Periodo

No sé en qué momento Nathan salió de mi habitación, era de mañana y me levanté sola en la cama, no sentía dolor en el brazo y hombro, pero si podía sentir mi mejilla hinchada, esto no se va a ver bien, me dije a mí misma. Me dirigí a la puerta y llamé a Lupe para que me pudiera ayudar a cambiarme, pero en su lugar contestó Nathan.

—¿Señorita Adriana? —preguntó al subir las escaleras.

—¿Dónde está Lupe?

—Salió con Daniel.

—¿Y Jaime?

—Salieron los tres y no regresarán hasta la noche.

—Genial, entonces solo somos nosotros —dije sarcásticamente.

—Así parece, ¿necesita ayuda en algo?

—Quiero tomar una ducha, pero no puedo sola.

—Su mejilla —dijo con preocupación—. ¿Le duele?

—Sí, ¿está bien hinchada?

—Sí, un poco. Tendré que ponerle un poco de hielo otra vez.

—Pero me ayuda primero a bañarme, en verdad lo necesito…

—¿Se encuentra bien?

—No, la verdad.

Mi cuerpo se tambaleaba, y solo ocurría cuando me enfermaba de la regla, cogí mi vientre y sentía como me ardía por dentro. Reí sin parar al
Sigue leyendo en Buenovela
Escanea el código para descargar la APP

Capítulos relacionados

Último capítulo

Escanea el código para leer en la APP