Capítulo 14

Me volteé a verlo algo temerosa, no de él sino de sus palabras que me tomaron por sorpresa y me bombardeó de dudas.

—Dime de una vez a lo que te refieres —pregunté manteniéndome algo alejada.

—Vamos. —Se puso de pie y tomó mi mano guiándome hacia el baño.

No habló, solo me llevó hasta la ducha y abrió el grifo. Su cuerpo se mantuvo a mis espaldas recostando ligeramente su peso. Sus dedos danzan con delicadeza sobre mi piel, baja por mi abdomen y se deslizan por la cara interna de mis muslos, pero detengo su ascenso al sostener su muñeca e impidiendo que llegara a donde quería.

—¿Qué pasa? —preguntó con su voz ronca en mi oído —Solo te estoy ayudando a limpiarte. La sensualidad de su tono casi me hizo perder la fortaleza, pero no me lo permití.

—No me des largos —me di la vuelta quedando justo de frente—. ¿A qué te referías con aquello?

—Pues a lo que oíste.

—No es suficiente explicación, no entiendo nada.

—Desde que cediste a mí anoche y caíste en mis garras —torció el rostro
Sigue leyendo en Buenovela
Escanea el código para descargar la APP

Capítulos relacionados

Último capítulo

Escanea el código para leer en la APP