Capitulo 2

Elisa

Antier conoci a los de la constructora quienes luego de presentarse se fueron al parecer ya tenían rato allí.

Los hermanos Hetcher... unos hombres muy apuestos en especial el más joven tenía una voz muy atractiva, era grave, su mirada parecía penetrar el alma y cuando se acercó a saludar despedía un delicioso aroma a roble era como caer en un hechizo.

Habían sido días raros; me sentía terrible por el hecho de sumirme en el dolor de no gustarle a Niko y claro que no pude evitar ya en lo noche derramar una que otra lagrima por él... muchas en realidad... había intentado gran parte del día que no se notará la tristeza que me embargaba y la noticia de mi habitación nueva había ayudado inmensamente pues mi mente se ocupó diseñando una habitación imaginaria, a lo igual que el hecho de que jamás estaría con Niko y que probablemente lo vería junto a Mel.

Después de un día largo y cansado de escuela y materia tras materia que pase de manera robótica me dirijo en el autobús a casa con mel a un lado, consiguio permiso para quedarse en mi casa, la mayoría de las veces yo me quedo en la suya porqué bueno ella no tiene una hermana molesta en su cuarto, pero esta es la excepción, iremos al parque al cine y todo lo que se atraviese claro sin dormirnos tan tarde porque mañana aún ay clases, que desgracia.

-vamos más adelante aquí me estoy mareando y tú vas toda dormidota- me jalonea, ya casi me quedaba dormida, cuando nos subimos al autobús estaba casi llenó, ahora ya se había desocupado más, pero era más cómodo dormir en los asientos de atrás, nadie te mira si abres la boca al dormir...--elisaaa vamos---

- 5 minutos Mel- volví acurrucarme en el asiento

-¡Elisa!- solo me decía Elisa cuando estaba enojada

-Esta bien vamos al de enfrente- en el transcurso casi caemos con el movimiento y unas carcajadas sonaron, justo de eso hablaba.

Cuando llegamos a casa y entramos a la habitación mi hermana tenía todas sus cosas regadas como de costumbre y no me mal entiendan quiero mucho a mi hermana pero la diferencia de nuestras edades hacen difícil la convivencia, en especial de mi parte no lo voy a negar, a veces me convencía de jugar con ella, era la única manera de quitarla de encima.

-recoge tus cosas de mi lado por favor solo eso te pido-

- no, mamá dijo que ahora está sería mi habitación- saco la lengua

-pero aún no, aún no está construido Yeni-

- ¡El cuarto que están construyendo es para ti Eli! No me habías dicho ¡qué clase de amiga eres!- interrumpió Melissa mientras ponía una mueca graciosa de indignación

-Vamos mel me dijeron antier cuando llegue del colegio y ayer no fuiste a clases, me abandonaste, ¿cómo te atreves a ofenderte?- ruedo mis ojos había pasado un día muy aburrido solo porqué ella se quedó dormida, tenía más amigas pero eran relaciones un poco más secas.

- oh Eli la cama me abrazaba tan delicioso- se abrazó y se aviento a mi cama siempre tan dramática está chica

-¡Elisa! ¡ven a la sala!- se escuchó la voz de mamá a todo pulmón

-Vamos mel de pasada comemos y nos vamos al parqué-

- me voy a cambiar Eli ya te alcanzó- a si lo había olvidado el uniforme, era en realidad cómodo una falda de tablones guinda y playera blanca con moño, aunque nadie lo usaba

Entre en la sala, mi madre estaba de frente en el sillón individual y en el otro de dos personas estaba ese chico, Carlos quien había transformado la pequeña mesa de centro en una mini oficina llena de hojas perfectamente ordenadas.

Me puse algo nerviosa al verlo allí, se miraba tan perfecto con su camisa negra arremangada que creo quedé embobada por unos segundos.

- buenas tardes- me dirijo a Carlos después de un momento quien me devuelve el saludo a secas sin mirarme siquiera- ¿mamá?

-Elisa, Carlos va a diseñar tu cuarto y quiere ver si estás de acuerdo con todo lo que se va a hacer - asiento y me acomodó al lado de Carlos alejada lo más que podía de él, note que se incomodaba un poco así que mantengo mi distancia, seguro es de esos tipos frívolos y raros que odian el contacto con la gente.

-Voy a terminar la comida Eli para ti y Meli seguro viene con hambre - no puedo evitar sonreir, mel se ha ganado el cariño de mi familia a mi mamá le encantaba, decía que estaba destinada a ser su amiga porque llevaba mi nombre en el de ella, pero bueno, mel siempre ataca nuestra comida como buena adoptada que es.

Mi madre se va y me deja sola con Carlos es un poco incómodo la verdad, tanto por su actitud como por la atracción que me provoca, solo espero que mel baje pronto.

- Señorita Meller, estos son los diseños que tengo tomando en cuenta su edad y los gustos de la mayoría de las chicas- me extiende unas 3 hojas las miro no puedo evitar poner una mueca es decir eran bonitas como de película, pero horribles para mí gusto todos los diseños en color rosa, morado, negro de todos los tonos y hasta en negro con cuadros de música que bueno esos eran bonitos y otros pues no tanto era algo exagerado y extravagante uno me agradaba un poco más tenía unas ramas de árbol dibujadas que se extendían por la pared pero en definitiva no me imaginaba durmiendo allí

-¿Que pasa? ¿no le han gustado?- dice extrañado y con frialdad, como si al intimidarte te obligara a decir que eran maravilloso

-Bueno yo no, están muy bonitos, pero no es mi estiló la verdad...- me animé a decir

- así que tiene una mejor idea- resopló soltando una risa burlona y eso enciende mi coraje ¿Quién se cree?

- pues si - hablo retante

- Entonces dígame, al cliente lo que pida; aun y sean ideas horribles- dice susurrando lo ultimo y se voltea a su laptop no sé si realmente me pondrá atención este engreído

-no me gusta el rosa y negro en las paredes, por lo menos no ese tono de rosa, me gustaría algo más claro, colores pastel quizás un verde o celeste con algunos adornos de platas- tomo un lapiz y empiezo a dibujar en las hojas con los diseños, sin preocupacion alguna pues el era un engreido - muebles en blanco o un azul oscuro sería perfecto, me gustaría un balcón y claro un ventanal enorme ya sabe algo con mucha luz y entre más espacioso se pueda mejor, no hablo de grande sino del diseño- culminó emocionada había estado soñando con mi cuarto, así que claro que tenía una idea de lo que quería, quería que me reflejará a mí, por su rostro sé que no le agrado que yo le diera ideas del diseño que quería.

- algo mas - hablo seco

- eh no, confío en su trabajo- aunque no me gustaban los colores de la pared y el diseño de adolescente que tenían sin duda eran habitaciones hermosas, no dudaba que tenía talento para esto, pero no me gustaba que me tomara como una niña y me faltara al respeto.

- haré un nuevo diseño y se lo muestro después si está de acuerdo- respiré tranquila ya no me sentía tan incómoda pues escuché los pasos de Melissa, no por mi gran oído sino porque se venía tropezando y quejando por las escaleras.

- me parece – sonreí – le agradezco mucho, es importante para mí- le mire directo, sus ojos eran hipnotizantes aunque carecieran de vida.

-buenas tardes...muuuy buenas tardes- saluda Melissa con picardía viendo a Carlos, pero este ni volteo, no era ni una pizca de amable, cretino, pensé, se escuchó la voz de mamá llamándonos a comer

-con permiso Carlos siente como en casa-

- No es necesario, guardo esto y me retiro - tomo de mala gana las hojas y apilo en un folder, que tipo, lo que tenía de guapo lo tenía de mal educado.

Llegamos a la cocina y Melissa me atacó, debí verlo venir.

-Eli ¿por qué tienes a un tipo tan guapo en tu casa? ¿Quién es él? ¿Cómo se llama? ¿Tiene novia? ¿Esta guapísimo? Pero que le pasa ni siquiera me saludo ¿viste?

-¡Para para! - tenía la sensación de que aún nos escuchaba, aún que estábamos alejadas - primero es el chico de la construcción, está diseñando mi habitación, se llama Carlos no le voy a preguntar si tiene novia y si, es una altanero, mal educado, arrogante.

-Vamos Eli no me vaz a negar que el tipo es guapo- la conocía no hiba a parar, solo rodé los ojos

- que lastima que es el de la construcción, con lo guapo que es- suspiro

- de que hablas, eso que tiene de importante, ademas un buen diseñador y no que tantas cosas mas habra dicho-

- hay Eli-

Por la noche cuando regresamos del parque a la casa note a Melisa un tanto nerviosa

- Que es lo que pasa? Te conozco algo ocurre ¿no? –

- Bueno yo, es que ayer - tomo una bocanada de aire - ayer que me quedé dormida me fui a la escuela esperando que me dejaran entrar, pero pues eso no paso claro y cuando estaba afuera estaba Niko también y bueno...- de nuevo se formó un hueco en mi corazón ya me imaginaba lo que diría

- me invitó a desayunar y acepte pase el día con él, me confesó que le gustaba y que quería estar conmigo yo no sabía si decirlo menos porqué apenas me habías dicho y es muy pronto yo no quiero herir tus sentimientos eres mi mejor amiga-

- me imagino que aceptaste ¿verdad?- digo pero con miedo de escuchar la respuesta

- ¡No! Eli él te gusta a ti yo no haría eso!!-

- Melisa yo te lo dije por mí no te detengas se feliz! – intenté sonar animada

- pero te duele puedo verlo-

- pues si es normal, pero eso no quiere decir que no quiera que estés con él tú le quieres acepta salir con él, tú también eres mi mejor amiga y me encanta verte feliz

- gracias Eli de verdad me gusta. - Nos damos un abrazo y aunque me es doloroso deseo que pueda ser feliz con él.

Llegamos a casa directo a darnos un baño y a dormir había sido un día cansado mel se quedó en mi cama estábamos bastante apretadas en una cama individual sin contar que cada hora tenía que bajar el pie del mel y quitar su mano de mi cara, pero no había funcionado el colchón de aire al parecer tenía un hoyo así que no hubo opción.

A media noche sentí que Melisa se levantaba de la cama y hablaba con Niko levanté la cabeza con el temor de que fuera sonámbula miré que hablaba por teléfono y decía algo así como "tu también me gustas" en un susurro era lindo que fuera feliz... Esperaba yo también serlo algún día...

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