Doctor Poe

El doctor Poe era un hombre extravagante para muchos, tenía ideas raras para su época, estuvo luchando con las tropas de Napoleón y se creé que perdió la razón, pero el oficial Santos tenía una confianza extrema en este hombre, él con solo mirar un cuerpo podía decir de que murió y a qué hora, por eso nadie más que él podría resolver el misterio de los diez cadáveres.

 El doctor Poe estaba en su laboratorio realizando algún experimento cuando escuchó los carruajes llegar a su casa, salió a ver quién era, abrió los ojos de asombro al ver a su amigo Santos llegar tan tarde.

- Pero que ha pasado? Porque están aquí tan tarde?...- preguntó Intrigado el doctor.

El oficial Santos se bajó del carruaje y extendió su mano al doctor.

- Siento mucho venir a esta hora... pero hay algo que quiero que veas...se encontraron diez cuerpos en el barco que venía de Italia, y la causa de sus muerte no está clara...- dijo con tono de preocupación.

- Mmm ...has captado mi curiosidad Santos, veamos de que se trata...por favor muchachos lleven los cuerpos a la morgue...- les pidió el doctor Poe.

Los oficiales obedecieron y llevaron los diez cuerpos a una habitación donde el doctor lo usaba como morgue, era una habitación fría, dónde en una mesa se encontraba otro cadáver, los policías se miraron aterrados por la imagen, el cuerpo estaba siendo embalsamado.

- Ah!! Les presento al conde Real, la familia pidió embalsamarlo antes de ser llevado a su última morada ... bueno no tengo muchas mesas, así que tendremos que poderlos de a dos ...- dijo naturalidad el doctor.

 El doctor Poe se puso sus lentes y comenzó a observar los cuerpos con cuidado, una expresión de asombro se dibujo en su sien.

- Mmmm... tienes toda la razón Santos, realmente es un misterio...estas pobres almas le succionaron toda su sangre...están literalmente secos ...dijo asombrado mientras revisaba sus cuellos.

- Entonces no sabes que pasó con ellos? ...- preguntó preocupado el policía.

- He visto las caras de la muerte, querido amigo pero nunca algo como ésto... Sus cuellos tienen dos marcas que parecen colmillos por lo profundo, pero no hay ningún animal que se alimente de sangre... Y mucho menos de tanta...- dijo con asombro.

- Entonces que hacemos? Tengo que dar un informe y entregar todos los datos al nuevo oficial, además que debemos sepultarlos en la fosa común...- dijo tristemente el oficial Santos.

- Te pido unos días más para examinar con más detalles sus muertes, ahora tengo que terminar de embalsamar al Conde Real, su familia quiere su cuerpo listo para mañana, y te prometo investigar con más calma este asunto, por mientras investiga quien venía en el barco y si hicieron algunas paradas en algún lugar...- le aconsejo el doctor Poe.

- Tu sabes que confío en ti Poe , pero no puedo darte más que dos días, después de eso me llevaré los cuerpos para su sepultura...- dijo con determinación el oficial.

- Con eso dos días estaré bien amigo...es una lastima que jubiles ahora... Puedes trabajar conmigo si quieres, necesito un asistente, los que he tenido no aguantan más que dos días y salen corriendo...- dijo frustrado el doctor.

- Lo pensaré...por ahora mi objetivo es dejar todo en orden para el nuevo reemplazo y que al parecer es joven...bien te dejamos con tus muertos...y el Conde Real... Era un buen hombre.. adiós amigo te veo en dos días...- dijo Santos despidiéndose del doctor.

Después que los policías se fueran, el doctor Poe quedó mirando los cuerpos con detención, se acercó a ellos y los volvió a examinar, sacó una huincha de medir y midió la distancia de los agujeros del cuello, se sorprendió al ver que todos tenían la misma medida.

- Esto es extraño, muy extraño , todas las mordidas tienen la misma longitud y profundidad... Entonces fueron hechas por misma criatura... Pero que criatura es está que bebé sangre?...- pensó contrariado el doctor.

 Comenzó a moverse de un lado a otro tratando de recordar algo que le diera alguna pista de lo que estaba pasando, pero nada venía a su mente.

- Bueno mejor que termine con el Conde Real...- dijo con tono de frustración.

Después de terminar con el cuerpo del Conde, el doctor Poe decidió ir a descansar, cerró todo muy bien y se fué a la cama.

En la penumbra de la habitación unos ojos rojos despertaron de un sueño profundo, era unas de las mujeres atacadas en el barco, se levantó de la mesa y vió a los demás tendidos en la mesa.

- Que está pasando? Porque estoy aquí? ...- dijo asustada. 

 Hasta que escucho en su mente una voz que la llamaba, la voz era penetrarte y a la vez seductora, los sentidos de la mujer se volvieron más intenso con ese llamado y una oleada de deseo invadió su ser, rompió una ventana y desnuda fue en busca de la voz que la llamaba 

Llegó a una casona vieja y entro en busca de aquella voz, cuando vió en las escaleras a un hombre, el deseo la invadió cada vez más que sin pensarlo se abalanzó a aquel hombre.

El hombre la besó con pasión y el cuerpo de la mujer temblaba de placer que sus quejidos eran cómo un animal en celo.

 El hombre recorrió todo su cuerpo con sus manos, no había palabras solo deseo, la mujer se vió envuelta en una espesa neblina y sin darse cuenta estaba siendo poseída por ese hombre, hasta que él besó su cuello y sus colmillos aparecieron y de una sola mordida profunda provocó el éxtasis en ambos, la mujer comenzó a convulsionar fuert

emente hasta que cayó al suelo inerte...

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