¿Dónde está mi hija?

El hombre que se moría de dolor saludó con la mano a la gente que se cruzaba con él, pero sus rostros enrojecidos le decían que algo iba mal. ¿Estaba bien? Seguramente Cesare Santorini estaba enfadado. ¿Y dónde se había escondido su mujer después de aquello? ¿Por qué tuvo que hacerlo? ¿Por qué el impulso de intentar besarla? Había tantas preguntas sin respuesta que casi lo volvían loco. Por fin se recuperó y enderezó la postura, sintiendo aún parte del agudo dolor que le irradiaba hasta el estómago, causándole un terrible malestar. Y no tuvo más que posar sus ojos en ella de forma muy superficial para encontrarla bailando con su viejo padre en medio de aquella fiesta.

Se acercó un poco más a ella y analizó su aspecto.

Cualquier mujer bailando con su padre se sentiría feliz o acogedora. Pero acogedora era la última expresión que Madson Reese transmitía cuando estaba cerca de su padre. De hecho, tenía una expresión de dolor imposible de disimular. Y por la forma en que le sujetaba las
Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo