Actualidad en alguna cueva del bosque de Australia 2023
Es asombroso, después de tantos años sin sentir nada, hoy lo experimento todo a flor de piel. Cada una de mis células palpita con un dolor que me recorre como una corriente eléctrica. Paradojas de la vida, me encuentro al borde de mi existencia, y de manera irónica, siento que estoy más viva que nunca.
Hago el esfuerzo por abrir los ojos, o al menos uno de ellos. Los brutales golpes que recibí me dejaron cegada del ojo derecho, aunque a mi favor me llevé como treinta idiotas. Se que he perdido una oreja, estoy segura que alguno de estos imbéciles se la llevo como trofeo, así como varios de mis dientes, lo cual seguramente descalifica mi candidatura al premio a la sonrisa más hermosa, aquella que ella, tanto solía elogiar. -Suspiro pesadamente- aunque sus elogios eran una farsa, solo una farsa y yo lo creía todo, no sabía que sus palabras eran solo una mentira, aun no puedo creer que todo haya sido una mentira.
Finalmente, logro abrir el ojo que me queda funcional, y me doy cuenta de que me encuentro en una cueva oscura y lúgubre, no soy capaz de escuchar nada. Mis extremidades están encadenadas, y estas cadenas son la única razón por las que sigo de pie o, mejor dicho, colgando. Supongo que me encadenaron para que no pueda huir, aunque es lo que menos quiero en este momento, prefiero morir desmembrada que vivir como una cobarde. Se que en algún momento quede inconsciente, deben estar contentos pensando que evitarán que escape, no se dan cuenta que lo que menos quiero es escapar, solo quiero saber que ella está bien y al fin descansar de todo esto.
Mis fuerzas menguan, y mantener el ojo abierto es un reto. La respiración se convierte en un esfuerzo, y que ironía que en este instante necesite respirar más que nunca.
Las cadenas que me aprisionan son de plata pura y antigua, y siento como las heridas profundas en mis manos arden al contacto con el metal. La plata amenaza con desgarrar mi piel hasta alcanzar el hueso. Nunca tuve la oportunidad de aprender si la plata podía quemar hasta los huesos, jamás me imagine que yo pasaría por esta brutalidad y en mi estado actual, no tengo fuerzas para curar mis heridas. La plata en contacto con mi sangre lo hace imposible.
He bajado la guardia, me descuidé demasiado, pero valió la pena. Todo por lo que pasé al estar a su lado me confirma que merecía la pena. Antes de esta situación, me sentía muerta en vida, pero ahora sé que moriré de verdad, dejare de existir, lo haré con la tranquilidad de haber vivido intensamente junto a ella.
Mi panorama es desolador, verdaderamente oscuro, y la negrura de la cueva me envuelve por completo. El frío me abraza de nuevo, y sé que no podré resistir por mucho más tiempo. Sin embargo, antes de que todo termine, necesito verla una última vez, grabar su hermoso rostro y el color de sus ojos en mi memoria. Solo pido una a dios si es que existe, verla por última vez…
Sigo explorando la cueva hasta que finalmente la encuentro. Se ve hermosa, inalterable por la tragedia que se desarrolla a su alrededor. La observo por última vez, y veo que sus labios se mueven. Aunque estoy segura de que me maldice, no puedo evitar pensar que sigue siendo la mujer más hermosa del universo. Le deseo toda la felicidad del mundo y en silencio, anhelo que algún día comprenda cuánto la amo... Intento verbalizarlo, decirle por última vez "te amo", pero mis fuerzas me abandonan. Ya no me puedo mantener despierta, no se escucha nada, no se siente nada... Solo existe oscuridad, y en este abismo, ya no siento, ya no existo más...
Hace 18 años atrásComo buen día lunes me encontraba absorta en mi trabajo, detrás de la puerta ya llevaba esperando varios minutos Estefan, el cual se decidió a tocar la puerta de mi oficina con un golpe discreto.“Adelante, Estefan” le indiqué con un tono frío, me molesta que me interrumpan cuando trabajo, pero si está aquí es porque algo sucede. Estefan es mi asistente, a simple vista es un joven bastante atractivo, mide 1,80 de altura, es musculoso, de cabello castaño, ojos negros, tez blanca, que aparenta unos 20 años de edad, pero lo que más me gusta es su intelecto y la facilidad que tiene para cumplir mis ordenas, y me refiero a todo tipo de órdenes, pero siempre ha sido un poco indeciso al momento de interrumpirme. Tal vez es porque no soy muy sociable, no lo sé, talvez algún día se lo pregunte.“Bien, dime ¿qué información has conseguido?” le pedí, sin perder mi semblante serio.“Han desaparecido un total de 12 niños, todos ellos de entre 3 y 4 años de edad, todos de famili
"Gracias, Estefan", le agradecí mientras él abandonaba mi oficina. Espero sinceramente que él encuentre la manera de distraer y mantener alejada a Isabela. A menudo resulta insoportable y parece no comprender que no necesito su compañía. No respeta los límites, y en ocasiones, me dan ganas de gritarle o, en mis pensamientos más oscuros, arrancarle la cabeza, la mataría y después la metería a un refrigerador gigante. No puedo permitirme pensar en esas cosas, “debo recordar que no debo causarle daño” me repito a mí misma, aunque Isabela es una excepción a todo razonamiento. Pero tengo muy claro que, si le hiciera daño a Isabela, nunca me lo perdonaría. Además, ella es extremadamente útil, y más que eso, no puedo dañarla porque es la hija de los que fueron los mejores amigos de mis padres. En teoría, deberíamos haber sido las mejores amigas, pero Isabela siempre parece tener intenciones que van más allá de la amistad, lo cual me resulta incómodo.Mientras tanto, el misterio de los niños
Samantha Montier Dalton -año 2020-Llevamos varios días de viaje, y estar en este autobús con los demás se está volviendo incómodo. La mayoría solo anhela entrar en el bosque y desaparecer, sentirse libres. Yo también quiero entrar, correr y sentir el viento en mi cara. Necesito naturaleza, necesito sentirme viva y dejar de escuchar a esto idiotas.Nos han informado que en dos días llegaremos a nuestro destino, un bosque en las afueras de un pueblo bastante grande o una ciudad, no lo sé con claridad."Estoy aburrida, solo se puede dormir y sentir el olor a pedos del resto", comento con un suspiro."Jajaja, siente los míos son más ricos", bromea Clara."Asquerosa, ¡wuacala!" Me río con cara de asco. Clara es mi mejor amiga, aunque más que amigas somos como hermanas. Ella nunca me ha mirado con desprecio debido a mi condición. No es como el resto, a quienes tuve que enseñarles con mucho esfuerzo y entrenamiento que no soy mejor ni peor que ellos, simplemente igual y aun así me tratan c
Estoy emocionada he leído todo lo que venía en la carpeta y por fin podré ir a un lugar que no sea solo el bosque. He interactuado con personas de pueblos antes, pero solo durante una o dos horas. Nos han enseñado a leer, escribir y comportarnos adecuadamente, pero nuestros profesores son del clan, y siempre dentro del grupo. Nos han mostrado las cosas que existen en los pueblos y ciudades, como automóviles, motocicletas, trenes, etc., pero nunca nos han dejado convivir de verdad con los demás. Siempre hemos estado "protegidos" en nuestra burbuja, aislados y solos. Y yo solo quiero saber más, descubrir que más existe, que más hay aparte de este hermoso bosque. Siempre he sentido que me falta algo.“Estoy emocionada por lo que el mundo exterior tiene para ofrecer”. Me permito decir en voz alta, pero en soledad.Finalmente, me encuentro aquí. Me han asignado un pequeño apartamento, o como lo llaman, un "monoambiente". Tengo una cama, ¡una cama para mí solita!, y es tan suave. Esto es si
Cassandra Voss - año 2020 –El tiempo avanza a gran velocidad. Han pasado varios años desde el suceso con los niños, y no se ha repetido ningún incidente similar en esta área. Sé que ha ocurrido de nuevo en otras ciudades, pero los culpables no han sido encontrados. Los expertos en lo sobrenatural centraron sus teorías en nuestra raza, como si nos gustara tener a un maloliente enano como mascota o algo por el estilo. Según su teoría, la sangre de un niño nos hace más fuertes. La verdad, en mi larga vida, tuve una vez la mala idea de probarla, y es asquerosamente horrible. Se compara con la leche agria, ¡puaj!, un asco. No creo que uno de nosotros podría tener tan mal gusto, pero tampoco puedo poner las manos en el fuego por todos. Hemos tenido algunos problemas por ese tema; han atacado algunas empresas de la corporación, y he tenido que asistir a más reuniones y a veces, resolver algunos asuntos personalmente. Ahora resulta que existe una agrupación de cazadores que van de ciud
Sus ojos…Samantha Montier Dalton Me encontraba en medio de una multitud ansiosa por ingresar al nuevo edificio. Como todos, yo también ansiaba conocerlo más de cerca, estaba plagado de gente entrando y saliendo. Yo ya me había dedicado a conocer la ciudad porque quería saber la ubicación de las tiendas, hospitales y colegios, así como cuál era la moda en los colegios y que música sonaba en las calles, solo me faltaba entrar a este centro comercial. Me repetía a mí misma: "Debo actuar como una persona normal. Se normal." Para no golpear a alguien cada vez que me empujaban.Fue un triunfo estar dentro, todas las tiendas tenían descuentos y promociones eso explicaba la euforia entre la muchedumbre, varios individuos salían de las tiendas con bolsas llenas a mas no poder y empujaban con brusquedad para abrirse paso, aunque me sentía tentada a responder con violencia, me debo recordar a sí misma que debo comportarme como una persona común.“sonríe Sam, sonríe” me repetía, aunque parecier
Isabela, sin inmutarse, me lanza un cumplido sarcástico: "Eres igual de encantadora que siempre", y se acerca a mí con una mirada traviesa. Antes de que pueda escapar, me abraza y me agarra una nalga."Odio que hagas eso", le reprocho, pero ella se ríe a carcajadas. "Eres encantadora cuando te enojas. Algún día pedirás que te agarren las dos", bromea antes de desaparecer de mi vista.Estoy furiosa, como siempre. No puedo soportar que Isabela me saque de quicio de esa manera, provocando mi enojo. Odio su manía de sacarme de mis casillas, pero al mismo tiempo, recuerdo que es mi “amiga” y que solo puedo maldecirla y aborrecerla en mi cabeza.Han pasado varias semanas desde el encuentro con Isabela, y por ahora, me ha dejado en paz. Creo que se encuentra fuera del país, ya que no he tenido noticias suyas. Después de terminar mi entrenamiento diario en el gimnasio, reviso el lugar para asegurarme de que todo esté en orden antes de ir a ducharme.Mientras me dirijo a la ducha, mi celular p
Samantha Montier DaltonHoy marca el comienzo de un nuevo capítulo en mi vida: el primer día de clases en el instituto. Sinceramente, me siento emocionada; es la primera vez que asisto a una institución educativa. Como mencioné antes, todo lo que sé hasta ahora lo hemos aprendido en nuestro grupo, y el resto, lo he adquirido a través de los libros que devoro. En cuanto a los demás chicos, no he tenido noticias de ellos, ya que nos han prohibido comunicarnos entre nosotros hasta que nos integremos con el resto. En realidad, no me interesa saber sobre los chicos; solo quiero saber cómo le ha ido a Clara.Llego con cinco minutos de anticipación antes de que suene el timbre y me dirijo a la oficina de información para averiguar cuáles serán mis clases y como llegar a las aulas. A pesar de que ya he explorado este lugar y conozco perfectamente las clases que tendré y la ubicación de las aulas, debo aparentar ser la nueva e inocente. La señorita Mia Levis me entrega mi horario y me indica e