CAPÍTULO 82

Las camionetas se desplegaron a velocidad, y la caravana militar se puso en marcha, avanzando hacia el corazón de la ciudad envuelta en caos y destrucción. En lo alto, los helicópteros proporcionaban cobertura aérea, vigilando cada movimiento del enemigo.

Había francotiradores en cada edificio altamente custodiados, y Asad habla por los micrófonos todo el tiempo durante el recorrido.

—¿Tenemos alguna señal de su ubicación exacta?

Asad asintió.

—Hay dos posibles zonas —dijo apretando su oído—. Ahora mismo me informan que han destrozado cinco guaridas de Al Qaeda. Aziz Olayan aún no aparece.

Kereem apretó la mandíbula.

—Vamos a las dos posibles Zonas.

—¿Está seguro de que no nos esperará una emboscada? —Kereem negó.

—¿No te has dado cuenta de su juego, Asad?

—Si señor, pero…

—Nada. Si dejó a Zahar viva es para llegar a mí. Sabe que no hay forma de llegar a mí si no es por ella.

—¿Y si ella… está al favor de Aziz?

Kereem pasó un trago y en ese momento miró a Asad.

—Es un riesgo que estoy
Continue lendo este livro gratuitamente
Digitalize o código para baixar o App

Capítulos relacionados

Último capítulo

Explore e leia boas novelas gratuitamente
Acesso gratuito a um vasto número de boas novelas no aplicativo BueNovela. Baixe os livros que você gosta e leia em qualquer lugar e a qualquer hora.
Leia livros gratuitamente no aplicativo
Digitalize o código para ler no App