CAPÍTULO XXXVII

Las Fuerzas Especiales administraba la estación de tren trans-arca que toda ciudad poseía. Este medio de transporte servía para enviar y recibir valijas diplomáticas, insumos y materias primas intercambiados con otras arcas y escoltaban en sus viajes diplomáticos a representantes políticos, incluidos los parlamentarios. Era un tren de seguridad que conectaba a todas las ciudades, bajo la entera protección de La Fuerza.

Existían trenes de uso civil y privado, pero todo asunto que estuviera relacionado con la seguridad y abastecimiento de Tevah Sheva, o de cualquier otra ciudad, era monitorizado y dirigido en su estación oficial dentro de la base, controlado por androides de servicio.

Esa mañana, un vagón del parlamento salió rumbo a Shesh a las novecientas horas con una escala de una hora en Jamesh para recoger al Parlamentario Vampiro de la ciudad Ruppert Rocca.

La orden recibida

Sigue leyendo en Buenovela
Escanea el código para descargar la APP

Capítulos relacionados

Último capítulo

Escanea el código para leer en la APP