Capítulo 27

No supe cómo me fui a los brazos de Morfeo con mi verga flácida dentro de la vagina de Ulz. No entendía como había llegado a volver a hacerlo con ella después de habernos quedado conversando un buen rato más una vez que nos metimos definitivamente a la cama. Solo recuerdo haber oído algo de que Mika tenía que salir temprano de casa y que ella se iba a quedar un rato más, puesto que necesitaba conversar algo importante conmigo antes de irse a su casa. Repetía a cada rato que para ella había sido una noche muy especial y que yo había estado a la altura y que todo era una lástima.

Por más que lo intenté no pude hacer ningún recuerdo más. Solo sé que cuando Mika metió ruido al levantarse desperté con una angustia en mi alma que no era para nada normal. Luego seguí durmiendo.

Para variar desperté por culpa del maldito celular. Era el maldito Javo.

— Buenos días,

Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo