Viendo a mi hermana en ese riesgo, siendo sostenida de forma fuerte por Chuck, quien la mantiene quieta tirando de su pelo y haciéndola lloriquear, me pongo firme, acercándome a él con cara de pocos amigos.

—Esto es muy bajo, incluso para ti Chuck —lo acuso mirándolo molesta.

Aun desde el escenario y mostrando su feo rostro desde la espalda de mi hermana, Chuck muestra una expresión asustada, sin poder dejar de mirar a todos los lobos a nuestro alrededor y con las manos temblorosas.

—Vaya que tienes amigos interesantes Cassie —dice él de forma temblorosa—, ¿Por qué no les pides que se marchen y hablamos los dos, siempre hemos sido como familia?

¿Familia? Sonrío cuando escucho esa palabra, Chuck no es mi familia. Es el tipo que me esclavizó desde que tengo 16 años, que me entrenó para volverme una ladrona a cualquier costo, incluso llegando a acostarme con los clientes para tener lo que él desea, haciendo de mi vida un infierno…

Después de mi ebrio padre, Chuck en definitiva es el tipo