soto bajó y kos pidió calma, que el pobre tiene sus días de desvarío y no podemos entrar por entrar a su vivienda, ya que seríamos cadáveres antes de pronunciar Mississippi. En consecuencia avanzó con lentitud por el caminero del portón hasta el pórtico, lanzó su arma en el césped y levantó las manos para llegar hasta ahí. una vez frente tocó la puerta. esperando a que el hombre camicase haga su aparición, pero nadie se manifestaba, todos empezamos a dudar si el seguía viviendo ahí, ya que la vivienda era precaria, le faltaba mucha atención. Prácticamente parecía estar abandonada.

después de varios intentos Soto dio vuelta y avanzó hasta su arma para así salir del lugar, pero escuchamos un silbido, emulando el graznido de algún tipo de ave. algo como CHICHU, CHICHU, CHICHU-CHU. Soto se detuvo de estrépito. miramos a todas partes y sacamos nuestras armas, ya que no sabíamos si la vida de El detective corría peligro. Soto volvió a alzar las manos y far
Continue lendo este livro gratuitamente
Digitalize o código para baixar o App

Capítulos relacionados

Último capítulo

Explore e leia boas novelas gratuitamente
Acesso gratuito a um vasto número de boas novelas no aplicativo BueNovela. Baixe os livros que você gosta e leia em qualquer lugar e a qualquer hora.
Leia livros gratuitamente no aplicativo
Digitalize o código para ler no App