Luego de salir de aquel juicio violeta e Isabella se dieron un beso y bruno y Tom se saludaron las cámaras no perdieron tiempo y fue muy abrumador para los cuatros quedaron para un café próximamente.Al llegar a casa bruno e Isabella necesitaban unas vacaciones lejos de Edimburgo así que bruno le propuso irse a Las Vegas un tiempo Isabella acepto pero antes quería saber en qué lago estaban los restos de su madre y bruno tenía algo pendiente con Pablo.A ambos le ofrecieron una gran cantidad de dinero por dar una entrevista exclusiva y accedieron, por primera vez Isabella mostraría a su hija en público.La que una vez fue una mini cafetería bruno le hizo su sueños realidad sin que ella supiera e hizo de aquel lugar una gran cafetería pero aún no quería que ella lo supiera y aunque ella le pedía que la llevara él siempre la evadía.Dos días antes de irse a las Vegas Pablo y bruno viajaron a Irlanda donde estaba preso henry ya que ahí debía ser su juicio y lo habían sentenciado a cadena
Luego de un mes en Las Vegas bruno e Isabella volvieron a Edimburgo a retomar sus vidas de trabajo y querían una nueva casa ya que la pequeña Lucero aprendió a gatear.Los meses pasaron rápidos compraron una casa enorme la mansión que fue una vez la mansión de los Giordano fue subastada con todo lo que había en ella, bruno no quería nada de esa casa. Tenía una sorpresa para Isabella así que le dijo que se vistiera muy elegante y que también cambiara a lucero que irían a cenar, le vendo los ojos y al bajar del coche había una alfombra roja la prensa estaba presente pero ella no entendía nada las fotos fueron cegadoras pero ya era costumbre. Ella aún no entendía que pasaba pregunto por su hija y él respondió que Gladis la tenía en sus brazos —amorcito porque esta prensa aquí?——solo camina sin miedo te prometo que te encantará- le susurro El se detuvo y ella también con lentitud le bajó aquel pañuelo y sus ojos se agradaron al ver su cafetería hubo una gran algarabía y tapó su boca
1.—¡mierda! Vienen detrás de mi ¿por que me están siguiendo?—Acelero el coche para tratar de perderlos y escaparme pero ellos logran darse cuenta y aceleran un poco más.—papá ¿por qué me haces las cosas tan difíciles? Nunca entenderás que no soy un peón manipulable a tu antojo—Tenso la mandíbula y aceleró el coche molesto. Aprieto el volante hasta escuchar como mis nudillos crujen y tomo un atajo logrando evadirlos y perderlos para ganar algo de tiempo y esconderme en algún lugar hasta que me pierdan de vista.Siento como todo mi cuerpo está tenso estoy estresado, no tenía idea que al bajarme del avión y llegar a casa tendría que volverme Dominic Toretto el de la saga Fast and furious.No recuerdo con exactitud las calles del viejo Edimburgo, detengo el vehículo en una calle sin salida salgo de el y camino con algo de prisa por otra calle, llevo ropa deportiva lo que hace mas difícil mi huida porque hace mucho frío y la ropa no me ayudaba en lo absoluto, froté mis manos y sople un p
—¿que fue eso?—Me pregunté a misma con los nervios de punta.—¿quien era ese hombre? era muy guapo pero...por esa misma razón Isabella, mantente cuerda ese tipo de hombre no lo volverás a ver en tu vida así que relájate, alguien así jamás se fijaría en una mujer como tú—Mire mis ropas nada hermosas ni encantadoras y levante mis hombros, eso no bajaría mi autoestima bastante me costó volver a sentirme bien conmigo misma.Cuando escuche el sonido de la campanita avisándome que él se había marchado suspiré y mire hacia afuera viéndolo caminar de prisa con con sus manos dentro de los bolsillos de sus pantalones y puso la capucha en su cabeza mirando hacia los lados.no seguí pensando más en lo ocurrido de esta noche pero el perfume de este hombre estaba impregnado en mis ropas, varonil, fuerte, pero a la vez tan suave. Terminé mis quehaceres sacudí mis manos y quité el delantal colocándolo en su lugar y caminando hacia la puerta en busca de mi abrigo que estaba al lado y como la noche
Me despierto antes de que la alarma suene todos los días pero esta vez no fue así al escucharla solo sentí como mi cabeza dolió y traté de apagarla bufando con todo el cabello sobre mi rostro, intenté dormir un poco más pero recordé que soy pobre y necesito trabajar para costearme mis necesidades o mejor dicho parte de ella.—¡rayos!—Voy al baño me ducho rápido y lavo mis dientes, voy a la cocina preparo mi chocolate como siempre, tomo un vaso de agua mientras el chocolate deja fluir su agradable aroma, el sol empezaba a salir lo que daba un rojizo hermoso al cielo mientras el suave viento acariciaba las ventanas y los pajaritos hacían lindos sonidos, me gustaba ver desde la ventana de mi cocina las personas que corrían, otras caminaban junto a sus mascotas o andaban en bici.Escocía es un lindo lugar con personas sumamente agradables aunque no siempre lo son he tenido eventualidades debido a mi color bronceado a muchos les gusta o me miran como un bicho extraño a decir verdad ya me
Voy mirando atentamente el lugar para no extraviarme. A noche había llegado sin darme cuenta pero ya no era de noche podía ver claramente, al llegar la vi sentada en el suelo cabizbaja llorando mientras sus muebles eran cargados a un camión, varios hombres se encontraban allí, ella sostenía en sus manos un papel y en la puerta había colgado un letrero de embargo, me detuve lo más rápido posible y baje del vehículo pude sentir las miradas sobre mi pero no me importó fui directo a ella y toque su mentón levantando su cabeza viendo como sus ojos trataban de enfocarme ya que no podían por la luz cegadora del sol y las lágrimas en ellos pero al hacerlo se asombraron —¿que ha sucedido?—Le pregunté suavemente para evitar que se alarme aunque mi ceño estaba fruncido. Trato de limpiar sus mejillas mojadas y quitó mi mano de su mentón e intento de levantarse pero aún así traté de ayudarla a ponerse de pies, sin poder mirarme directamente a los ojos y abrazando su brazo izquierdo me habló —¿p
—no se preocupe por eso tengo suficiente dinero como para comprar este banco, 15 mil euros no afecta en nada mi chequera ahora si me lo permite me marcharé pase feliz resto del día—Había dejado a Isabella sentada en espera mientras estaba en la oficina terminando de firmar, había visto su nombre en los papeles pero me haría el desentendido hasta que ella me lo diga más tarde, arregle mi saco y tome el papel que me fue cedido como pago de la deuda me dispuse a marcharme pero la voz de la gerente rechinó en mis oídos, dio la vuelta mientras sus zapatos hacían eco por cada pisada, tenía la mano en la manija de la puerta esperando el momento preciso para salir de este lugar.—señor bruno... me gustaría saber si tiene planes esta noche...—Su cara inofensiva y su rubor en las mejillas me hicieron sacar una mini sonrisa para negarle aquella propuesta que se que me haría.—estoy comprometido—Le dije y cerré la puerta detrás mío sin ver su cara o su reacción, caminé con prisa haciendo que e
—¿que se te ofrece Tom?—dio pasos hasta acercarse a la madre de bruno y le dio dos besos en la mejilla —me he encontrado con bruno iba de muy mal humor ¿le han dicho a que vino exactamente?——mi hijo es algo difícil de tratar pero se perfectamente cómo hacer que me obedezca——no estoy tan seguro por lo poco que charlamos...-—jajajaj, no me digas que lograste que mi hijo te dirija la palabra——no es gracioso y si, obviamente me insultó pero era algo que veía venir——mi hijo es como su padre aunque pase el tiempo no pueden botar el rencor——estoy totalmente seguro de que es así——violeta maxwell está preparando sus artimañas para conquistarlo nuevamente y por favor Tom no vuelvas a entrometerte en la relación de bruno y violeta si no, no vivirás para contarlo de eso me encargaré ¿entendido?——puede estar segura que desde aquella vez jamás hemos vuelto a...——no mientas Tom se que te revuelcas con violeta——jajajajaja y si sabe que es cierto ¿por qué quiere que bruno se case con ella?