Después de escuchar el relato Karenina se quedó pensando un momento, ella recordaba un cuento similar que le habían contado de niña pero en su cuento el final no era feliz y tampoco parecía una historia de amor.
Porque si era algo que conectaba a las 2 familias desde hace tanto tiempo en su familia aquello parecía más una sentencia y no una promesa, todos los recuerdos que creía insignificantes por ser de una niña pequeña ahora tenían sentido.
—Lukyan cuando era una niña me contaban un cuento parecido, pero para mí no era una historia con final feliz— le confesó.
—¿Entonces como es la historia que te contaron a ti?— interrogó a la jóven.
—Pues mira no recuerdo lujo de detalle pero bueno.
Y así Karenina comenzó a relatar el cuento que su abuela solía contarle.
Mi abuelita decía que hace muchos muchos años atrás nuestra familia no vivía en el pueblo de Oymyakon.
Que nuestros antepasados habían llegado ahí huyendo de los lobos, que se asentaron en ese lugar con mas viajeros y formaron una comunidad en donde ahora es el pueblo.
Aún así los lobos expandieron sus dominios alcanzando a la gente del pueblo, pero la matriarca de mi familia hizo un trato con los lobos para que todos los del pueblo pudieran convivir en paz y sin tener miedo de los lobos.
El convenio era que si los pobladores no mataban a ningún lobo los lobos no matarían a ningúna persona, que si la gente respetaba la naturaleza y no profanaban el bosque entonces los lobos no pasarían el pueblo.
Pero los lobos exigían pruebas de lealtad para confiar en ]a palabra de la gente del pueblo, así mi antepasada ofreció que nuestra familia renovaría el convenio cada generación. Así la decencia del lobo y mis abuelas anteriores cada generación se encontraban y sellaban el trato por 12 generaciones así fue.
Cuando el ciclo termine y el trato llegue a su fin, los lobos reclamaran a una mujer como suya.
—¿Asi ya no parece un cuento de hadas verdad Lukyan?— le dijo sarcástica la joven.
—No asi parezco un hombre muy despiadado, que te tomaré a la fuerza y sin que tú me ames— respondió decepcionado.
—Hey pero que la historia diga eso no significa que lo seas, creo que eso lo contaban sólo para asustar a los niños y no entrarán al bosque a molestarlos— dijo intentando consolarlo.
—Pero yo no quiero eso, es decir, se supone que tú y yo nacimos para amarnos— contestó triste.
—Es que no entiendo muy bien tus tradiciones, pero tú no me debes nada a mi y eres libre de elegir a quien tú quieras— le aclaro ella.
—No enserio no lo entiendes— muy triste respondió —En fin tienes que volver a tu casa con tu familia, ven te llevaré hasta haya.
—¿Cómo? porque perdí una bota no podría caminar pisando la nieve, además mi abrigo está roto y llevo muy poca ropa para soportar el frío no creo soportar el viaje.
—Lo sé pequeña, sólo confía en mí y monta mi espalda, usa mi abrigo para no pasar frío así podré llevarte sana y salva— le resolvió en seguida.
—¿Me estás diciendo que monte en ti como lobo?
—Exactamente es la manera más eficiente soy muy veloz y ágil— dijo sonando presumido.
—Oh muy bien macho alfa, entonces llévame por favor— pidió sonriendo la jovencita.
—Entonces toma— le extendió su mano ofreciendo el abrigo.
—Muchas gracias Lukyan eres muy amable— contestó y tomó el abrigo se quedó mirando con atención como él se quitaba la ropa.
Lukyan se alejo un poco y adoptó su anatomía lobezna se inclino un poco para que ella pudiera subir a su espalda.
Ya arriba del gran lobo la vista de Karenina era diferente, podía contemplar el paisaje desde un ángulo único. Se sujeto del suave pelaje y el lobo comenzó su marcha.
Mientras avanzaban Lukyan corria cómodamente con la chica a cuestas, saltaba y esquivaba obstáculos a gran velocidad y si se cruzaban con animales sólo bastaba con una advertencia del alfa para que ninguno se interpusiera en su andar.
El viaje para Karenina resultó muy emocionante y divertido, ni siquiera sentía el aire gélido golpear su rostro y tampoco le costaba seguir con la vista el camino, no le faltaba el aire ni le dolía respirar y se dedicó a disfrutar del paseo.
—¡Wow esto es increíble todo se ve tan distinto desde aquí!— le dijo en el oído a Lukyan —Por favor alarga un poco más este recorrido— pidió tiernamente Karenina.
El lobo sólo asintió y la siguió llevando a través del bosque, incluso se detenían un momento para que ella pudiera ver con calma a los animales que le parecían extraños y hermosos.
Pero el viaje de regreso al pueblo no podía durar demasiado así que Lukyan se dirigió a su destino. Al llegar a la entrada del pueblo se volvió a inclinar para que Karenina bajara de su espalda, ella no lo hizo en cambio lo abrazo con fuerza y hundió la cara en su pelaje.
Cuando por fin pudo bajar del lobo Karenina no quería despedirse de él, no podía caminar y alejarse para dejarlo ahí, algo en ella se sentía muy mal, su pecho le dolía sentía una opresión angustiante, de la nada sintió muchas ganas de llorar y se formó un nudo en su garganta que le impidió hablar.
Sin pensarlo más abrazo al lobo que no se había movido y seguía ahí parado esperando su partida, se aferró con fuerza al cuerpo suave de Lukyan por unos minutos intentando calmarse y no llorar para poder despedirse de él correctamente. Pero el esfuerzo fue en vano cuando el gran lobo actuó como un cachorro y comenzó a sollozar.
Para Lukyan la despedida era muy dolorosa pues significa que la dejaría libre de la promesa y se resignara a vivir sólo el resto de su vida. Por eso no pudo soportarlo más y dejo salir un lamento.
Karenina comenzó a llorar tan fuerte que le faltaba el aire y ni así sentía que el dolor en su pecho se aliviará. Sin razón aparente el solo pensar en alejarse de Lukyan le resultaba casi insoportable, como hará para poder correr y no mirar atrás.
Entonces el lobo la alejo de su cuerpo y con su cabeza la empujó, eso era un gesto para decirle que ya era tiempo de irse tenía que regresar con su familia. Ella se quedó mirando sin saber que hacer pues si quería volver a ver a su madre y hermana, pero no quería dejarlo no quería estar lejos de él.
La gente del pueblo había notado la presencia del lobo, alarmados se acercaron con cautela pues no querían que la jovencita corriera peligro. Alguien aviso a Franka quien de inmediato salió en busca de su hija.
Al verla parada enfrente de aquel enorme lobo blanco lo entendió enseguida, al parecer tendría piedad y la dejaría volver ese pensamiento la ánimo a acercarse hasta su hija para traerla de regreso a casa.
—¡Karenina hija mía por fin estás aquí!— corrio hacia ella y la abrazo apartandola del lobo.
—Mamá yo, yo no puedo mamá— decía entre sollozos.
—No pasa nada hija ya estás aquí— la consolaba.
Se quedó entre los brazos de su madre intentando convencerse a sí misma que regresar era lo correcto.
Cuando Lukyan vió a esa mujer consolando a su amada entendió que era su madre, aprovecho el momento y se fue corriendo hacia el bosque tratando de huir de sus sentimientos, de no arrepentirse de dejar a Karenina en el pueblo y llevársela con él.Entre más se alejaba de ella más le costaba seguir corriendo, el sentimiento de su corazón destrozado le quemaba en el pecho cada vez más y más.La ansiedad de la separación le desgarraba el alma, toda su vida había estado esperando por casarse con ella y ahora que por fin había vuelto a encontrarla, que la tuvo sólo para él ahora tenía que dejarla ir.Las cosas no eran como las espero por todos estos años, ella no lo esperaba ni mucho menos quería quedarse con él. No quería pero tenía que dejarla irse, no la obligaría a nada.Sin poder soportarlo más se detuvo y aulló dejando salir toda la tristeza que sentía, después simplemente se desplomó en la nieve quedando incon
Mientras tanto a él lobo le agonizaba su alma internamente. Está tan conmocionado por qué el lazo que comparte con Karenina casi se ha roto, sólo se mantiene vivo porque se aferra a vivir pero realmente estaba herido. Las almas de ambos estaban unidas desde hace tanto tiempo, ellos habían nacido para amarse y vivir juntos.Había pasado años añorando poder completar la unión, que ahora que la dejo ir le ha costado desgarrar su alma y eso lo tenía al borde de la muerte. Pero el no quería obligar a su pareja a quedarse con él y no ser feliz, quería que ella lo amará de verdad y no por cumplir con la promesa.Deseaba que la compatibilidad de sus almas los uniera para amarse y fueran felices juntos el resto de sus vidas, formar una familia él ya hasta imaginaba como serían sus cachorros y los nombres que le gustaría para ellos.Comenzó a soñar con Karenina recordando lo poco que había compartido con ella, desde la primera ve
Tras su llegada rápido acudieron más personas a recibirlos, tomaron a Karenina y ayudaron a Franka a bajar de Yuri.Él tomo su forma humana y se cubrió rápido para explicarle a Irisha la situación.—Hermana lleva a esa mujer con nuestra madre dile que es la prometida de Lukyan— le ordenó.—Enseguida Yuri— acato la orden y la llevo suavemente en brazos.Gritando entro a su casa lo que alarmó a Anastasia y a Valka.—¿Que ocurre hija?— pregunto Valka acercándose a ella y la ayudo a recostar a la jovencita —¿Quien es ella Irisha?— insistió confundida.—Madre dice Yuri que ella es la mujer de Lukyan— le explicó.—Ahora entiendo porque están ambos así, hay que dejarlos estar juntos para que puedan despertar y recuperarse— les indico a las dos.—Madre ya estamos aquí en que ayudamos— dijo Akim entrado a la habitación.—Tú y Yuri lleven a Lukyan a las aguas termales ya están haya mis ayudantes alistando las cosas— les ordenó estresada —I
En el Pueblo:—¿A dónde se fue mi mamá y que paso con mi hermana?— pregunto Ania a Ivanna que seguía en shock —Contestame por favor contestame.—Ella se llevó a Karenina con una curandera, pero no sé si podrá volver— muy preocupada respondió.—¿A qué se refiere?— indagó —¿Entonces que hacemos dígame?— insistió desesperada.Por otra parte en la manadaHasta que las desesperadas madres de los dos interrumpieron la atmósfera y y] la pasión desbordante de los lobos.—¡Lukyyyaaaan! ¡Kareniiiinnaaa! ¡¿Están bien?!— se escuchó la vos de ambas detrás de la puerta.En ese instante se rompió la burbuja de amor de los enamorados. Se dieron cuenta de lo apasionado que había sido el beso porque no podían regular su respiración y notaron que estaban desnudos abrazándose.Llena de pena y completam
El tranquilo desayuno había terminado y todos debían volver a sus labores, eso incluía a Lukyan pero ahora él y Yuri se alistaban para llevar a las visitantes de regreso a su hogar.—Confiamos en ustedes por ser descendiente de Lisaveta y la prometida de mi hermano, por eso las dejamos saber de nuestra manada— les explico Yuri —Pero para nosotros es de crucial importancia mantenernos en secreto así que, espero no verme en la necesidad de— dijo con un tono de amenaza.—¡Basta!— hablo Lukyan con una voz fuerte lo que hizo obedecer a Yuri sin más —Ahora tienes que llevar a la señora Franka que yo llevaré a mi prometida— le indico.Así nuevamente Karenina monto a Lukyan para disfrutar su paseo, pero su madre no podía decir lo mismo ella iba aferrada con miedo al pelaje de Yuri.Al llegar de regreso al pueblo la despedida fue difícil.—Tranquilo cariño aquí estaré esperando por ti, vuelve mañana y e
—Pues por unos días tenemos que quedarnos aquí para terminar asuntos de tu abuelita Viktoria, ¿Tú que quieres hacer hija, te vas a quedar con Lukyan?—volvió a preguntar.—Se qué realmente no lo conozco, que la vida aqui es muy diferente a la que estoy acostumbrada. Él me gusta mucho, hay algo en mi corazón que me dice que él es el correcto, se quede va a oír loco pero en el ritual pude sentir todo el amor que él siente por mi— admitió completamente roja de la cara hasta la orejas.—Ahora tú eres la que tiene que tomar la decisión, yo ya no puedo intervenir ni puedo decir si es lo correcto o no, piénselo que a final es su vida la que no volverá a ser la misma— le dijo sonando cortante al rollo de enamoramiento de su hija.—El asunto es que no creo que él pudiera irs
Desperté de a poco en poco con pesadez en mis párpados y con una sensación de mareos en mi cabeza. Sin la menor idea de dónde estaba y sin recordar bien lo que había pasado.Trataba de abrir por completo mis ojos y enfocar bien mi vista, estaba algo oscuro todo el lugar sólo era iluminado por la luz que desprendía el fuego de una pequeña fogata que se encontraba encendida ahí. Parecía que la encendieron para mantener más cómodo el lugar, comencé a tener más conciencia y note que estaba en una cueva o algo así.De golpe me di cuenta de que estaba desnuda, sin nada de ropa rápidamente intenté tomar algo para no ser vista y sólo me cubría el cuerpo una cobija de piel suave y muy abrigadora con un pelaje de color blanco con manchas grises. Al buscar con la mirada en los alrededores dónde podría estar mi ropa note que la cobija no era solo una, si no más bien me habían acomodado una cama improvisada para que pudiera descansar.Des
Nos quedamos mirando un par de minutos, el me miraba como pidiendo disculpas y triste y por mi parte le miraba impresionada y confundida.Y recordé que estaba desnuda justo enfrente de un hombre que también lo estaba, con mucha vergüenza y cerrando mis ojos tome la cobija nuevamente y cubriendo mi cuerpo di media vuelta y me aleje de él sin decirle nada solo regrese y me senté en la cama.No entendía nada de nada, no creía lo que acababa de ver y es que era muy impresionante verlo en sus 2 formas. Él en su cuerpo de lobo era muy intimidante porque era obvio un macho alfa muy feroz, pero su cuerpo humano no se quedaba atrás su rostro apuesto y figura musculosa eran casi perfectos.Se acercó hasta mi cama sin parecer importarle seguir sin ropa, se inco enfrente de mí y se inclinó.—Discúlpame, parece que te asusté y no tienes porque yo sería incapaz de lastimarte— habló con su voz ronca y grave.