MIS OPCIONES

Solo pocos días después de haber sido arrastrada devuelta a la mansión, con una seguridad a tope y un nulo contacto humano, empecé a presentar raros síntomas. La comida que Jonathan llevaba a mi habitación me producía asco de solo verla y la indigestión que había inventado cuando escapé, ahora se sentía real.

—¿Hoy tampoco piensas comer? —su tono era irritable.

Con el plato intacto, me levanté de la pequeña mesa y volví a la cama. Me cubrí con las sábanas hasta la cabeza, deseando que se marchará de una buena vez. Al poco rato él también se puso de pie y lo oí chasquear los dedos a su empleada para que recogiera todo. Nuestra relación estaba en un peligroso punto de quiebre, pero aun así él seguía forzándome a cenas y buscándome cada noche.

Me trataba como su mujer y eso me confundía. Era duro al hablarme y no me perdonaba haber huido, pero seguía tomándome con el mismo deseo de siempre.

—¿Sigues deprimida por no saber nada de tu amante? —pude palpar los celos en su voz.

Aún me c
Continue lendo no Buenovela
Digitalize o código para baixar o App

Capítulos relacionados

Último capítulo

Digitalize o código para ler no App