[Edén]
“Te gusta ese hombre, ¿cierto?”
Sofía me preguntó cuando terminé de posar con mi lencería roja. Nunca había sido necesaria esta pequeña pieza de arte porque ese hombre sabía cómo quitarme la ropa en un segundo.
“¿Por qué me preguntas, querida?”
“No lo sé,” me miró con una ceja fruncida, “nunca has dicho que te gusta.”
“¿Tu se lo has dicho a Jason?”
Su cara se cubrió de un rojo hermoso.
“Si,” me dijo y esa pequeña confesión me sorprendió, nunca pensé que ella lo fuera a admitir.
Sin embargo, yo no podía decir nada, mi interés hacia Albert no era más que disfrutar unos años, casarme con él como lo mandaba el rey. Ya no había vuelta atrás, incluso si mis padres hablab
Alguien me dijo que para tener un poco de felicidad, solo necesitas dormir un poco y reír por un largo tiempo. Si, ya hice lo primero, es más, dormí el más profundo y eterno sueño de todos. Morí.¿Cómo? Bueno, fue la peor pesadilla, lo último que cruzó ante mis ojos fueron dos luces horribles acercándose a mí en un estúpido coche color azul, y dentro, la cara de la mujer que quería casarse con mi prometido.Tal vez si la noche anterior no la hubiera provocado; tal vez si no le hubiera dicho que Ethan era mío y que ella simplemente sería una secretaria, una empleada en una pequeña oficina para siempre. Alguien con tan poca dignidad para salir con alguien comprometido. Tal vez si hubiera visto las señales, no sería un es
Por dos años he vivido una historia de fantasía.No podía creer que algo que solamente pasaba en novelas y cuentos, podría ocurrirme a mí.¿Mencioné antes que alguien me dijo que para obtener un poco de felicidad, solo necesitas dormir un poco y reír por un largo tiempo?Lo primero ya lo hice, el sueño eterno que terminó mi vida pasada, ahora me faltaba reír por un largo tiempo. De hecho, eso lo logré justo en el momento que desperté en el cuerpo de otra persona. Una joven mujer de dieciocho años.Estatus: Muerte por envenenamiento.¿Cómo es posible? Mi vida se movía alrededor de dos cosas, estudiar y estudiar más. Todos los días, libros, notas, la computadora, y después… libros y más notas.No podía salir de la mansión, el padre de la joven Edén había prohibido que saliera a ningún lado hasta que fuera seguro.Al parecer, Edén regresó de una fiesta hace algunos días, todo parecía bien, pero su estado se volvió crítico en la noche. El médico diagnosticó envenenamiento.Alguien estaba tratando de deshacerse de la joven de bellos ojos azules y cabello negro. Y lo logró.Sin embargo, la mujer que ahora estaba ocupando este cuerpo era alguien que ya viviCapítulo 3. Sorpresa
La mañana siguiente resultó ser igual a todas las demás. Un suave despertar en sábanas cómodas que adoraban mi piel. Sabía que esas deliciosas sábanas no me querían dejar ir, y yo tampoco tenía la intención de olvidarlas tan pronto. Sin embargo...“Señorita Edén, es hora de levantarse,” Lina llegó a la habitación, otra vez, a la misma hora.Debería mandarla de vacaciones algunas semanas. Tal vez, de esa manera, yo y mis sábanas pasaríamos más tiempo juntas.“Es un día hermoso, y…” ella me miró con una ceja levantada. “Los resultados de los exámenes aparecen hoy.”&iq
Decidimos celebrar mi fina victoria en un restaurante muy elegante. Nos recibieron con todo el respeto que el Duque de Reid se merece. El mismo gerente se nos acercó con el chef en línea para saludarnos y estrechar la mano de mi padre.“Espero que tenga una excelente estadía, Su Excelencia.”“No seas tan formal Gale,” mi padre siempre había repudiado la sobriedad con lo que lo trataban, incluso sus más allegados conocidos. “Estamos festejando a mi niña.”“¿Señorita Edén?”El Gerente Gale Jin era un antiguo amigo de mis padres, conocido de la universidad. El pobre hombre solía ser acosado cada vez que se hacían las reuniones en la mansió
[Perspectiva del Duque Albert du Eylos]El día era ordinario. Todo era lo mismo, la misma gente saludándome con respeto desde la primera hora del día. El baño preparado, la ropa preparada, y el desayuno esperándome en la siguiente habitación. Incluso el clima parecía no haber cambiado.Mi asistente y mi mayordomo me esperaban fuera de la habitación para comenzar con el día de trabajo.“Su Excelencia,” James, mi mayordomo se acercó para ofrecerme una taza de té y señalar a uno de los sirvientes para ayudarme a vestir. “Es un día magnífico.”Si, siempre era un día perfecto, aunque no lo entendía.Desde a
[Perspectiva de Edén]No lo entendía, ¿cómo llegué aquí? Yo solo quería un poco de agua para mi garganta seca, solo agua. ¿Qué tenía esa botella entonces?No puede ser. No puede ser.Solo recuerdo que lo bese, y después… lo volví a besar. Pero él… él me respondió, me llenó la boca con su lengua y no me dejó escapar. Sentía que me asfixiaba, sentía que el calor me abrumaba y solo cuando me quitó el vestido… no, no, no pude evitarlo, y él… ese hombre no se resistió.No lo puedo creer. Mi primera vez en este mundo fue con un desconocido, en el restaurante del amigo de mi papá, mientras termin&aacut
Mi madre me explicó que el Duque, dichoso y atractivo Duque Albert, se había adelantado a toda situación. Al parecer, sabía que mi padre no dejaría que ese hombre se casara conmigo, no cuando nos encontró en tan comprometedora situación, pero no tuvo opción.El tal Duque hizo la solicitud ante el Rey Erik a primera hora de la mañana y lo logró. Pidió mi mano en matrimonio, y el Rey sin dudarlo lo aceptó. No sé qué artilugios o sobornos presentó ante el Rey, pero solo unas cuantas horas pasaron para que mi destino jugara conmigo de nuevo.¿No debería yo estar de acuerdo con todo esto? Fue un error, solo un error, un pequeño sorbo y todo mi mundo volvió a estancarse en problemas con otro hombre.<