Ya han pasado dos días desde que tuve esas pesadillas y no le he contado nada de lo que veo a nadie.
Ahora me estoy preparando para el primer día de la Universidad. Me pongo una saya pegada a mi cuerpo negra de cuero y una enguatada gris, acompañando esto me pongo unas botas grises de tacón alto que me llegan por las rodillas y me trenzo el cabello porque suelto se me enreda mucho.Bajo a desayunar y ya están todos en la mesa. Nos sirven mi desayuno favorito Hot cakes de manzana y mi hermano me mira con una sonrisa. Seguro fue idea suya.—Hermanita quiero darte un regalo por el comienzo de curso —habla mi hermano, se para y me coloca una manilla de oro con un lobo aullando de dije.—Es hermosa, gracias —lo abrazo.Cuando mi mejor amiga y yo terminamos de desayunar, nos vamos a estudiar.Al llegar a la Universidad me di cuenta de que era enorme, así que aquí se debían dar muchas carreras universitarias.—Bueno, aquí nos separamos.—¿Por que no elegiste empresaria como yo? —le reprocho.—Me gustaría más ser cirujana.De momento Carol y yo nos damos cuenta de que todos callan y miran la puerta. Por ella entran tres chicos, me fijo y uno de ellos es mi hermano. ¿Qué sucede aquí? Miro a los otros dos chicos. Uno mide 1.90 y el otro es del mismo tamaño que mi hermano. El de 1.90 es de pelo marrón oscuro y ondulado, ojos azules grisáceos y bueno, ni hablar de sus músculos. El otro chico es muy parecido en las facciones a mi hermano solo que este es rubio. Miro a una chica a mi lado y tengo que preguntarle.—¿Por que tanto silencio cuando ellos entraron?—Se ve que eres nueva. Son los que ponen las leyes aquí. —responde la chica, nerviosa.—No escuches esas cosas Roni. Sabes que tu hermano no es un tirano.Me voy a acercar a mi hermano pero alguien me detiene y me pone contra las taquillas. Es el chico de pelo marrón y sus ojos brillan de una forma muy irreal.—Mia.—¿Que dices?, suéltame. —intento apartarlo con un movimiento brusco pero nada.Cuando al imbécil que me tiene acorralada le da por soltarme, sin pensarlo dos veces me voy a mi primera clase y para mi buenisima suerte, el chico estudia lo mismo que yo y se sienta a mi lado.—Déjame en paz —susurro con fastidio y me giro para ver por la ventana pero este se para en frente.—Así que tú eres la hermana de Brandon. B y V al fin juntos.—¿Cómo sabes mi nombre?—Yo lo tengo que saber todo de por aquí.—Ok, lo único que te pido es que no me molestes por favor.—Como quiera señorita. —se aparta de la ventana y se vuelve a sentar a mi lado.Genial.Las horas fueron eternas junto al estúpido a mi lado, hasta que por fin llegó la hora de ir a casa. Al darme cuenta que Carol no vendría conmigo decidí ir a pies hasta casa. Si, estaré un poco loca porque era como un kilometro, pero quería conocer la ciudad. Siempre me ha gustado la naturaleza y respirar aire fresco.También tenía un trabajo para la asignatura de sociales y era investigar sobre la cultura y religiones de los primeros pobladores de la Ciudad Victoria.En mi paseo me metí en un bosque que me parecía bastante lindo, en él me encontré con un chico sentado en la hierba.—Hola —lo saludo—. ¿Eres de por aquí?—Según lo que quieras saber.—Quiero saber sobre la cultura y los primero pobladores de Victoria.El chico se gira y me mira, en lo primero que me fijé fue en los magníficos colores de su iris, tenía los ojos verdes pero también azules, su cabello rubio rizado le cae un poco en la frente y tiene una sonrisa encantadora que transmite paz.—Se dice que en mil trescientos se decubrió la existencia de seres sobrenaturales en este lado de la ciudad.—¿Seres como cuáles?—Dicen que la curiosidad mató al gato —me responde.—Muy chistoso, en fin, si no me vas a dar información por lo menos dime a dónde puedo ir para investigar esos sucesos o un lugar donde se encuentre el espíritu de ese gato chismoso.El chico abrió la boca para responderme pero algo lo detuvo, se puso de pies con rapidez y se acercó a mi.—Te aconsejo que no busques esas respuestas y te vallas rápido de aquí.No me dio tiempo de poder preguntarle a qué había venido su advertencia, desapareció así de la nada.Viendo que no iba a obtener respuestas, recogí mis cosas del césped y me puse de pies. Un sonido de una rama rompiéndose me alarmó.—¿Quién anda ahí?No salió nadie, o bueno, yo no lo vi en aquel momento ni sabía en qué mundo me acababan de introducir.Una persona me sorprendió por detrás, inmovilizándome e inyectándome un líquido que me hizo desvanecer enseguida.Y aquí damas y caballeros, es cuando empieza esta historia.Al despertar estoy en mi habitación. El chico de la escuela está durmiendo en un sofá frente a mi.—Mmm… ¿qué haces aquí?—Cuidarte preciosa. —Me llamo Verónica no preciosa y lo sabes.—Estaba esperando a que despertaras preciosa. —me acaricia la mejilla pero aparto su mano.— No hagas más eso —me dice en un tono seco y se gira dándome la espalda—. A partir de hoy vivimos juntos.—¡¡Estás loco si crees que mi hermano permitirá esto!! —grito furiosa— ¿Quién te crees?—¡Yo soy Dayron Wolff y harás lo que te digo! —me sorprendo al oír su nombre, es bastante lindo.— Puede que haya cedido a no llevarte conmigo hace dos dias atrás, pero ahora ni tu hermano ni nadie puede cambiar mis decisiones.—Me importa una mierda quien seas. Me importa una mierda lo que permitas o no. Solo te advierto que mi hermano nunca me dejará con un desconocido. Y si se atreve a hacerlo, te acusaré de secuestro y al él de tráfico de personas.—Ya lo veremos. —noto como tenía una sonrisa ladeada en su rostro aunq
—Permiso, voy de salida —le informo a ambos hombres pero cuando quiero salir no me lo permiten.—No puede salir Luna. Tengo ordenes estrictas del Al…—¡Que me llamo Verónica! —lo interrumpo.— Y puedo salir si me apetece.—El señor no dijo eso.—¡¡Me importa un pepino lo que diga tu señor!! —grito ya histérica intentando salir, pero es en vano.—¡¿Quién ha dicho que está permitido gritar en mi casa?! —escucho la voz del imbecil detrás de mi.—Señor, ella quiere salir.Aproveché que ambos guardias estaban distraído y empecé a echar una carrera fuera de la mansión, por suerte la verja estaba abierta porque si no me hubiese estrellado.—¡¡Verónica vuelve aquí!! —me grita Dayron, desesperado.Yo sigo corriendo como loca en dirección al bosque pero antes de poner un pie en este él me atrapa.—¿No entiendes lo que es que vuelvas? —A ver, si entiendo el español pero no sigo órdenes de idiotas.Él me mira con diversión pero al pasar su vista de arriba abajo su rostro se convierte en uno furio
Mi hermano me acerca al rubio el cual ahora que me fijo tiene los ojos miel.—Verónica, él es nuestro primo. —esto me ha dejado en un pequeño shock. Nunca me han dicho que tengo más familia aparte de mi hermano y mis padres. Me dijeron que mi padre era hijo único.—Eso es imposible Brad, nuestro padre era hijo único.—Hermanita por favor siéntate —me siento intentando procesar todo y mi hermano en la silla a la derecha mia ya que estoy de cabecera en la mesa. Mi hermano me toma las manos y mi primo está parado detrás de él.—Por favor explícame esto ahora mismo Brandon Smith.—Roni, como ves nosotros dos nos parecemos mucho, la razón es que padre era gemelo de su padre y por eso nos parecemos tanto. Solo que él es rubio por su madre y yo soy de pelo por nuestro padre y ojos verdes por... mi madre.—¿Por que nunca me dijeron nada?—Porque quería que lo conocieras tú misma.—Y es mi novio —notifica Adelaide.—Y yo soy pareja de Carol. —me revela mi hermano dándole un beso en los nudill
—¿Tú lo sabías Carolina? —pregunto al borde del llanto, ella intenta tocarme pero retrocedo.—No tenías que haberte enterado así.—Pero me enteré. —subo a la habitación y ella detrás de mí.—¿Tú también eres una de ellos?—En cierto modo lo soy —responde—. Tú también lo eres, pero te convertirás cuando cumplas dieciocho. —mi boca se abre en forma de; ¿qué?—Yo no puedo ser un bestia. No lo seré, no, primero me mato.—Roni, creo que tú hermano te explicará mejor esto. —el mencionado hace presencia en el lugar y mi supuesta mejor amiga, que me oculta demasiadas cosas, se va.Aunque estoy muy molesta con él lo abrazo y comienzo a llorar en su pecho. Cuando me calmo comienza a hablar.—Hermanita, cuando éramos pequeños papá habló con un brujo para que retrasara tu transformación y…—¿Y qué Brandon? ¿Cuántas cosas más me ocultan?—Y te convertirás en tu cumpleaños dieciocho. —sé que no es eso lo que me quería decir pero asiento.—¿Qué era lo que atacó a Dayron?—Un vampiro —¿WTF?—¿Algo má
Despierto un poco incómoda, pues Dayron ya no estaba a mi lado y yo que seguía aferrándome a la almohada pensando que sí. A ver qué no se forme alboroto, aún sigo enfadada con él pero me encantó cuando me abrazaba toda la noche con miedo a que me escapara.Tocan la puerta y doy permiso para que pasen un poco adormilada aún. Por la puerta entra Adelaide con bastante ropa en sus manos y la ayudo. Luego sigue entrando más y más ropa hasta que la cama y los asientos se llenan de montones de estas.—Por Dios, cuando Dayron dijo que traerían ropa no me imaginé esto.—Mi hermano es un poquitín bastante impulsivo a veces. —bromea esta sonriendo.—Bueno, ¿me puedes ayudar? Es que no soy muy buena eligiendo la ropa. —Ade sonríe emocionada de que por fin nos estemos entendiendo.— Aquí se encuentran los pijamas, creo que sólo necesitaré dos pares. —señalo el montón de ropa pequeño que está en una silla.Después de un rato sabiendo un poco de la vida de Adelaide junto a mi primo, los cuales llev
Verónica.Cuando Dayron sale de la habitación, enseguida una empleada me trae el desayuno.Unas horas más tarde me doy un baño, me pongo un vestido blanco con unas plataformas del mismo color. Cepillo mi cabello para que se seque y lo coloco a ambos lados de mi cara. Me pongo la pulsera que me regaló mi hermano, mis pendientes favoritos desde que soy pequeña y un collar de perlas que me regaló mamá al cumplir los quince. Sintiendo que la temperatura estará un poquito baja me pongo una capa blanca.Bajo al living y Dayron se queda maravillado al verme.—Se te va a caer la baba. —hago como que me limpio.—Razón no me faltaría. Eres la mujer más hermosa del mindo.Eso me hizo sonrojar y no pude ocultarlo.—Ya podemos irnos —le digo cuando llego a su lado.—Si, vamos. Él me carga a caballito y corre a su velocidad sobrenatural hasta que llegamos al pueblo. Es tan diferente del área de la mansión. Se escucha a los niños jugando en las calles, las vecinas chismeando por nuestra llegada y
Al despertar pensaba encontrarme a Dayron a mi lado pero no estaba. La verdad me molestó que no se quedara a pasar la noche conmigo.Saco la absurda idea de mi mente.¡Ni siquiera somos nada! Aún. Y se despidió de ti anoche estúpida. Sí, así es como me trata mi asquerosa mente.Me levanto y aseo. Me pongo ropa deportiva y cojo una toalla para el sudor. Al entrar en el gym, todo estaba arreglado, había pesas, caminadora y todo tipo de equipo para ejercitar. Decido la caminadora.Al terminar me moría de hambre ya que hice ejercicios en ayuna. Fui a la cocina y no había nadie.Me metí en mi propio mundo y pensé en todo lo sucedido hasta ahora.Mi madre me ocultó esto por bastante tiempo. Carol tenía una relación de año y medio, hablando de eso, hace días que no la veo, seguramente anda de melosa con mi hermano.—¿En que tanto piensas? —la voz de Dayron me sobresalta un poco y me corto con el cuchillo.— Lo siento. —el chico se para detrás de mi, toma mi mano y chupa el dedo cortado.—Gr
Eran las cinco de la tarde cuando llegamos a casa. Dayron se quedó en su despacho y yo fui directo a la habitacion, donde se encontraba mi mejor amiga.—¡Carol! —corro hacia ella y la abrazo.—Siento no haber estado mucho tiempo contigo estos días.—No importa, ahora estás aquí.—Bueno ¿cómo te has sentido con Dayron?—Estamos bien. Las cosas fluyen poco a poco.—Me alegra mucho escuchar eso. Él te quiere, al fin y al cabo eres su mate Roni.—Lo sé. ¿Carol me puedes explicar mejor el tema de los mates?—Claro. El mate de un lobo, es la persona con la que está destinada a estar por toda la eternidad. Si lo rechazaras él tendría un dolor profundo, ya que no puede vivir sin ti. Los lobos sólo envejecen a partir de qué encuentran a su mate. Si no la encuentran pueden pasar 1000 años y aparentar tener de 17 a 25 años. —Oh, ya entiendo.Carol y yo nos quedamos viendo películas un rato hasta que se va y yo me vuelvo a quedar sola.Siento dolor de cabeza y mi voz no sale. Por suerte estoy en