Santos se dirigió atrás de la cabaña y vio al hombre desenterrando a un cadáver de varios días, alguien que conocía al hombre, se asombro al verlo.

- Charlie?!! ... eres tú?...- preguntó incrédulo el hombre.

Charlie lo miró con la mirada perdida, no hizo caso a las personas que estaban a su alrededor.

Un oficial se acercó a Santos.

- Señor... hemos encontrado algunas pertenencias de las víctimas, no hay duda ... ese hombre es el asesino...- dijo convencido el policía.

Santos lo miró con decepción, sabía exactamente lo que estaba pasando, la escena con las pruebas que incriminaba al hombre y sobretodo encontrarlo con las manos en la masa, no era más que un ardil plan de Benoit Miroslav para safarse de las sospechas que estaban recayendo en él y su amigo.

- Lleven al hombre a la comisaría... para interrogar su participación en los asesinatos...- dijo frustrado Santos.

Los policías tomaron al hombre antes que la multitud lo lincharan con sus propias manos.

- Déjenos a nosotros hacer justicia!! ... nosotros lo haremos pagar por los asesinatos!!!...- gritaba la gente.

- No!! ... no sé ensucien las manos con sangre... les prometo que si él es culpable, recibirá todo el peso de la ley!!..- dijo Santos para calmar a la multitud. 

El mayordomo de la casa Real , vio el cuerpo enterrado y se dió cuenta que era Gladys, la empleada que había desaparecido.

- Oh!!... Gladys... tenía la esperanza que estuvieras con vida...- dijo con tristeza Igor.

Los vampiros que se encontraban en la copa del árbol, observaban con atención lo que estaba sucediendo.

- Ahora... debemos buscar nuestros alimentos en la monarca cercana, debes evitar matar en este pueblo, ya has llamado la atención, espero que crean que ese pobre diablo es el asesino...- dijo Benoit Miroslav pensativo.

Mientras llevaban al hombre este realizó un movimiento que se safo de la custodia de los oficiales, al verse acorralado tomó la pala y comenzó amenazar a los presentes. 

- Sueltenme !! O los mataré a todos!!..-gritó Charlie. 

Santos se acercó con cautela para tranquilizar al hombre, Alfred que se encontraba entre la muchedumbre, observabando la escena con preocupación por lo que decidió acercarse con cuidado si algo salía mal para que él pudiera intervenir, las miradas de Benoit y Vladimir estaban pendiente por los acontecimientos y como se resolvería este asunto. 

- Charlie... baja esa pala... no es necesario hacer daño a nadie... vamos a hablar con calma...- dijo  cauteloso Santos .

La mirada del hombre estaba perdida , sus acciones eran controlada por Benoit y Vladimir.

- Deben dejarme ir!!... o mataré alguien!! Estoy hablando en serio!!...- volvió a gritar. 

El hombre tenía la pala levantada para dar el primer golpe para quien se atreviera detenerlo.

Un oficial trato de detenerlo por detrás pero el hombre fue más rápido y le dio un golpe en la cara del hombre que lo dejo inconsciente. 

La multitud comenzó a gritar de miedo y muchos de ellos corrieron despavoridos por lo acontecido. 

Santos se adelantó donde el oficial caído para revisar su estado.

Charlie estaba mirando a Santos con irá y cuando hiba a darle un golpe , Alfred lo detuvo con fuerza. 

Santos lo miró con asombro y por un momento estuvo paralizado sin saber que hacer.

-Señor!! Debemos arragar al detenido!!...- grito un oficial. 

Santos reaccionó y se abalanzó al hombre derrumbandolo al suelo con su cuerpo. 

- Donde están las amarras?...- gritó Santos. 

Santos amarró al hombre tanto de las manos como por los pies.

- Llevenlo a la carreta!!...- ordenó Santos. 

- Si señor... que hacemos con el oficial caído?..- preguntaron los otros oficiales. 

- A la otra carreta... lo llevaré donde el doctor Poe...- dijo Santos cansado. 

Alfred se acercó a Santos con cautela, este al verlo abrió sus ojos de asombro. 

- Se encuentra bien usted ? ...preguntó Santos a Alfred. 

Alfred asintió con la cabeza. 

- Si... señor... estoy bien y usted?...- preguntó con interés Alfred. 

-Si... gracias por intervenir... este hombre estaba dispuesto a todo...- dijo preocupado Santos. 

Alfred le sonrió con cortesía. 

Benoit y Vladimir observando lo sucedido, suspiraron de decepción. 

-Uf!! Que aburrido todo esto... pensé ver más sangre... pero el estúpido de tu mayordomo es un aguafiestas...- dijo con fastidio Vladimir. 

Benoit solo lo miró con desprecio. 

Después de lo sucedido la ciudad de San Juan de la Luz; volvió a la normalidad. 

Mientras tanto en Italia un hombre misterioso esperaba la llegada del barco que venía de Francia, ya había pasado dos semanas desde que Caroline y Amelia embarcaron con rumbo a Italia. 

El viaje apesar de lo acontecido por la tormenta fue una trayectoria tranquila, al llegar al muelle de Napoles, los pasajeros comenzaron a desembarcar tranquilamente. 

Dan bajo con las chicas y hombre regordete los saludo.

-.Segnore!! Aquí!!...- dijo el hombre alegremente. 

Dan se acercó a él con confusión. 

- Usted es Piero?...- preguntó confundido Dan.

- Ecco!! ... sono Piero !! Los vine a buscar para llevarlos a su hogar...- dijo alegremente el hombre. 

Cuando estaban a punto de subir  a la carroza , el hombre misterioso se acercó a ellos. 

- Disculpe señor... ustedes vienen de Francia de la ciudad San Juan de la Luz?...- preguntó el hombre. 

Dan lo miró de arriba a abajo, era un hombre joven de unos veinte años, pelo castaño claro, ojos de color miel , era un hombre atractivo, apesar de su aura de misterio, se veía un hombre confiable.

- Si...este barco viene de San Juan de la Luz..- dijo con amabilidad Dan.

El joven miró con decepción el barco. 

- Usted sabe cuando vuelve a Francia?...-. Preguntó con interés el hombre. 

- En dos semanas vuelve a zarpar a Francia... usted quiere viajar a San Juan de la Luz?.

El joven lo miró con curiosidad. 

- Si... necesito encontrar a alguien... pero a lo mejor usted lo conoce, estuvo algunos meses aquí, un tal doctor Poe... usted lo conoce?...preguntó el hombre. 

Dan abrió los ojos de asombro .

- Vaya!!... que chico es el mundo.. el doctor Poe es mi amigo y trabajamos juntos en San Juan de la Luz...-.dijo sorprendido Dan.

- Oh!! Que alegría saber eso... me presento señor... mi nombre es Henry Hunter...- dijo el muchacho. 

- Hunter?... cazador en inglés?..- preguntó con curiosidad Dan. 

Henry le sonrió con amabilidad. 

- Si... Hunter...el cazador ...