Oliver LeeAl despertar mi cabeza me da fuertes punzadas que me obligan a quedarme quieto el suave colchón, es como si tuviera una resaca lo cual es imposible dado a que no soy un humano y nunca me emborracharé.—Mierda —me quejo llevando mis dedos hasta mi sien y obligando a mi cuerpo a sentarse, no he conseguido abrir mis ojos y agudizar mis sentidos es sentir que mil agujas muy afiladas atraviesan mi cerebro.—Sigue siendo el mismo quejumbroso —esa voz delicada me obliga a entrecerrar mis ojos para poder enfocar, es una mujer, se ve muy elegante y su cabello recogido en una perfecta cola mientras en sus labios logro visualizar una enternecida sonrisa.Trato de recordar quien es, sin embargo, no tengo la más mínima idea aunque en lo más profundo de mi alma siento alegría de verla.—¿Qui-én e-res? —cuestionó con voz carrasposa, ni siquiera logró reconocer mi tono al hablar.—Mi nombre es Mildre —se levanta del sillón y estira su mano hacia mí, lo que me pone en alerta enseguida, ella
—Bruja, ¿le freíste el cerebro? —cuestionó el vampiro con su ceño fruncido.—Técnicamente borró algunos de mis recuerdos —la defiende Stefano desde el sofá sin siquiera levantar la vista de su viejo libro. Lee algunos hechizos tratando de encontrar el que lanzó para tener una vida nueva en la que se supone se llama Oliver Lee.—Fue un error, no sabía hacer ese hechizo y solo seguí lo que dejaste escrito allí —les dice. Donovan deja salir un bufido, no espera tener más problemas y ahora sabe que ese chico no le sirve para mucho sin sus recuerdos de su vida como Oliver porque conociendo al orgulloso Stefano, él no querrá acercarse a la hija de la luna.—El hechizo no tiene ningún fallo, pero de alguna manera siento que algunas cosas no están en su lugar en mi cabeza —toca su sien para enfatizar más sus palabras, Stefano cierra el libro—¿Qué se supone debo recordar tan urgente? Sé que este vampiro no está aquí porque quiera algún hechizo de amor —tanto Donovan como Mildre adoptan una pos
Cuando Stefano abrió sus ojos ambos presente lo miraban en espera de que la larga historia que le contaron de su vida como Oliver Lee haya funcionado para traerle de regreso sus recuerdos.—No funciono —les dice con cierta frustración en su voz—, mi vida como Oliver fue eliminada en su totalidad de mi memoria, ni siquiera Raksha recuerda —añadió poniéndose de pie.—Ya no podemos seguir perdiendo el tiempo, Blue corre mucho peligro —Donovan los miro a ambos sin expresión alguna—¿Vienen? —interrogo a lo que ellos asienten para salir juntos de la mansión.El trayecto hacia el pueblo es rápido, Stefano se encuentra sumergido en sus pensamientos tratando de manera forzada de recordar cómo fue vivir al lado de su amada por tanto tiempo. Su mayor anhelo durante años fue estar con ella, casarse y formar una familia lejos de todo el conflicto de manadas, sin embargo, Senna siempre estuvo destinada a gobernar a los demás.La preocupación de Senna fue cumplir su misión bajo sus términos, sin emb
Stefano desliza con delicadeza el cepillo en el cabello de Blue, no se ha separado de ella en días. Le lee historias e incluso ha cantado canciones que antes le dedicaba, suspiro agobiado, le molesta tener tanto poder y no lograr hacer nada por ella en este momento. —Debes despertar copo de nieve —murmura depositando sus labios sobre su frente—, sé que te gusta ser la bella durmiente, pero ya debes reponerte y arreglar la situación —dice. Hace una semana regresó Donovan con la mala noticia de que la sacerdotisa fue eliminada y ya toda esperanza recae en la hija de la luna, ella es la única que puede saber cómo se procederá para la ascensión del nuevo rey o eso era lo que todos esperaban. «Senna camina por la pradera, sonríe al reconocer el lugar en el que se encuentra y corre en su búsqueda hasta que al fin da con su paradero siendo recibida por sus brazos abiertos. —Hija mía —dijo con su voz calmada. —Madre —se separa mirándola con una genuina sonrisa en su boca, Senna no tiene n
La noticia fue tomada bien por los presentes, no esperaban más que un cambio y alguien que pueda detener las guerras, sin embargo, Tagger no quería que su hija se arriesgara, ella lo es todo para él. —Blue, sé que tienes todas memorias y que quizás sea la loba más poderosa, pero ¿estas segura que quieres ser una reina? —interrogó mirándola organizar su pequeña cabaña. —Papá he nacido para esto, ya no puedo escapar más de mi destino y si en esta vida puedo hacerlo mejor lo haré. Todos merecemos un cambio, mis hermanos y hermanas merecen estabilidad —le dice. —No quiero que te pase algo —susurra. —Por eso te tendré a mi lado a ti y cada persona en esa cabaña me ayudaran a restablecer el orden —toma sus manos y lo mira a los ojos—. Lo vamos a lograr, no te preocupes —añadió. Este le dio un beso en su frente antes de abandonar la pequeña cabaña, Stefano ingresó minutos después y esta lo recibió con una sonrisa la cual este correspondió, le dio un abrazo y un casto beso. —Las cartas
Todo estaba organizado, el nuevo emblema de la hija de la luna fue creado por sus amigas y Blue le dio el visto bueno cuando vio que expresa un nuevo comienzo a lo que ella fue destinada. —El lugar está lleno de alfas, no creo todos se tomen bien la noticia de que solo existirán doce alfa en el mundo y que si no sellan el o aceptan el pacto se quedarán como lobos para toda la eternidad —murmuró Stefano mientras ajustaba su corbata. —No hay otra opción, es la indicación que dio la diosa de la luna y es la que captaremos —este suspira y asiente—. Sé que te preocupa la seguridad, sin embargo, vamos a lograr que esto salga bien —añadió. —Confía en mí —este fue hasta su luna que viste un vestido blanco y una corona de flores para depositar un beso en sus labios. —Lo hago, mi reina —le sonríe. —Senna ya es hora —anunció Mildre desde el otro lado de la puerta, Stefano ofrece su brazo y la guía hacia el patio trasero en donde todos enseguida depositan su mirada en la hija de la luna. Los
Cinco años después…Las doce manadas creadas por la reina de los lobos progresaron con rapidez por la ayuda mutua entre ellas. Se reunían cada seis meses en el lugar donde inició todo, le entregaban un reporte de nuevos miembros, firmas de acuerdos y festejar por el éxito.Aunque Blue solo menciono doce alfas, ella también formó su manada The Moon of royalty en la cual conviven lobos, vampiros, brujos y humanos era la que más números de integrantes posee. Escondida en el bosque por grandes hechizos de protección en el que solo personas con buenas intenciones y puras de corazón podrían atravesar.En esos años Blue dirigió con sabiduría cada etapa de desarrollo de su manada con la ayuda de sus amigos y el hombre con el cual contrajo matrimonio, Stefano quien no recuperó sus recuerdos como Oliver Lee, sin embargo, eso no le fue un impedimento para que su luna lo amara.Ahora para ambos su mayor deseo era tener un bebé, ya que era la promesa que la loba le había hecho a su esposo de que e
Dicen que cuando te mudas a una nueva ciudad es porque quieres crear una vida nueva, nuevos amigos, vecinos y tal vez en el caso de una joven de diecisiete años; un novio. Todas esas características no son parte de Blue Harrison que desde su primera transformación ha tenido que tratar de no resaltar en las escuelas que ha asistido. Es un tormento para cualquier adolescente cambiarse de ciudad dos veces en un año. —Señorita…. Señorita, ¿me está escuchando? —la joven de cabellera rubia ceniza dirige su atención al maestro que la mira con cara de pocos amigos. —Disculpe, señor…—ella ni siquiera recuerda el apellido del profesor y eso provoca que sus compañeros se rían. —Fendel —le dice con su ceño fruncido—. Si usted quiere ingresar a mi clase deberá cambiarse ese color de cabello, ya que en este instituto está prohibido teñirse de manera escandalosa —señala su cabellera con disgusto. —Pero…. —Alguien quiere llamar la atención —se burla uno de atrás ocasionando el murmullo y risa