Tras un par de minutos la presentación de Crystal termina, y el auditorio se llena de aplausos, mientras mi hija sale del escenario.
—¿Mami te gusto mi presentación? —me pregunta mi hija cansada, mientras yo la tomo en mis brazos.
—Si preciosa, lo hiciste increíble.
—¿Estas segura? Porque yo no vi a mami viéndome… ¿Qué estabas mirando?
Seguramente mi pequeña me vio desde el escenario perdida mirando al hombre al fondo del auditorio, así que por un segundo me siento como una idiota, porque me perdí la presentación de Crystal por mirar a ese tipo.
—Nada mi amor, te vi a ti, lo hiciste precioso como siempre. Ahora vamos a tomar un poco de agua —le miento rápidamente, ya que no quiero herir sus sentimientos.
La presentación continua, ya que a pesar de ser Crystal la estrella principal, la escuela también iba a mostrar a sus demás gimnastas. Así que pronto el escenario se llena de otras niñas de diversas edades, las cuales también proceden a hacer sus actuaciones para el público.
Pero Crystal y yo vamos a los vestidores, yo le quito sus bonitas mallas de gimnasta y le pongo ropa más cómoda, dándole un poco de agua y masajeando un poco sus hombros para relajarla. Cuando estamos listas, vuelvo a tomarla en mis brazos, saliendo de los vestidores para reunirnos con Theresa y los niños, que seguían mirando la presentación.
—¿Vamos a quedarnos un poco más? —me pregunta Theresa en un susurro.
—Solo un poco, Leon prometió venir y llevarnos a cenar… —con una sonrisa pícara miro a mi mejor amiga, la cual obviamente se sonroja.
—No sé qué clase de planes malvados tengas, pero tu jefe no me interesa.
Yo solo puedo reír, mientras me acomodo de mejor manera en mi asiento para ver las presentaciones.
Entonces regresa a mi mente ese hombre de ojos azules, haciéndome voltear hacia la puerta de forma disimulada. Pero ya no hay nadie ahí, la puerta esta vacía, ese hombre se fue.
No entiendo por qué, pero no verlo ahí me decepciona… Tal vez solo quería verlo de cerca una última vez.
***
Cuando la presentación termina, salgo del auditorio cargando a mis dos hijos, mientras que Theresa me ayuda con Crystal. En el exterior esta Leon, esperándonos con más flores.
Al vernos llegar con los niños, Leon inmediatamente nos ayuda, abriendo las puertas de mi coche para permitirnos entrar. Mis pequeños se quedaron dormidos a media presentación, así que de forma cuidadosa los pongo a los tres en sus sillitas en el asiento trasero del coche, dejándolos dormir tranquilos.
—Supongo que el plan de la cena queda cancelado —me dice Leon mirando a los niños dormidos.
—Lo siento, creo que estaban muy cansados —me disculpo algo avergonzada mirando a mi jefe.
—Descuida, será para otra noche.
Yo sé que Leon está interesado en mí, por la forma en la que me mira o como cuida a mis hijos. Pero yo no estoy interesada en ningún hombre, por lo menos no por ahora, cuando estoy tan enfocada en mi crecimiento profesional y tres niños pequeños. Además de que jamás podría estar con alguien que le gusta a mí mejor amiga…
—Pero Theresa está disponible —digo de pronto.
—¿Qué? —pregunta mi amiga sorprendida, asomándose desde el otro lado del coche.
—Sí, tu estas disponible para cenar —insisto mirándolos a ambos—. Vayan juntos al restaurante que Leon reservó y traigan algo delicioso a mi departamento, podemos tener una noche divertida los tres cuando meta a los niños a la cama.
Sé que no era el plan de Leon, porque él probablemente quería tener una noche conmigo y los niños. Pero yo siempre aprovecho cada oportunidad que tengo para dejar a Leon y Theresa juntos, si los dos se enamoran yo sería muy feliz, Theresa es mi mejor amiga y Leon es el mejor hombre que conozco, no había una pareja mejor para ellos.
A pesar de que intentan negarse, gracias a mi insistencia los dos finalmente acceden y se van juntos en el coche de Leon, prometiendo venir a mi casa en menos de una hora con comida muy deliciosa. Sin embargo yo no los presiono, prefiero que Theresa tenga una linda noche al lado del hombre que le gusta sin mis interferencias.
Con todo preparado, me subo en mi coche y comienzo a conducir de regreso a casa, mirando a mis bebés por el retrovisor de vez en cuando. Los tres están profundamente dormidos, así que intento ir lento, para no despertarlos. Abandono Downton y comienzo a conducir por las calles cada vez más vacías en dirección a Old City, donde está mi departamento y la casa de Theresa.
—¿Qué es ese olor? —de pronto pregunta Crystal, despertando en el asiento trasero.
—Preciosa, deberías regresar a dormir —digo de inmediato mirando a mi pequeña por el retrovisor, suponiendo que ella solo tuvo un sueño.
—Mami, hay un olor raro —insiste Crystal tallando sus ojos suavemente—, huele feo.
—¿Huele a que cosa amor?
—Perro mojado…
Me convenzo de que mi pequeña estaba soñando, y no puedo evitar sonreír, distrayéndome de la carretera por un segundo, y es cuando un coche viene hacia nosotros a toda velocidad. A penas pidiendo sostener el volante en mis manos mientras mis bebés gritan en el asiento trasero, siento como un coche salido de la nada choca contra el mío, sacándome de la carretera.
—¿Niños? ¿Están bien? —pregunto asustada, girándome para ver a mis pequeños en el asiento trasero.
Ellos no me responden, llorando y luciendo muy asustados, pero no parecen estar heridos. Yo logro recuperar un poco la compostura antes de poner el freno de mano y apagar el motor, bajando del coche para ver a las personas que nos habían chocado. Teníamos que hablar a las aseguradoras y esas cosas, algo que me hace sentir culpable, ya que el choque probablemente pasó por mi culpa cuando me distraje hablando con Crystal.
Bajando del coche dispuesta a disculparme, veo como hay una camioneta negra bloqueando el camino, del cual salen cuatro hombres que lucen peligrosos y me dan mala espina.
Old Town no es el mejor barrio en la ciudad, pero es el lugar donde Theresa tenía su casa la cual yo rentaba, así que a veces veía ese tipo de personas en la calle… Personas que parecen peligrosas.
—Buenas noches, disculpen las molestias, fue mi error —me disculpo de inmediato con los desconocidos—, si me dan los datos de su seguro mi abogado se pondrá en contacto de inmediato…
Pero los hombres parecen ignorarme, acercándose a mí de forma amenazante. Pensaba que querían venir a ver la matrícula de mi coche, pero ellos se acercan a la ventana, mirando a mis bebés, los cuales siguen llorando asustados.
—¿Son los cachorros? —pregunta uno de ellos.
—Toma a los tres —responde otro.
—¿Y la Luna?
—Puedes matarla, ella no sirve de nada.
Confundida por sus palabras, veo como ellos intentan tomar la manija de la puerta de mi coche, algo que me hace reaccionar e interponerme.
—¿Qué creen que hacen? ¡Voy a llamar a la policía! —amenazo en un grito.
Pero nuevamente parecen ignorarme, y con mucha facilidad uno de ellos me toma del cuello para apartarme del coche, haciéndome gritar por la fuerza que tiene.
—¡No! ¡No toques a mis hijos! —grito aterrada, viendo como ellos comienzan a golpear la ventana de mi coche con fuerza para romperla.
No entiendo lo que pasa, y con todas mis fuerzas intento deshacerme del tipo que me tiene sujeta del cuello, tratando de arañar su rostro y su brazo para que me suelte, algo que solo consigue hacer su agarre más fuerte. Mientras que a la distancia escucho los gritos de mis bebés, los cuales llaman mi nombre, todavía encerrados en el coche.
Esto no puede estar pasando… Por favor… Que alguien nos ayude.
De pronto escucho el fuerte sonido de algo cayendo sobre mi coche, y girando la cabeza como puedo, veo a ese hombre… El mismo que estuvo en el festival de mi hija, quien parece haber caído desde uno de los arboles alrededor de la carretera.
—Mierda… Es el alfa… —dice uno de los desconocidos mirando al hombre sobre mi coche.
—Aleja tus manos de mis cachorros —responde el hombre de los ojos azules, de una forma muy atemorizante.
Entonces soy testigo de un evento increíble, ya que ese hombre sobre mi coche salta en el aire y se convierte en un lobo frente a mis ojos, atacando a los tipos peligrosos.
Esto definitivamente es un sueño…
Con la boca abierta por la sorpresa, caigo al suelo de rodillas, mientras el hombre que me sostenía del cuello me soltaba, y enfocaba toda su atención en el lobo que hace solo unos minutos había sido un hombre…Aun sin poder creer lo que estoy viendo, observo a ese gran lobo negro atacar a los cuatro hombres que chocaron mi coche, los cuales intentan huir o intentan defenderse sin éxito.Es un sueño, es un sueño… ¡Tiene que ser un maldito sueño!En menos de lo que me doy cuenta, los cuatro extraños que me atacaron terminan en el piso, y el mismo lobo negro se acerca lentamente en mi dirección, haciéndome retroceder en el piso asustada. ¿Yo soy la siguiente? ¿Va a comerme?Pero el lobo no hace nada de eso, me mira fijamente antes de convertirse en humano otra vez. Eso es demasiado para mí, y viendo a ese hombre de ojos azules el cual ahora estaba desnudo frente a mí, me desplomo en el suelo, quedando inconsciente.—Tranquila Lucy, ya estoy contigo.***Siento unos suaves toques en mi f
Me quedo helada al sentir sus labios sobre los míos, sin saber cómo responder, apenas pudiendo respirar.Sé que estuve embarazada, lo cual vuelve a esta situación en algo más ridículo, pero yo de verdad no recuerdo haber tenido ninguna experiencia romántica con ningún hombre en el pasado, no recuerdo mi primer beso, no recuerdo mi primera cita, y mucho menos como perdí mi virginidad. Y aunque ahora soy una madre de tres niños y una mujer “adulta”, no puedo evitar entrar en pánico al sentir los labios de este guapo pero extraño tipo sobre los míos, quitándome mi primer beso “consciente” de esta forma.Cuando Jason finalmente se separa de mí, se nota algo extrañado, mirando mi rostro asustado y avergonzado, creando un ambiente más incómodo entre nosotros.—¿Pero qué rayos te pasa?—Mire… Señor… —respondo intentando mantener la poca calma que me queda— Creo que se ha equivocado de persona.Jason pone una expresión incrédula en su rostro, mientras su mirada dice algo muy claro: Piensa que
Siendo sincera, jamás pensé que iba a terminar en esta situación.—Sube al coche —me ordena Jason, abriendo la puerta trasera de mi propio auto para mí.—¿No debería conducir yo? —pregunto sintiéndome algo tímida.—No.Jason no parece un tipo accesible, en realidad parece esa clase de clientes que tenía en el supermercado que no te saludan al entrar y no te agradecen después de que los atiendes, serios y groseros.Con un suspiro, viendo su serio y hermoso rostro, decido obedecer, subiéndome en el asiento trasero al lado de mis dos hijos.—¿Papá vamos a pasar por algún parque para jugar? —pregunta Charlie sentado en el asiento del copiloto.—Tal vez —responde Jason subiendo al asiento del conductor—, por favor no olvides ponerte el cinturón de seguridad.Ver su comportamiento me hace fruncir los labios, es un idiota conmigo, pero se comporta bastante suave y amable con mis hijos, aunque nunca abandonaba su personalidad fría y cortante.Nunca pensé ser secuestrada con mis tres hijos por
Tengo que inventar una excusa, ¡Rápido!—Quería… Preguntarte tu nombre completo —respondo lo más confiada que puedo.Si, lo sé, es ridículo, pero no se me ocurrió nada más que decir en un momento tan tenso como este, apenas pudiendo pensar.—¿Nombre completo?—Sí, tu apellido y segundo nombre, si tienes algo como eso —intento explicarle.—No tengo un apellido, los lobos no lo necesitamos.Jason baja del techo de un salto, haciéndome retroceder un poco asustada. Si, voy a tener que acostumbrarme a esto, ver cosas que antes creía imposibles.—Supongo que algunos de los de mi raza que se mezclan con los humanos tienen apellidos, pero si vives en una manada, no necesitas algo como eso —me explica Jason, acercándose a mí.—Hay muchas cosas que no entiendo sobre todo esto…—¿Y por eso viniste a preguntarme en medio de la noche?No sé si él se dio cuenta de que planeo escapar, pero espero que no lo haya notado…Jason se queda en silencio, acercando su rostro mucho al mío, hasta que finalment
Sigo corriendo muy rápido, hasta llegar a la puerta destruida de la cabaña, donde Cameron corre a mis brazos aterrorizado.—¡Mamá! —grita mi pequeño asustado, mientras yo lo tomo en mis brazos para tranquilizarlo— Mami tengo miedo…—¿Y tus hermanos?Antes de que pueda entrar a la cabaña, Jason sale corriendo de la obscuridad, cargando a mis otros dos hijos que también están llorando y se aferran a él fuertemente, ¿Qué rayos está pasando ahí adentro?—Llévatelos, conduce lo más lejos que puedas —me ordena él, entregándome a mis hijos y luego lanzándome la llave de mi coche a las manos.—Estas sangrando —digo asustada, recibiendo a mis otros dos pequeños como puedo—, no voy a dejarte…—Lucy no te estoy preguntando, ¡Solo vete!Antes de que pueda seguir discutiendo, otra cosa se acerca a nosotros en la obscuridad, y mientras mis hijos y yo gritamos al unísono, veo como Jason se gira rápidamente y toma del cuello a lo que parece ser un gran lobo, deteniendo su ataque y evitando que pueda
Mis manos no dejaban de temblar mientras sostenía esa fotografía, donde aún no podía creer lo que estaba viendo…Todo este tiempo no dejé de pensar que Jason me estaba mintiendo, que solo era un animal demente. Pero ahora confirmo que me ha estado diciendo la verdad, y yo me pregunto, ¿No hubiera sido mejor mostrarme esta fotografía en el momento que nos reencontramos? ¡Todo hubiera sido más sencillo si lo hubiera hecho!—¿Por qué no me mostraste esto antes?—No creí que ibas a jugar con la idea de perder la memoria como tu excusa por haberme alejado de mis hijos —Jason responde de una forma muy fría.Ahora lo entiendo, no contemplé la idea de que no soy yo la que desconfía de Jason, es él quien no confía en mí.—Bien, ahora necesito que tú me creas —le pido—, todo lo que te dije es verdad, perdí la memoria, en casa tengo papeles médicos…—¿Por qué debería creerte?No puedo evitar suspirar frustrada, dándome cuenta de que Jason es más terco que yo, y que aun con pruebas probablemente
Después de la sesión de abrazos y palabras cálidas que todos me dieron cuando llegué a la manada, Jason finalmente puede llevarnos a su casa, una enorme mansión de aspecto rustico que quedaba al frente de la plaza central, con mucho lujo en su interior y varias habitaciones disponibles.—¿Entonces podremos tener nuestra habitación? —pregunta Crystal emocionada.—Sí, papá dijo que podrán tenerla, pero primero deben adecuar la casa para todos nosotros, papá no esperaba tantas visitas —respondo de la forma más suave que puedo.—¿Entonces papá no sabía que tenía tres hijos?—No… Es decir, creo que papá se confundió un poco.Fue doloroso darme cuenta de que en esta casa Jason tenía una habitación preparada para su hijo, y no era una habitación cualquiera, era una muy bonita, con muebles caros, muchos juguetes, y mucha dedicación en su orden y organización.Pero esta habitación tenía una sola cama, algo que me hace pensar que Jason probablemente sabía que yo estaba embarazada antes de que m
Las blancas hojas de papel vuelan por los aires al mismo tiempo que mi cuerpo cae sobre el escritorio de madera, sin fijamente en nada más que Jason, atraigo su cuerpo hacia el mío, abrazándolo por el cuello, buscando sus labios para volver a besarlo de forma apasionada.Soy muy torpe con todos los movimientos que hago, pero no puedo evitarlo, todo esto es muy nuevo para mí. Dejo que Jason me lleve hasta el escritorio y me acueste en la fría superficie de madera, mientras él separa mis piernas y se mete entre ellas, sin apartar sus manos de mi pecho descubierto, apenas usando mi sujetador.Las cosas se volvieron muy confusas desde el momento que empezamos a besarnos, él me quitó mi pijama dejándome solo en ropa interior, y ahora me está tocando de esa forma tan excitante, pasando sus manos por mis pechos y mis caderas, su piel se siente como fuego sobre mi cuerpo, no quiero que se detenga.—Lucy… —susurra él sobre mis labios, cuando tenemos que separarnos por la falta de aire.Su voz