Para Teodoro Saenz, Amy es lo más valioso que tiene en la vida y por la que estaría dispuesto a dar la vida misma . Lamentablemente no puede donarle ese corazón que a su hija tanta falta la hace, el mismo piensa que ya vivió lo suficiente en este mundo y su único deseo es que su hija viva, viva mucho. Cuando se enteró del enamoramiento de Amy por Alexander, no dudó en ningún segundo ponerse en contacto con el padre de este y proponerle que sus hijos se conocieran y que con un poco de suerte contrajeran matrimonio, gracias a Amparo que siempre lo mantenía al tanto de todo le dio semejante sorpresa a su hija. Observar el rostro lleno de felicidad de Amy cuando estuvieron con viviendo en la cena con Alexander y sus padres para él no tuvo precio, desde los últimos días su hija estaba más animada y sonriente y ello le tranquilizaba, por eso mismo haría hasta lo imposible por que Amy terminara casada con Alexander y pudiera vivir lo que le quedaba de vida feliz.Alexander abrió los ojos
—Ezequiel—, tragó saliva, mientras este se perdía en el escote de su blusa de tirantes, el calor comenzaba a recorrerle el cuerpo con fascinación—, escúchame solo un momento ¿ si?. —Dime—. Exclamó perdido entre sus senos. —Solo se cuidadoso ¿por favor? —. Eso lo hizo detenerse y levantar su mirada conectándola con la de ella —. Cariñoso El hombre su acercó a sus labios y la sujetó de la barbilla. —¿Solo dime si quieres hacerlo o no? Pero no me pidas que sea cuidadoso cuando he extraño tu cuerpo más que la misma cocaína en mi sistema. ¿ Te es incómodo aquí? Podemos ir a otro lugar, solo di si o no, sabré entender. No , por supuesto que no sabría entender lo conocía, tal vez no la obligaría a tener sexo con el, pero las consecuencias las terminaría pagando Alexander ahora que sabía de el. Si dejaba que su cuerpo decidiera la respuesta era si, si quería tener sexo con el, hacía mucho que no tenia, desde que el se fue de su vida, pero si su corazón y cabeza hablaba la re
POV AMY XIOMARA El amanecer que tuve el día de hoy fue totalmente el mejor que he tenido en años, despertar en los brazos de Alexander fue de lo más placentero, parecía un sueño. Lo primero que vi al despertar fue su atractivo rostro, sus facciones tan perfectas, su respiración pausada y los latidos de su corazón a un ritmo perfecto; me encantaba escucharlo. No lo podía creer, mi vida había dado un cambio total, hace poco estaba solo imaginándome con lo que podía ser entre el y yo. Y ahora lo tenía sentado frente a mí, en mi mesa , mirándome de una manera indescifrable, que me hace estremecer, provocándole mil emociones a mi corazón. Y lo mejor de todo esto son sus besos; Dios, sus besos saben tan bien, besa de una manera deliciosa, profunda, salvaje, voraz, que me enloquece. Cuando lo vi entrar a la sala, él aire abandonó mis pulmones y tuve que salir a la cocina en busca de mi inhalador. Gracias a Dios Marlene siempre esta para darme consejos y muchos ánimos, así pude salir y
Alexander fue avisado que los venían siguiendo, sus hombres Arthur y Armad iban adelante de ellos, solo harían un movimiento para que el auto de Alexander tomara la delantera y cualquier movimiento en su contra lo recibieran ellos y no el pelinegro . No contaban con que serian embestidos antes de, por una camioneta que los hizo girar, golpeándolos con fuerza junto a otros vehículos; el auto que los seguía solo había sido una distracción. De la camioneta se bajaron tres tipos que no dudaron en accionar sus armas en contra del auto donde viajaba Alexander y Amy. El pelinegro observó como impactaban las balas en los vidrios del auto; no corrían peligro el auto era blindado Buscaba reconocer a esos hombres que descargaban sus armas en su dirección, sin embargo, no podía pues estaban cubiertos con pasamontañas. El cuerpo de Amy temblaba junto a él mientras la tenia abrazada fuertemente, su respiración estaba descontrolada. Solo fueron unos segundos, un instante en el que todo suc
Capítulo 1 POV Amy Xiomara El delicioso sabor del chocolate llega a mi paladar y me hace soltar un placentero gemido, hoy amaneció en mi mesa de noche aun lado de mi cama una hermosa caja de chocolates, mis favoritos, sonreí porque se quien entró a mi habitación aprovechando que estaba dormida y los dejó, sabía perfectamente que con ese regalo mi enojo quedaría en el olvido y como no hacerlo si el chocolate es lo que más me gusta en este mundo, bueno, la segunda cosa que más me gusta ya que el primer lugar lo ocupa él, ese hombre que me roba suspiros con solo mirarlo en la televisión, ese que provoca que mi frágil corazón se acelere con tan solo escuchar su voz y que hace que el aire me falte en los pulmones, Alexander Santana Toto un magnate hombre de negocios dueño de la compañía de teléfonos móviles más importantes, Air Voice ; un hombre tan hermoso y sexy que roba suspiros a toda mujer que se cruce en su camino, estoy más que segura de eso; alto, piel blanca, ojos negros int
Marlene comienza a reír y me lanza una almohada, yo imito su acción.—Que sucia eres, solo esperas un par de provocaciones mías y te vas como hilo de media ante tus pensamientos lascivos—, entrecierra los ojos y hace una mueca de indignación fingida—, no puedo con tanta falta de pudor.—No me culpes, pero créeme que si lo tuviera enfrente y me pidiera acostarme con él yo no declinaría su oferta, por el contrario me entregaría completamente a él sin reservas, ese hombre me gusta me gusta mucho y no me quiero ni imaginar lo que es sentirse entre sus brazos porque es muy temprano para autocomplacerme, además quisiera sentir dedos varoniles dándome placer y ya no los míos —, con Marlene puedo expresarme sin problema alguno , a ella le cuento todo lo que siento y lo que me pasa ,además que en ciertas ocasiones ella sin vergüenza me platica sus encuentros ,por que sí, a pesar de estar con sobrepeso tiene más actividad sexual que yo, lo mío es solo acariciar mi sexo y listo, no más y es que
—Oye ¿te encuentras bien? ¿Vienes con alguien?—. Hace preguntas buscando mi rostro, pues es muy alto para mi, preguntas que no puedo responder, no en este momento y solo me aferro con fuerza a su saco y mantengo mi mirada en su pecho. ¡Mi respiración esta descontrolada! Debo controlarme, debo hacerlo, la impresión es demasiada, justo hoy, en este lugar, en este momento y en estas circunstancias. ¿Por qué? Me debo de ver fatal, pude haber escogido alguna otra ropa que me favoreciera, debí arreglarme más, maquillarme, hacerme algún peinado, no recuerdo haberme cepillado mis dientes. Una avalancha de pensamientos llegan a mi mente, se supone que deben ser para calmarme pero hacen todo lo contrario. Siento que voy a desmayarme y no quiero que pase no frente a él no con él, me repito que soy fuerte y que tengo que aprovechar este momento, me digo que el destino no se equivoca y por algo hoy era el día indicado para conocerlo. ¿Por qué soy tan débil? Me reprocho. Siento una calidez
Llegamos a la casa y el chófer que ahora se que anda de amores con Marlene nos ayuda a llevar las bolsas, los dos suben para dejar todo a mi habitación mientras yo me entretengo en la cocina. —Hola a todas—, saludo, esta Tita la cocinera con sus dos hijas Fátima y Gregoria, son chicas de aproximadamente unos 15 años, sorprendidas me saludan. —Buenos días señorita ¿necesita algo? —¿No fueron a la escuela? —No, hoy no tuvimos clases —, responde Fátima con una sonrisa en los labios. —Bien, me podrías servir un poco de helado de chocolate por favor. —Claro que si enseguida. Mientras Fátima me sirve el helado, me siento a una lado de la barra, observo como en silencio trabajan, Gregoria pica un poco de jitomate y Tita hace una bolas de carne para después ponerlas en un bol, ambas se miran de reojo, las veo tensas y se que es por mi presencia y es que no están acostumbradas a tenerme en la cocina. —¿Y mi nana?—,pregunto cuando Fátima me coloca el pequeño tazón de helado fren