EXTRA

ELIZA

Más tarde su sueño fue interrumpido por un trueno. Se apresuró a montar su caballo pero justo en ese momento la lluvia comenzó a caer.

— Ahh, no debo mojarme.

Debido a sus bajas defensas ella tenía prohibido mojarse o estar mucho tiempo fuera de casa pues estaba expuesta a enfermarse. Cabalgó rápido hasta un árbol frondoso y se quedó ahí por media hora esperando a que la lluvia parara.

— No parecía que fuese a llover.

Entonces estornudó dos veces y comenzó a tiritar. A esas alturas ya tenía miedo. Cerca de ella estaba un joven montando a caballo gritando para encontrarla.

Su abuelo estaba demasiado preocupado así que en cuanto vio las nubes de tormenta se apresuró a comenzar la búsqueda. El terreno era demasiado extenso, tanto como para que alguien que no conoce el lugar se pierda.

— Por favor Marcos, manda a tu hijo junto a los demás sirvientes a buscar a mi nieta, que ellos vayan hacia el estanque, tu ve hacia los sembradíos y yo iré hacia la fábrica. Oh, lleven mantas
Sigue leyendo en Buenovela
Escanea el código para descargar la APP
capítulo anteriorcapítulo siguiente

Capítulos relacionados

Último capítulo

Escanea el código para leer en la APP