CAPÍTULO 57 AMOR Y VENGANZA

Zahar…

Esperar duele. Pero esperar sin señales era una tortura silenciosa.

Las horas empezaron a volverse iguales. Me despertaba temprano, aunque no podía dormir. Caminaba por la base como un fantasma con uniforme americano, con el cabello trenzado y los ojos secos de tanto llorar cuando las luces se apagaban.

Kereem seguía desaparecido.

No había mensajes, ni pistas nuevas. Solo informes sueltos, rumores que no llevaban a nada. Como si el mundo entero decidiera olvidarse de él, pero yo no podía hacerlo.

Tres días después de que todo pasó, mientras empujaba mi desayuno, miré a Milo con el estómago hecho nudos y no pude soportarlo más. O hacía esto, o me moría aquí mismo.

—Milo —susurré mientras él levantó los ojos.

Solo nos resumíamos a hacer un ejercicio habitual, y a mirarnos en silencio. Eso también en la zozobra de lo que había dicho Víctor.

—¿Qué pasa?

—Necesitamos buscarlo —le dije. No era una sugerencia. Era un ruego dicho sin lágrimas—. Tienes gente. Hay gente aquí a los que le
Continue lendo este livro gratuitamente
Digitalize o código para baixar o App

Capítulos relacionados

Último capítulo

Explore e leia boas novelas gratuitamente
Acesso gratuito a um vasto número de boas novelas no aplicativo BueNovela. Baixe os livros que você gosta e leia em qualquer lugar e a qualquer hora.
Leia livros gratuitamente no aplicativo
Digitalize o código para ler no App