NOVELA COMPLETA. La abandoné sabiendo que la amaba con locura. Lo hice porque estaba seguro de que nuestras vidas no estaban destinadas a unirse, y porque soy el responsable directo de la desgracia de su familia.Me convertí en un fantasma por Luciana...Pero después de quince años sigo pensando en ella. Sigo deseándola. Sigo amándola como un loco.Y cuando por fin vuelvo a encontrarla, cuando entiendo cuánto abandoné, desearía de verdad estar tan muerto como ella creía.No importa cuántas veces me haya subido antes al ring, esta será la verdadera pelea de mi vida.
Leer másNota del autor y próximas novelasMe guastaría agradecer a todas las lectoras que se han tomado el tiempo para terminar esta novela. Y les ofrezco una disculpa si tuvo que ser momentáneamente interrumpida en otra plataforma.Sé que quedaron algunas interrogantes fuertes pero si han leído antes ya están acostumbrados a que todas las interrogantes de una novela normalmente se resuleven en otra.
Santi.El teléfono suena y arrugo el ceño, porque no se supone que este teléfono suene. Nunca. Es el nuevo celular encriptado que Mateo me puso en las manos hace tres meses, el día que Leisy y
LucianaLe doy el codazo que se merece, porque ya sabíamos los dos que iba a meter en problemas a Ruben con lo de la boda de Thiago y Layla, pero igual lo hizo sólo por molestar a mi hermano. Tres meses despuésGrillo.—¿Sabes qué? —mi Solecito se sienta sobre mis piernas y rodea mi cuello. Me besa con una picardía tan sugerente que sé que está a p37. UN LARGO LARGO FELICES PARA SIEMPRE. 1
LucianaEl silencio parece hacerse extenso, agotador, mientras sólo nos miramos a las caras como extraños. Me resulta increíble que Nico pueda estar aquí, pero confío en Grillo cuando me dice que está de nuestro lado y más allá… es mi hermano.
XGrilloSolecito se prende de mi cuello y llora, no sé si de alivio o de tensión, en el mismo momento en que Mateo nos avisa que tienen a nuestra hija. No es que no me preocupe lo que pueda pasar con nosotros, pero si tengo que pelear por nuestras vidas, y estoy seguro de que tendré que hacerlo, me tranquiliza que ninguno de mis hijos tenga que presenciarlo. Santi.—¿Mamá? ¡Mamá! Veo que da un salto al otro lado de la pantalla y de sale de los brazos de mi padre para acercarse corriendo.34. SÉ QUIÉN ES...
Luciana.Doy un salto cuando uno de los sensores comienza a sonar y tanto Grillo como yo nos acercamos a las pantallas con donde aparecen las imágenes de las cámaras. Después de destruir media casa, y de soportar los gritos de ira rabiosa de mi padre, por fin a alguien se le ocurrió llegar al sótano y acaban de descubrir la puerta del cuarto de pánico.
Santi.No es que estuviera precisamente buscando una excusa para salirme de la clase de la señorita Delmer, aunque su triste dominio de los trinomios bien valía la pena… pero cuando el celular vibra en mi bolsillo, el corazón me sube a la garganta y salg