Dicen que después de la tormenta viene la paz, puede que en esta ocasión sea cierto. Llevo semanas luchando contra el pasado y el error cometido por terceros, tanto así que hubo instantes donde me olvidé de mi vida personal, de mi esposo, y hasta de mi bebé, pero hoy es cuando di fin a todo aquello para seguir con mi camino.
—¿Nerviosa? — Me pregunta mi esposo mientras sujeta mi mano con fuerza bajo el efecto de la media luz de este consultorio y volteo a mirarlo.
—Un poco, tengo muchas ganas de saber si será un niño guapo como tú, o será una niña difícil como yo— Comento sonriente y él besa mi mano.
—Querrás decir una niña hermosa como tú… estaré en problemas de ser así— Bromea y me sonríe cómplice.
Sé que no hay nadie en este mundo que me entienda como él. &Aa
Un año después Cuando supe que mis padres murieron en aquel accidente aéreo, jamás imaginé que detrás de su muerte se escondieran tantos secretos incluyendo mi verdadera identidad. En este tiempo he aprendido muchas lecciones de vida que me han hecho cambiar como persona, sin embargo, esos cambios fueron para bien. No voy a mentir, alguna vez tuve miedo de que el dinero me cambiara, que me hiciera ser una persona fría y sin escrúpulos, pero desde aquel día que Diego llego a mi oficina para pedirme ayuda para la enfermedad de Andrea y yo acepte ayudar, entendí que no había dinero que cambiara quien era realmente. Lo volví a confirmar con la llegada de Hernán, la enfermedad de su hijo, y luego cuando descubrí mi verdadera identidad. Renuncie a la herencia de Dante, la cedi a su hijo y después de un proceso legal bastante extenso todo se hizo oficial. Hernán es ahora el único heredero de Dante y por ende el dueño de los hoteles Cabassi. Si bien yo le sigo asesorando par
Nuevamente los noticieros más importantes del país presentan sus titulares principales enfocándose a la fuerte crisis económica que está afectando al mundo. Como cada noche mi copa de vino me hace compañía en este solitario salón en la mansión que habito y por más que posea una piscina, cancha de tenis, gimnasio y hasta una inmensa biblioteca; nada de eso sirve para relajarme en estos momentos. Solo tuve que pedirle que venga y aquí está mi mejor amigo desde la secundaria. Abro la puerta, lo dejo pasar y verlo con su camisa azul y corbata me hace sonreír —¿Qué haces con camisa y corbata a esta hora? Hace rato salimos de la oficina. — le regaño y sin rodeos llevo mis manos al nudo de su corbata para quitársela —relájate, así nunca conseguirás novio. — bromeo y sus ojos se abren de par en par.—¿Qué dices Kai? — me pregunta y sabe que es el único al que lo dejo llamarme así. —Nada… nada. — digo nerviosa cuando termino de quitarle la corb2.Confio Solo en Ti
Al día siguiente: No sé ni qué hora es cuando escucho un golpe en la puerta y antes de que pueda responder, Álvaro entra con una bandeja en sus manos. —buenos días, Kai. — dice mientras que yo intento acomodarme en la cama. —¿Qué hora es? ¿me quede dormida? — pregunto desorientada mientras él se sube a la cama y yo busco mi celular en la mesita de noche —¿seis y treinta? ¿a qué hora te levantaste? —
El sonido de mis tacones sobre el piso de madera hace eco en esta amplia oficina donde el licenciado Armendia me hizo pasar. Él toma asiento en la silla ubicada detrás de su escritorio y yo hago lo mismo en una de las cómodas sillas ubicadas del lado opuesto. Acomodo la falda de mi vestido negro y lo miro expectante —lo escucho licenciado. — sentencio y por algún motivo que desconozco sonríe. —Su abuelo me había hablado mucho de usted, me conto que era una mujer impaciente y de carácter fuerte. — comenta.—Qué bueno que me conociera, ahora, si me di
[Un par de horas después]Estoy en la encrucijada más grande de mi vida, buscar un hombre con quien casarme, aceptar la herencia de mi abuelo y salvar a todos los empleados que podrían quedar en la calle, o simplemente dejar las cosas como están y empezar con el plan para cerrar los hoteles y echar a toda esa gente. —Buenos días, señorita Cabassi. — me saluda Cristina amablemente cuando entro al edificio.—Buenos días, Cristina, que
(Esa misma noche)Por mi mente pareciera que paso un huracán y lo desordeno absolutamente todo, por mi vida ni se diga, pareciera haber sido sacudida por un terremoto que movió todo y ahora me encuentro intentando ordenar un desorden infernal. Muchas cosas en poco tiempo, decisiones, confesiones y sobre todo cambios.La luz de mi oficina es la única que aún permanece encendida de todo este piso, y es que me quede hasta esta hora haciendo un análisis de
3 semanas después:Mi vida dio un giro tan abrupto, que dejo todo tambaleando y a mí con más dudas que certezas. La única cosa que tengo en claro, es que necesito esa herencia para no caer en la crisis que está llevando a muchas empresas a la quiebra, después, el resto, sigue siendo una gran incógnita. Hoy es mi boda con Álvaro, una muy sencilla, pero cumpliendo con las pautas que dejo escritas mi abuelo en su testamento. Al parecer, era un hombre muy romántico o simplemente buscaba volverme loca, ya que dejo estipulado hasta el lugar