Emil.-
¡Qué mujer tan insolente! Pero no puedo negar las agallas que tiene, ese temperamento removió algo en mi interior, algo que creí que había desaparecido hace muchos años. No debo darle importancia ¿Y entonces por qué estoy aquí? Siguiéndola, vigilándola, aprieto mis manos sobre el volante.
La veo entrar en una casa, es territorio de mis rivales, los araña roja, no puedo involucrarme con una mujer de la roja, siento frustración y enojo, seguramente por ser una de ellos fue que se envalentonó enfrentándome como lo hizo.
— ¡Maldita araña roja! –unos segundos después sale de su casa Yuri el segundo al mando de los araña, ese mal nacido me debe una, saco mi arma poniéndola sobre mi muslo –sería muy fácil acabar contigo –veo que se dirige hacia donde estoy estacionado, bajo el asiento ocultándome.
— ¡Ese idiota lo tiene, estoy seguro! Se atrevió a mentirme en mi cara, prepárate es hora de hacerlo pagar, dejaremos un mensaje para cualquiera que desee ayudarlo a él y a sus hermanos, morirá como traidor.
Escucho con atención, lo que dice la palabra, traidor resuena en mi mente, la casa a donde entró Nadia es de un distribuidor, debe ser… Andrey Koleva el hombre de más confianza de Yuri ¿Un traidor? Imposible, llevo años intentando que cambie de bando, siempre se ha mantenido esquivo a mi propuesta. Así que la insolente es su hermana.
Pero, me causa curiosidad ¿Por qué Andrey está siendo acusado como un traidor? Siento la necesidad de proteger a la insolente, pero por otro lado, que el sin cerebro de Yuri se deshaga de su mejor hombre y su mejor distribuidor es una ventaja, pongo en marcha mi auto, volveré por ella, Andrey es un tipo astuto seguramente no dejará que Yuri le haga daño a su hermana.
(…)
Pasé lo que quedaba de noche en vela, solo pensaba en la insolente, había algo que me tuvo intranquilo y sin esperarlo más preparé a mis hombres para ir a buscarla, decidido a todo.
— Emil, la puerta está abierta —me avisa uno de mis hombres —No parece haber na…
— ¿Desmond?
— Andrey Kolev está muerto –oigo decir a mi hombre por el auricular –Todo está destruido, parece que buscaban algo –me bajo de la camioneta, otro de mis hombres grita viniendo detrás de mí, que yo esté en este sector me pone en un peligro inminente.
Cuando entro a la casa me paralizo, no suelo sorprenderme con facilidad, pero cuando veo el cuerpo torturado de Andrey tirado en el suelo, en medio de un charco de sangre, la preocupación me invade.
— Emil, deberíamos irnos de aquí si los Araña Roja le hicieron esto a un hombre de confianza, no imagino lo que te harían a ti.
— Busquen si hay alguien más –le ordeno a mis hombres –una mujer, la chica del bar entró a esta casa anoche debe estar aquí.
Entro en cada una de las habitaciones y me detengo cuando veo una caja fuerte arrancada de la pared en la habitación principal ¿Qué m****a estarían buscando?
— Negativo, no hay nadie más en la casa –Desmond informa detrás de mi –sabía que esa chica te había deslumbrado.
— Llama a los de sistema, quiero ver las imágenes de las cámaras ¡MUÉVANSE! –ignoro las palabras de mi segundo al mando.
Vuelvo a revisar, entro a la habitación adornada con una temática de robots, bajo mis pies escucho el crujido un vidrio romperse, retrocedo bajando la mirada, una foto, reconozco a la insolente, a Andrey y en el medio de ellos un pequeño de unos diez años, el corazón me da un vuelco, si hubiese entrado los había rescatado, pero no hay rastros de que ellos estén muertos ¿Se los habrán llevado?
Recuerdo la conversación del desgraciado de Yuri, buscaba algo, algo importante, pero ¿Qué? Debió ser muy valioso para que Andrey eligiera traicionar a los Araña Roja sabiendo que pondría en peligro a sus hermanos.
— Tenemos las imágenes –le arrebato la pantalla a Desmond y observo detenidamente, los hombres de Yuri entrando cuarenta minutos después de que me fui, me impacienta ver pasar los minutos sin ver lo que realmente me interesa, cuando tres horas después la veo salir por la puerta trasera con un pequeño acompañándola, suspiré aliviado, estaba a salvo.
— Quiero que la encuentren
— Pero, Emil —ignora mi mirada iracunda –una búsqueda llamaría la atención de los Araña Roja, nos pondrías en riesgo al igual que la operación —apreté la pantalla con fuerza, Desmond tenía razón, estaba a punto de dar un golpe a mis rivales, me extrañaba que no me hubiesen atacado y ahora lo entiendo su atención estaba en encontrar lo que Andrey les había robado.
— Está bien, vámonos, deja a unos hombres que los busquen discretamente, quiero resultados.
Tenía que encontrarla, saber lo que Andrey tenía en su poder me dará una ventaja para acabar de una buena vez con los Araña Roja.
Nadia.-
— ¿Nadia por qué nos escondemos aquí? –Aleksi me pregunta bostezando.
— Andrey me pidió que nos escondiéramos aquí y nos quedáramos, necesito que hagas silencio hermano, nadie nos puede escuchar
De reojo veo la mochila de la que habló Andrey dejo a Aleksi de pie en el medio del estrecho pasaje, veo lo que hay en la mochila agua, barras energéticas, algo de ropa de Aleksi y mía, unos fajos de dinero y un sobre blanco, seguramente son las instrucciones, me quito mi abrigo y lo pongo en el suelo
— Ven acuéstate vuelve a dormir, necesito que me obedezcas Aleksi –Asiente y hace lo que le pido, comienzo a acariciar su cabello solo fue cuestión de unos pocos minutos cuando volvió a quedarse dormido, miré el sobre dentro de la mochila, lo tomé rasgando una esquina, era una carta, la letra la reconocía era la de Andrey.
Hermana, si estás leyendo estas líneas es porque… las cosas no salieron como había planeado, el cilindro que seguramente ya debes tener en tus manos es el famoso cilindro perdido del mafioso Nikolay Kosov.
Abro los ojos sorprendida acercando la carta más cerca, de niña escuché las leyendas sobre el mafioso más famoso del este de Europa, la leyenda decía que el mafioso tenía una enorme mina donde ocultaba una gran cantidad de lingotes de oro, piedras preciosas repartidas entre rubís, esmeraldas y el diamante más grande El Cullinan que Kosov robó mientras estuvo exhibido en el museo de Londres, las autoridades llevan años buscando la piedra perdida, pero sin tener éxito, muchos creen que el diamante lo debe tener algún coleccionista privado.
Sé que tu primera impresión es no creerlo, pero la leyenda es cierta, mi padre lo encontró en un viaje que realizó a Kosovo, mantuvo el secreto bien guardado hasta que sintió el peligro y me lo confesó, Los Araña Roja sospecharon de mi padre, pero sin tener la certeza, hasta que yo abrí la boca confiando en la persona equivocada.
Nadia dentro del cilindro se encuentra la información sobre la mina, pero Kosov no era tonto dejó varias pistas en todo el este de Europa, la base del cilindro tiene la primera pista, pero no podrás hacerlo sola, necesitas recursos y para eso debes buscar a Emil Petrov.
Me quedo de piedra, no, cualquier persona menos él, pero ¿Cómo Andrey me pide semejante cosa? Pertenece a la banda rival, ¿Mi hermano habrá traicionado a los rojos? Continúo leyendo.
Antes de morir nuestro padre me confesó que había salvado a Emil Petrov de ser asesinado, él tiene una deuda de vida con él, yo debí buscarlo, pero no lo hice, tú debes hacerlo, busca su protección, Petrov es más poderoso de lo que los Araña Roja creen, bajo su cuidado nadie se atreverá a hacerles daño, mientras encuentras la fortuna de Kosov, eres muy lista sé que no será difícil para ti encontrarla y así le darás la vida que Aleksi se merece.
Por favor cuídense, recuerden que los amo con todo mi ser.
P.D. NO te enamores de Petrov, úsalo para tu beneficio, pero no te permitas tener sentimientos por él.
Te quiere, Andrey.
Nadia.-Limpio mis lágrimas después de leer esa carta, era una despedida, Andrey se estaba sacrificando por nosotros, de pronto sentí un estruendo que me hicieron pegar un brinco del susto, miré a Aleksi que estaba profundamente dormido, me levanté con el cuerpo temblando, me alejé un poco cuando escuché los gritos de Yuri.— Te daré una última oportunidad, Andrey dime ¿Dónde está el cilindro?— Ya te dije que mi padre se llevó ese secreto a la tumba, él no confiaba en mi para decirme eso —escuché decir a mi hermano, su tono de voz intentaba sonar segura.— Busquen a los hermanos, tal vez si presencias lo que le puedo hacer a tu hermanita elijas abrir la boca —soltó Yuri con un tono amenazador.— Jefe no estánEscucho un hombre entrando a la habitación donde estamos escondidos, se puede oír como rompen todo, mi corazón retumba en mi pecho de manera acelerada mirando la entrada esperando no ser descubiertos.— Entonces no tienes nada que esconder, es la una de la mañana ¿A dónde irían
Nadia.-La ciudad estaba tomada con hombres que llevaban armas largas, Yuri había movilizado a todos los hombres que tenía y hasta ahora me daba cuenta de que eran muchos, comenzaba a dudar si podíamos salir de esta.Debo aprovechar la oscuridad de la noche para ocultarnos, le coloqué la capucha de la sudadera a Aleksi cubriendo su rostro lo que más podía lo mismo hice yo. Mi primer lugar seguro sería el bar con Niko, pero lo pondría en riesgo, Yuri seguramente lo debe tener vigilado y siendo sincera no puedo soportar ser la culpable de otra muerte, menos la de Niko que fue capaz de arriesgarse por mí.— Mantén la cabeza baja, tenemos que irnos de la ciudad, vamos a tomar un taxiMientras nos manteníamos ocultos en un callejón, divisé un taxi, extendí mi brazo, por suerte se detuvo tomé de la mano a Aleksi y nos subimos, miré al taxista con tranquilidad ocultando mi nerviosismo, para nadie era un secreto que la ciudad era de los Araña Roja.— Por favor hasta Asparuhov –Le pedí al taxi
Nadia.-Estoy en medio del río, y la fuerza de la corriente me atrapa, me arrastra sin piedad, el pánico se apodera de mí; mis brazos y piernas luchan, pero el agua es más fuerte, como si tuviera vida propia.Floto, me dejo llevar y en ese instante en que mi cuerpo se siente agotado de tanto luchar contra la marea, el pánico se convierte en una mezcla de asombro y desesperación, el río se siente como un monstruo voraz, pero también como un camino hacia lo desconocido, cada zancada de agua me envuelve, y aunque el frío me consume, un pequeño fuego de determinación comienza a arder dentro de mí.Finalmente, la corriente me empuja hacia la orilla, la arena y las piedras me golpean cuando salgo disparada del agua, como un resorte que se libera, un dolor agudo recorre mi cuerpo y el impacto me recuerda que aún estoy viva, me arrastro hacia la orilla, mis manos se hunden en la tierra, siento la textura rugosa bajo mis dedos, un suspiro de alivio escapa de mis labios, la arena es cálida y su
Bucarest.Emil.-Dejo que el agua fría caiga sobre mi cuerpo, han pasado varios días en lo que he buscado a la hermana de Andrey, sin tener éxito, según mis fuentes Yuri había colocado precio sobre su cabeza y la de su pequeño hermano ocasionando un caos en Varna, ¿Qué será lo que está buscando con tanto interés?Aprieto mis puños con fuerza sintiendo como se clavan en mi piel, la frustración aumenta y no tengo certeza si sigue viva o muerta lo que me enoja aún más.— Estás muy pensativo muñeco –las manos de Valery comienzan a deslizarse por mi espalda, ruedo mis ojos porque últimamente me fastidia su presencia, es mi amante de turno, pero me conviene tenerla de mi lado ya que es mi informante dentro de la organización.El Dragón Plateado no tiene un solo líder, realmente quien está a la cabeza es Drago Petrov, mi padre adoptivo, quien dirige oculto entre las sombras, aunque mi rostro es el que figura como el mandamás y en cierto modo lo soy, manejo todas las operaciones de la organiz
Nadia.- — ¡Vaya! Has pasado por mucho, pequeña, lo siento –podá sentir la sinceridad en sus palabras–. ¿y a quien buscas aquí en Bucarest? –pregunta Lina con interés.— Pues… –ella me mira con atención, muerdo mi mejilla bajando la mirada, mencionar a uno de los mafiosos más peligrosos de Rumania podría dejarme con una bala en la frente –Emil Petrov –dije en un susurro, el rostro de Lina perdió el color, se levantó como resorte de la silla.— ¡¿Estás de coña?! –su respiración estaba agitada –tienes suerte de haberte encontrado conmigo, ese nombre no se menciona así porque sí en esta ciudad, no tienes idea de a quien estás buscando.— Lo sé, créeme ya tuvimos un encuentro –Lina alza una ceja, el miedo en sus ojos cambió por un brillo de diversión, la miré confundida cuando comprendí lo que creyó que había pasado, haciéndome sonrojar –no es nada de eso, fue uno de los peores momentos de mi vida –aclaré inmediatamente –sé a quién me enfrento, pero es el único que puede ayudarme a encont
Nadia.- Entro a la mansión muerta del miedo, después de ver como Emil Petrov le apuntaba a Lina concluyo que fue una mala idea venir hasta aquí, pero ya no es hora de arrepentimientos, podía sentir sus pasos detrás de nosotras, su mirada penetrante estaba causando estragos en mi interior, negué disimuladamente, el amor no se hizo para mí, juré nunca volver a estar con un hombre. — Espero que esto funcione, porque si no de nada sirvió que me rescataras –susurra Lina en mi oído. Me centré en la exquisita casa, bastante iluminada con un estilo neobarroco, con molduras decorativas de estuco, detalles dorados, columnas, esculturas, paneles de mosaicos italianos de gran tamaño y preciosas cortinas, los espacios están marcados por iluminación empotrada y lámparas de araña la enorme e imponente escalera capta mi atención decorada con mosaico, el lugar definitivamente es digno de un rey. — Llévatela y vigílala –Lina y yo nos giramos al mismo tiempo, miro con desconfianza al mafioso. –no le
Nadia.- — ¿Estás segura que quieres quedarte a solas con él en esta casa? –Lina me miraba como si estuviera loca. –me dejas sorprendida, no me dijiste que buscabas convertirte en la esposa del Dragón plateado.— Créeme Lina no lo hago por ser su esposa, necesito encontrar a mi hermano necesito espacio para buscarlo y medios, ser la esposa de Petrov me dará eso.— Bueno si tú lo dices, no voy a meterme en tus decisiones aunque me preocupe –me toma de la mano. –se nota que eres una buena chica, por eso si necesitas ayuda no dudes en buscarme y cuídate de él se escuchan rumores de que es un zorro traicionero no confíes y por nada del mundo te enamores su galantería es su mayor arma. –asentí en silencio, no podía reconocer que ese hombre despertaba sensaciones en mí y no puedo permitirme eso nunca, ni con él ni con nadie, menos cuando ya dos personas me dicen lo mismo “No te enamores de él”.El hombre de confianza de Emil entró a mi habitación para buscar a Lina, se puso en la puerta con
Emil.- Por fin, la noticia que tanto he esperado la muerte de Drago ha llegado, estoy a un paso de conseguir por completo la gloria y declararme oficialmente como el Dragón Plateado.Estaciono en la mansión Petrov, debo ocultar la felicidad que me embarga en este momento y mostrarme como el hijo perturbado, los hombres de Drago me observan y asienten varios de ellos me son leales y ya me apoyan lo han demostrado vigilando como halcones a Valery.— ¡Emil! –Valery se lanza sobre mi pecho. – ¡Está muerto Drago está muerto! –esta mujer es pésima actriz, nadie cree en su supuesto dolor.— ¿Dónde está Filip? –pregunto ignorando su falso drama.— Está en el despacho de Drago, con los líderes de las tríadas –comenta gimoteando.— Quédate aquí debo ver que está sucediendo –me giro sonriendo, esto ya estaba planificado, sabía que los líderes de las triadas aparecerían de inmediato, abro la puerta de golpe viendo a Filip sentado en la silla de Drago, todos voltean a verme. –Señores –me limito a