Cuando el sol se pone y ya no hay nadie en las calles en medio de la obscuridad, los lobos transformados se acercan lentamente hacia ese derruido edificio donde Chuck tiene un bar, y mi hermanita esta encerrada.

Yo me quedo apartada, a varios metros de distancia, y aunque intento asomarme para ver lo que ocurre, los fuertes dedos de Adan se sujetan a mi muñeca, impidiéndome acercarme mas y manteniéndome detrás de él.

—Sabes cual fue el trato —dice él con una expresión muy fría en su rostro—, no hagas nada estúpido.

—No estaba planeando hacer nada estúpido, ¿De acuerdo? —respondo soltándome de su agarre de mala manera—. Solo quería ver como estaban yendo la cosas y si ya rescataron a Leslie.

Adan ha estado comportándose como un verdadero idiota desde que nos reencontramos hace unas horas. Después de dormir en la suite del hotel, yo volví a ponerme firme y a exigir que rescatáramos a Leslie, y aunque Adan y yo volvimos a discutir, él finalmente aceptó, con algunas condiciones:

—No quier