¡Solo nos queda el epílogo final!
Cinco años después…Las doce manadas creadas por la reina de los lobos progresaron con rapidez por la ayuda mutua entre ellas. Se reunían cada seis meses en el lugar donde inició todo, le entregaban un reporte de nuevos miembros, firmas de acuerdos y festejar por el éxito.Aunque Blue solo menciono doce alfas, ella también formó su manada The Moon of royalty en la cual conviven lobos, vampiros, brujos y humanos era la que más números de integrantes posee. Escondida en el bosque por grandes hechizos de protección en el que solo personas con buenas intenciones y puras de corazón podrían atravesar.En esos años Blue dirigió con sabiduría cada etapa de desarrollo de su manada con la ayuda de sus amigos y el hombre con el cual contrajo matrimonio, Stefano quien no recuperó sus recuerdos como Oliver Lee, sin embargo, eso no le fue un impedimento para que su luna lo amara.Ahora para ambos su mayor deseo era tener un bebé, ya que era la promesa que la loba le había hecho a su esposo de que e
Dicen que cuando te mudas a una nueva ciudad es porque quieres crear una vida nueva, nuevos amigos, vecinos y tal vez en el caso de una joven de diecisiete años; un novio. Todas esas características no son parte de Blue Harrison que desde su primera transformación ha tenido que tratar de no resaltar en las escuelas que ha asistido. Es un tormento para cualquier adolescente cambiarse de ciudad dos veces en un año. —Señorita…. Señorita, ¿me está escuchando? —la joven de cabellera rubia ceniza dirige su atención al maestro que la mira con cara de pocos amigos. —Disculpe, señor…—ella ni siquiera recuerda el apellido del profesor y eso provoca que sus compañeros se rían. —Fendel —le dice con su ceño fruncido—. Si usted quiere ingresar a mi clase deberá cambiarse ese color de cabello, ya que en este instituto está prohibido teñirse de manera escandalosa —señala su cabellera con disgusto. —Pero…. —Alguien quiere llamar la atención —se burla uno de atrás ocasionando el murmullo y risa
Un grito en el bosque provoca que Blue salga abruptamente de su sueño. Se escuchan pasos acercarse a la cabaña, Blue muy asustada y curiosa se baja de su cama para poder aproximarse a la puerta. Pega su oreja a está intentando escuchar lo que está ocurriendo fuera. De repente la puerta es forzada bruscamente, dándole un golpe que la hace retroceder unos pasos. Una figura oscura entró a la habitación activando todas las alarmas mentales de Blue. ¡Un intruso! Blue tuvo la intención de gritar por ayuda cuando una mano le tapó la boca con fuerza y la jaló con sus brazos hasta su pecho. Un olor a sangre es lo que desprende el desconocido. —Layla, ¿Qué hacemos? —interroga a su loba observando al hombre en silencio con horror. —Planea algo tú, papá no quiere que utilicemos nuestro poder —responde asustada. —Mierd@ —escucho que dijo el sujeto detrás de ella con su voz ronca. El desconocido retrocedió con Blue mientras que fuera se escucharon más pasos llegar provocando que el corazó
Los pasillos del instituto Moon se encuentran totalmente vacíos, ni un solo alumno caminando por este con excepción de Blue que por lo ocurrido anoche acaba de llegar tarde a su primera clase del día, se detiene frente a la puerta del aula sin idea de qué hacer.—¿Esperas una invitación? —cuestiona una voz gruesa detrás de ella provocando que se asuste, Blue observa al chico con chaqueta negra y de figura imponente.—Yo… no… —balbucea, él pone los ojos en blanco y abre la puerta llamando la atención de todos en el salón.—Señor Lee, tarde como siempre —murmura el maestro mirándolo con decepción.—Le mostraba a la nueva como llegar al salón de clases —dice ingresando al aula quedando Blue descubierta e incómoda por la miradas que van a ella.—Que suertuda —escuchó que dijo una compañera.—Oliver Lee dando a la nueva ¿Qué le vio? —los murmullos comienzan a escucharse bastante altos en el salón.—Silencio —ordena el profesor—. Blue Harrison, ¿cierto? —Ella asiente al maestro—. Pase y tom
—¿En qué años fue la independencia de Canadá? —cuestiona la joven loba a Oliver que lleva un puñado de papas fritas a su boca. —En el año 1867 —le responde sin dudarlo. —Bien. Una semana tiene Blue ayudando a Oliver con sociales y eso ha provocado que la envidia de las porristas aumente. Los rumores de que son parejas también se volvieron más fuertes, sin embargo, ellos no se inmutan y continúan forjando una amistad. —¿Pensaste en lo que quieres como agradecimiento? —cuestiona. —Ya te dije que no quiero que me des algo —murmura. —¿Ni un helado, ropa, maquillaje? No sé, cualquier cosa que les guste a las mujeres —trata de persuadir a Blue. —No sabes aceptar un favor ¿verdad? —pregunta. —Eres rara. —Gracias por recordarme la palabra que escucho todos los días en el pasillo —él frunce su ceño. —Pensé que todo eso había terminado. —Solo ignora lo que dije —este niega. —Dime nombres y los mandaré al odontólogo —enseguida esta niega, lo que menos quiere es que él se busque probl
Oliver no se acercó a Blue en la cafetería como lo hacía hace días. La joven loba se enteró de que lo reintegraron al equipo porque sus calificaciones en sociales mejoraron. Aunque ella no recibió invitación para el cumpleaños de Oliver, Blue trató de verle el lado bueno. Llevaba meses ilusionada con su cumple. Era un día que podía recibir todo el amor de su padre sin tener que compartir con Brenda. Como una pequeña tradición entre Blue y su padre, él solía preparar dos regalos de cumpleaños. Uno de Tagger, otro por parte de su difunta madre. No quería que Blue sintiera la ausencia de su madre. Entre todos los regalos, uno de los favoritos de Blue era el osito de felpa que regaló su padre cuando era muy pequeñita. Le decía Tagger que el osito le protegería por la noche como si estuviera al lado de él. Otro…ahora le hizo recordar a Oliver. Era un collar como regalo por parte de su madre, en forma de media luna que le recordaría a Blue eternamente de dónde proviene y que la mita
Blue observa desde la entrada la lujosa casa, no esperaba encontrarse con este tipo de fiesta en la que todos andan con vasos rojos y fumando en cada esquina, sin embargo, lo que más llama su atención es ver que algunos se encuentran disfrazados. Esto le quita las ganas de querer ingresar. —¿Esperabas una fiesta con payasos y globos? —cuestiona Layla sacándola de su impresión. —Oliver no menciono algo sobre disfraces —habla ignorando el sarcasmo de su loba. Nerviosa e incómoda por algunas miradas decide ingresar a la lujosa casa en donde el ruido es bastante descomunal para los oídos de Blue, camina entre el mar de adolescentes que se mueven al compás de la música. —Las hormonas aquí se encuentran muy alborotadas, no tomes ninguna bebida —le advierte. Blue decide hacerle caso y se dirige a una zona donde hay pocas personas, espera no encontrarse con las del equipo de porristas. No quiere problemas y menos en un lugar donde un escándalo puede llamar la atención de cualquier lobo.
—Oliver —este se separa de Blue para llevar su mirada a Dereck su co-capitán. —¿Qué sucede? —interrogó. Dereck de reojo mira a Blue y luego a Oliver, no esperaba verlo con esa chica otra vez y menos después de que en los vestidores le dijo que no tenía nada con ella, ya que conoce a su amigo desde hace mucho tiempo. —Te esperan para hacer un video —le dice, por la mirada que le da a Oliver este enseguida entiende que se trata de chicas deseando felicitarlo. —Voy en un minuto —el co-capitán decide retirarse dejando a Oliver solo con Blue. —Tengo que irme —murmuró la loba después de ver la hora en su teléfono. Blue sigue aturdida por la viagra y el fogoso beso con Oliver. —Es temprano todavía —le dice. —Mi padre no tarda en llegar y… —Sh… tranquila, ¿quieres que te lleve? —interrogó. —No, ve y disfruta de tu fiesta de cumpleaños —este la miro dudoso. —Bien —sujeta su rostro para plantarle un pequeño beso—. Nos vemos en el instituto —se retira dejándola allí parada mirándolo i