En ese instante supe que esos agentes se encontraban adentro.

Me apresure a caminar hasta donde se encontraba de pie el maestro. - Buenos días, maestro. - Saludé mientras podía escuchar demasiado ruido proveniente de las profundidades del gimnasio que cambio mi vida

-Tenemos muchas cosas de que hablar. Vamos a estar muy ocupados a partir de hoy.

Al verlo y escucharlo entendía que mi vida de nuevo había cambiado. A partir de hoy nuestros planes empezaban.

Necesitaba organizar a los nuevos agentes que esperaban dentro. El maestro no estaba tan feliz al verlos, pero sabia que era necesario tener mas personal.

Al entrar al gimnasio podía ver como todos los agentes estaban esperando. Todos lucían tan calmados, pero a la vez preocupados.

En ese instante, un agente dio un paso adelante para poder hablar. -  Señorita Valentina la hemos estado esperando. Es necesario saber nuestras ordenes para poder hacer correctamente nuestro trabajo.  

Entendía lo que querían decirme, pero antes de comenzar necesitaba dejar algo en claro.

 -Antes de eso me gustaría saber ¿cómo te llamas tu?

-Me llamo Hugo y apenas termine mi entrenamiento para ser parte de la compañía Smith.

-Está bien Hugo, me agrada que quieras hacer correctamente tu trabajo por lo que en estos momentos te nombro sublíder. Tendrás la misión de informar a todos mis órdenes.

Todos quedaron sorprendidos por la decisión que había tomado. Pero admiraba el coraje que Hugo había mostrado. Era lo que necesitaba.

Hugo no dijo nada por un momento, pero al ver la reacción de todos decidió hablar:

-Me honra que me ponga en ese puesto señorita Valentina y acepto la misión. Haré que sus órdenes se cumplan.

-Me alegro de que aceptes. Espero grandes cosas de ti. Pero también espero los mejores resultados de parte de todos por lo que ahora me gustaría que todos empiecen a entrenar y ver que habilidades cuenta cada uno de ustedes.

Mientras todos comenzaban a entrenar me acerque al maestro. Aún tenía dudas. No estaba segura de sí era lo correcto.

-Maestro ¿de verdad está bien que yo sea su líder? - Le pregunté mientras el me miraba sorprendido por mi pregunta.

-Valentina creo que no te has dado cuenta pero tú, en este momento eres la mejor en este gimnasio y por supuesto estas capacitada para ser el líder de este equipo, recuerda todo lo que pasaste estos dos años y el como yo te he convertido en la peor versión de ti para que tu cumplieras con las órdenes del Sr. Smith… y Valentina este es el momento en el que le demuestres de lo que eres capaz de hacer y que estos años han valido la pena.

Al escuchar lo que decía el maestro me di cuenta de que debía demostrar que Mateo no se había equivocado y que era el momento de comenzar con los planes de filtración a la empresa.

Al ver que todos estaban entrenando pude darme cuenta de que cada uno de los once nuevos subordinados tenían diferentes habilidades y que cada uno estaba concentrado en diferentes campos, como era Hugo. Él estaba entrenando en el campo de tiro. Mientras lo miraba pude recordar que yo estaba así hace dos años cuando empecé este entrenamiento infernal y que ese día yo estaba tan asustada por tener un arma en mis manos.

- ¡Así no Valentina!, debes de tomarlo con más fuerza para que cuando la bala salga no te rebote y no te hagas daño.

-Si maestro-Respondí mientras daba disparo tras disparo esperando que la clase terminara y que no hubiera sorpresas como siempre había.

-Ahora bien, Valentina como ya tienes una buena puntería al disparar a objetos, pero ahora veremos cómo lo haces con animales - Él me dijo mientras una sirvienta entraba con un perro al gimnasio, dándome la señal de que disparará.

-Pero maestro es un perro… yo no puedo hacerlo-Lo miraba para que me dijera que no era necesario pero el no dijo nada de eso.

-Valentina ¡hazlo ahora!, recuerda que cuando empiece toda esta guerra tu tendrás que en algún momento tomar un arma y sin dudarlo disparar a una persona que estará dispuesta a dispararte sin ponerse a pensar si debía o no.

-Pero maestro yo no pienso matar a nadie y eso el Sr. Smith lo sabe.

-Puede que le dijeras que no, pero en un momento pueda que necesites hacerlo para salvarte o para salvar a alguien que necesite tu ayuda, no dudes más y hazlo, Valentina.

No pude ver a los ojos aquel perro y aunque no lo quisiera tuve que hacerlo por lo que cerré los ojos y solo pude escuchar el llanto de ese perro junto con el ruido del disparo, dándome cuenta de que en algún momento tendría que matar a alguien esperando que eso no fuera necesario.

-Señorita Valentina, ¿está usted bien?

Al regresar a la realidad pude darme cuenta como Hugo me miraba preocupado y como si tuviera ganas de preguntarme algo.

-Perdón Hugo, solo que al verte recordé como fue mis clases de tiro y como debes de estar concentrado cuando tienes un arma en tus manos.

-Es verdad, pero señorita puedo hacerle una pregunta. -Él me miró de una manera seria dándome cuenta de que tal vez él quería preguntarme sobre los planes a futuro.

-Si dime Hugo.

-Después de que todos hallamos entrenado ¿qué viene para nosotros? ¿cuáles van a ser nuestras órdenes?

-Mira Hugo en estos momentos no puedo decirte con certeza que es lo que ustedes van a hacer porque primero tengo que verlo con el Sr. Smith, pero… ustedes me van a ayudar a infiltrarme a la empresa Cornel y sobre todo que mi identidad no sea revelada.

-Entiendo Señorita, por el momento les diré que estamos en etapa de entrenamiento para que todos nos acostumbremos a este nuevo equipo mientras usted ve las estrategias que vamos a seguir.

-Eres realmente útil Hugo, con tu idea puedo tener a todos controlados por el momento así que por favor diles a todos esa orden… y una última cosa Hugo, puede que todos los demás no confíen en mi todavía, pero tú debes de hacerlo si sabes lo que te conviene.

-Si Señorita. -En ese momento él se dispuso a decirles a todos la nueva orden mientras que yo me dirigía a mi campo de tiro, recibí una llamada que me sorprendió bastante.

-Buenos días, ¿se encuentra la señorita Valentina García Contreras?

-Si ella habla, en que la puedo ayudar.

-llamamos de la compañía Cornel ya que usted solicitó una pasante para ser asistente personal y quería informarle que en este momento el puesto está abierto y si usted le seguía interesando esta pasante.

No podía creer que la oportunidad que estaba esperando por fin había aparecido y no debía de desaprovecharla.

-Por supuesto señorita estoy interesada en esta pasante, así que por favor deme todos los detalles para la entrevista de trabajo.

-Si, para la entrevista solo es necesario que lleve los papeles que se le solicitaron y presentarse el día de mañana a las doce del día para que el personal le haga la entrevista.

-Muchas gracias, nos vemos el día de mañana.

En este momento solo escuché como la señorita que me había hecho la llamada había colgado y vi que mi maestro me miraba ya que se notaba que algo bueno había pasado.

- ¿Qué fue lo que te dijeron para que te pusieras así Valentina? -

-Maestro me hablaron de la compañía Cornel para el puesto de asistente, sabe bien lo que significa… con esta llamada yo voy a empezar con toda esta guerra. -Le dije mientras me daba cuenta de que mi vida había cambiado nuevamente y que iba a tener el tiempo ajustado ya que desde el lunes de la próxima semana yo empezaba la universidad por lo que ahora tengo tres días para prepararme para ser una estudiante genio, una asistente y una espía.

-Maestro, puede encargarse del equipo yo tengo que ir con él para decirle que todo empieza a partir de mañana y que debemos de estar preparados para cualquier situación respecto a mi identidad y para que todo salga como tiene previsto el Sr. Smith.

-No te preocupes Valentina, yo me encargo de todo tú solo encárgate de que esto acabe cuanto antes para todos podamos descansar de esta guerra interminable.

Empecé a caminar para salir del gimnasio y dirigirme a la gran casa donde tenía que buscar a la persona que iba a estar al lado de mi en todo este plan.

Llegue a la puerta de la cocina que daba entrada a la casa principal, para subir las escaleras y caminar unos pasos hasta llegar aquella puerta donde me esperaba mi compañero.

- ¡Toc Toc! -

Al no escuchar una respuesta yo decidí abrir la puerta para encontrarme a un joven hombre recostado en su cama dormido.

-Despierta Emilio, que tenemos trabajo que hacer. -Le dije mientras veía que él estaba despertándose de su siesta.

-Valentina porque no antes de entrar tocas primero.

-Si lo hice, pero tú no contestaste además estabas dormido.

-Bueno en eso no puedo argumentar nada. - Me dijo mientras él se levantaba y se quedaba sentado en su cama mirándome fijamente.

-Bueno que fue lo que paso para que tuvieras que venir hasta mi cuarto a estas horas-Me preguntó mientras yo me sentaba a su lado.

-Me acaban de marcar de la Compañía Cornel para que mañana me presente a la entrevista para ser asistente y con esto empezar todos los planes que tenemos Emilio. - Él al escuchar eso se quedó en silencio por unos segundos.