POV: TARA. [Parte I]
El tiempo relativamente ha pasado volando y ahora ya no era más una niña de siete años, sino un adolescente soñadora en pleno auge, también podría decirse que durante ese tiempo me abrí paso a muchos castigos que me dejaron con una mala reputación entre el círculo de amigos de mi familia .Y, si.Papá cumplió su promesa de enviarme a un internado para chicas rebeldes, en dónde no me fue mucho mejor, pero igual que siempre pude superarlo.Bueno, casi pude...— ¡Hey! ¡Chica rara! Es tu turno... — Apenas giré la vista, lo primero que impacto mi rostro fue una pelota de fútbol. No pude esquivarla así que fue directo hacia mi nariz haciendo que cayera de espalda.— ¡Oh por Dios! Le dí, le dí.... ¡Miren como cayó!.— Se oyeron un montón de risas en la distancia.— ¿De dónde sacaste esos calzones de abuelita?, ¿te los tejió tu mamá? — Camila me rodeó junto con otras chicas.— Hola Camila, sigues tan graciosa como siempre.Debo informarte que prefiero llevar puesto estos calzones femeninos, que comprar calzones extra grandes en las tiendas para hombres. — Respondí a su pregunta con sarcasmo.Camila era la capitana del equipo de fútbol femenino. Era una chica atlética, alta y con facciones varoniles, también su comportamiento era muy abusivo, tosco y rústico.— ¿A que te refieres con eso, bichito raro? — Indagó confundida.— No lo sé, pensé que ibas allí a comprar ropa para ocultar tus piernas peludas de macho. — Sus mejillas se ruborizaron por unos cuantos segundos.— Estás.... Muerta... Tamara Ford. — Siseó apretando los dientes dispuesta a irse sobre mí, pero antes de que hiciera algo tomé un puñado de arena del suelo y lo lancé a sus ojos...— ¡Ay m*****a infeliz! — Gritó y esa acción me dió tiempo para salir huyendo de ellas.Justo cuándo pensé la había librado una de sus amiguitas logró alcanzarme y me tiró de nuevo al suelo.— ¡La tengo, chicas!Me tomo del cabello colocándome de rodillas ante camila y por más que traté de soltarme no pude.— ¡No! ¡Ya suéltame, salvaje! — Esto te enseñará a cerrar la bocota.— Ellas iban a golpearme de nuevo, entonces decidí cerrar mis ojos esperando la paliza que nunca llegó...Pues, una figura enorme me hizo sombra y detuvo el brazo de la chica, acaparando la mirada de todas las demás.— No te atrevas a tocarla de nuevo o de lo contrario olvidaré que eres una... chica. — La voz grave que salió de aquel monumento les dió terror a todas.Resultó que mi amigo Bastian se ha plantado frente a Camila como un perro guardian para defenderme.Su mirada indicaba peligro, no está jugando para nada y las chicas lo saben, por eso retroceden poco a poco hasta que se alejan de nosotros, Camila trata de zafar su brazo pero Bastián se lo impide durante unos segundos.No le dice nada, solo la mantiene atrapada allí para infundirle pánico.Cuándo por fin logra librarse suelta un leve quejido, me mira asustada y decide correr en dirección opuesta.Bastián se acerca hacía mí para levantarme del suelo con una extrema suavidad y durante unos segundos lo detalle por completo, tenía meses sin verlo, su espalda y brazos eran unos cuantos centímetros más anchos de lo que recordaba.— ¿Que sucede, por qué no me dices nada Tara?— ¿Que podría decirte, Bastián? — Le reclamé con voz enojada.La verdad es que me sentía contenta de que estuviera aquí, pero también estaba furiosa por no ser capaz de defenderme yo misma...Si él no hubiese interferido esas chicas me habrían hecho añicos.— Un "Hola Bastián" "Gracias por salvarme de esta" eso estaría bien, ¿No lo crees?. — Dice sonriendo y sus ojos se rasgan un poco haciéndolo ver completamente irresistible.— No necesito que me cuides...Y para que lo sepas yo tenía todo bajo control. — Me di la vuelta para ocultar mi vergüenza y comencé a caminar en dirección contraria, pero al cabo de un instante ya lo tenía detrás de mí.— Oh... Claro, me di cuenta que tenías todo "bajo control". — Sus manos me rodean en un tierno abrazo, disparando un centenar de emociones en mi interior, el es tan grande y yo tan pequeña...También se que piensa que estoy furiosa pero la verdad es que no ahora no lo estoy del todo.— Entiendo porque te enojas Tara, pero no podía quedarme de brazos cruzados y dejar que esas chicas te lastimaran. — Dice con suavidad, su voz tranquilizadora tan parecida a una caricia me calma. — Jamás dejaría que alguien te hiciera daño.— No todo el tiempo estarás conmigo Bastian, debo aprender a defenderme por mi misma. — Me solté de sus brazos con pesadez y lo miré de reojo.Bastián se estaba convirtiendo en un hombre guapísimo, recuerdo la primera vez que atravesé las puertas de su habitación y me encontré con su pecho de frente.«Aquella piel palida de terciopelo impregnada de pecas y esos..., abdominales perfectamente tallados.»— No me molestaría estar siempre contigo. — Sonríe descaradamente y sé que es una insinuacion.Ambos sabemos que lo que está pasando entre nosotros, es imposible, pues mi familia jamás lo permitiría.Nuestra atracción es como un fruto prohibido por el cuál tarde o temprano tendríamos que pagar un precio muy alto. Pero no podía evitarlo, mi deseo era feroz, al igual que la curiosidad. Creo que es culpa de mis hormonas.— ¿Entonces, Bastián? Me dirás por qué has venido. — Le pregunté sin perder vista de su rostro para estudiar su reacción, sorprendentemente los nervios se apoderaron de él y comenzó a balbucear.— Eh... Bueno...— Disculpe, señorita Ford. — La voz de Demian Hudson, el padre de Bastián nos interrumpió.— El avión privado de su padre ya está esperando por usted. — Inclina la cabeza con respeto hacía mí en modo de saludo, pero en cuanto la levanta una alegría tan grande como la mía ilumina su rostro.Es una versión madura de Bastián, con el cabello en un tono gris y unas cuántas arrugas que surcan su rostro, pero sus ojos.¡Por Dios! Son tan perspicaces como los de Bastian.Siento ganas de abrazarle como cuando era más chica y me dejaba dulces a escondidas de mis padres...¡Que diablos! Adoro a este hombre y le he echado muchísimo de menos. Me lancé hacía él para abrazarlo finalmente, aspiré su aroma a loción y a tabaco de su uniforme antes de separarme. Su aura paternal me envuelve y se siente tan reconfortante, algo que nunca me ha sucedido con mi padre.— ¡No sabes cuánto te extrañé, Demián!.— Para nosotros también es un placer verla de nuevo, señorita Ford. ¿No es así, hijo? — Le da una mirada a Bastián con cierta complicidad y este se sonroja.— Si...Si que lo es papá. — Mi vista se va de regreso a Bastian, ambos tenemos la guardia baja, deseo tocarle pero más que eso deseo que él también me toque.— Le diré al piloto que usted se retrasará unos minutos. — Dice Demian, tajante y eficiente, rompiendo nuestro hechizo.— Por favor no tarden demasiado. — Nos advierte mientras se da vuelta para marcharse.— Perdón por mi padre, él no...— Cielos, te ves tan tierno cuándo te disculpas. — Lo interrumpí y se quedó en silencio mientras me seguía al dormitorio para buscar mis cosas.Aúnque desde aquí escucho el palpitar de su corazón que va tan rápido como el mío.«Me fascina»— Oye, me enteré de lo que sucedió con Cecilia. — Dije para cambiar un poco nuestra conversación.Cecilia es la hermana de Bastian y a su corta edad había huido de su casa aparentemente con un chico mayor que ella. La verdad, nunca pensé que fuera capaz de cometer un acto tan torpe e irresponsable como ese.— Si, lo último que supimos hace unas semanas es que está embarazada. — Bastián inspiró profundo y sentí pena por él y también por sus padres.— ¡wow! Vaya... Eso es inesperado. — Le digo para reconfortarlo.Pero en el fondo sospechaba que la verdadera razón de que Cecilia huyera es porque escondía un turbio secreto.— No te preocupes, papá y yo estamos haciendo todo lo posible para encontrarla. — Asentí mientras abría la puerta de mí habitación.El se detuvo en el umbral hasta que le hice seña para que se acercara, pero aún así solo dió un par de pasos hasta llegar a una comoda dónde finalmente recostó su brazo.Me intrigaba su presencia, si mi padre había enviado a Demian por mí, solo significaba una cosa ; El muy malvado está tramando algo, no creo que tenga prisa de verme porque me extraña.Guardé mis cosas en la valija lo más rápido que pude, de pronto, sin embargo escuché un quejido de Bastian.— ¡Auch! ¿Que es eso? —Lo miré de inmediato, entonces, veo cómo sacude rápidamente su mano. — ¡Algo me mordió Tara!.¡No te acerques! — Me gritó desde su lado. — Woh, woh, woh ¿¿Que es demonios es eso?? ¡Apártate! Ten cuidado. — Exclamó con miedo levantando un zapato para lastimar a mi pobre serpiente.— Hey... Tranquilo...Ella no es venenosa, no puede lastimarte.Además es mi mascota y mi amiga. — Tomé a la serpiente que se encontraba a un lado, luego la acaricié suavemente sus escamas vibraron correspondiendo a mi saludo.«Realmente era tan cautivadora»Me gustaba lo suave y sigilosa que es, para mí es la compañera ideal para alguien como yo.Con suavidad la regresé a su terrario y finalmente tomé la mano de Bastian para inspeccionar la herida.— Tara... — Susurró con voz temblorosa.— Cálmate. — Lo silencie. — Todo estara bien.Llevé su dedo hasta mi boca para succionar ligeramente su sangre.El gimió mi nombre con necesidad y fue magnífico.Siempre he pensado que mi nombre es simple y aburrido pero oírlo salir de sus labios es un festín de sensualidad... Casi como una caricia que me envuelve y provoca mis sentidos.Él se inclina hacía mí para acariciar mis labios con su otra mano.— Eso fue muy sexy. — Dijo.«Estoy perdida» fue todo lo que pensé.Por un momento me dejo llevar por la fantasía y por mis hormonas, de que esto pueda ser real, cierro los ojos cuándo su boca acaricia la mía.Es un beso suave, delicado pero necesito más...El es adictivo y peligroso, se que esto nos puede traer consecuencias pero no me importa, así que me armó de valor para tomar lo que deseo o mejor dicho: "para devorarle".Enrede mis dedos por su cabello, quiero saborearlo no me importa que este mal o que sea vergonzoso para mí, ahora mismo deseo probarlo todo.— Bastian...! —Un gemido escapa de mí boca, siento los pechos endurecidos, los pezones erectos y la presión en el medio de mis piernas amenaza con hacerme estallar.Admito que he fantaseado con este momento y aunque siempre luché por suprimirlo, hoy deseo rendirme a este placer.Sus manos se cuelan por debajo de mi camisa hasta llegar a mis senos, todo lo hace con lentitud, como si estuviera esperando que lo apartase pero en cambio, lo dejo continuar, también noté su erección contra mí abdomen lo que hizo que se me escapara otro placentero suspiro.— "Detesto no ser suficiente bueno para ti" — Alcance a oír. — No puedo soportar el hecho de que vayas a casarte...— ¿Que acabas de decir? — Me separé de él y le grité furiosa.Me siento estafada, lo que era perfecto hace unos segundos se fue al diablo.— ¿Así que eso es lo que está planeando mi padre verdad.? Quiere ofrecerme a los buitres para cerrar un trato, cómo si fuera un objeto. — Veo la disculpa en sus ojos, incluso antes que la verbalice.— Mi padre me lo dijo de camino, mañana habrá una gala en tu nombre dónde posiblemente se hagan alianzas y tal vez tú futuro marido sea una de ellas. — Dice con la paciencia que lo caracteriza— ¡Pues eso ya lo veremos!¡Malditasea! — La frustración se apodera de mi.— ¿Entonces por eso viniste? ¿Querías una jodida despedida? — Se pone tenso pero no se mueve de su lugar.— Vine porque te echo de menos Tara. — Inmediatamente se me encoge el corazón por su sinceridad.Una nueva punzada de ira me atraviesa pero no es contra él sino que va dirigida contra aquello que nos separa.— Yo también te eché de menos... — Dije sin apartar la mirada, mientras regresaba de nuevo a sus brazos."Bastián era mí mejor amigo y quizás el amor de mí vida, pero no dejo de pensar que este amor tiene fecha de caducidad".POV: TARA. [Parte II]* * * * * * * * — Por Dios, te ves... Tan... preciosa, hija. — Exclamó mi madre confundida, después de verme con aquel vestido horrendo que decidí ponerme. — Si tenemos suerte celebraremos tu compromiso esta noche y también el de tu primo Dioniso. — Rodé mis ojos hasta ponerlos en blanco. — No me veas así, sabes que tu padre quiere lo mejor para ti y se asegurará de conseguirte a un caballero.— Mamá.... si entiendes que no soy un objeto ¿Verdad? Hago esto porque no tengo otra elección, en realidad no hay nada que celebrar hoy.— Tamara hija. — ¡No digas nada mamá! ¡Estoy harta de todos ustedes! ¡No quiero ser una mujer con sueños frustrados igual que tú, mamá! — Me quejé y ella aparto la mirada del espejo. Se que he sido cruel y estoy actuando de manera egoísta pues, mi mamá no tenia la culpa.En nuestra familia se ha repetido el mismo patrón desde siempre y cómo diría mi padre: "El matrimonio es solo un intercambio donde ambas partes se benefician, aquí
POV : BASTIANAun soy capaz de recordar con absoluta precisión, esa claridad que eriza el vello de mis brazos por el comienzo de nuestra historia.O por lo menos, como empezó todo para mí y cómo fué que llegué a convertirme en el guardian pque mí reina necesitaba. Tamara Ford, era todo lo que una señorita nunca debía ser: Era enojona, hablaba a gritos, no tenía miedo de dar su opinión, nunca peinaba su cabello y usaba vestidos extremadamente holgados. Algo que era sumamente chistoso, porque a pesar de que su madre intentaba disimular su salvajismo con vestidos caros, siempre acababan terriblemente sucios, pues su entretenimiento consistía en la práctica de juegos violentos y poco adecuados para una niña.En cambio, yo por mí parte, siempre había sido un chico correcto, muy bien portado y uno que jamás dudaba en obedecerla. La razón fue porque quede hipnotizado por el bonito rostro y la sonrisa tierna de aquél bello ángel. Mientras que otros padres se alegrarían por la felicidad de
POV : ACE. Si tuviera una lista negra de las cosas que me desagradan en la vida, mí futuro matrimonio estaría de primero en esa lista, pero eso era algo que jamás iba a suceder. Me había fijado una meta, un reto en mí vida y era conseguir la unificación con el imperio Ford. Y no iba abandonarlo estando tan cerca de conseguirlo. El único inconveniente que tenía hasta ahora era mí futura esposa, por más que había intentado conocerla siempre encontraba la manera de escabullirse de mí. — ¡Damas y caballeros! — Dijo por el micrófono el decano de la facultad de ciencias políticas. — Recibamos al homenajeado de la noche: ¡Ace Beringhelis! Hubo un fuerte aplauso cuando salí al escenario y acepte el premio, que llevaba grabado una placa por delante. «Estudiante del Año» — ¿Te quedas para la cena de triunfo? — Preguntó el decano con voz entusiasta, simulé mirar mí reloj como si tuviera prisa. — Me temo que tengo un agenda difícil señor. — Bueno, ya quedará para después. Decidí marchar
ADVERTENCIA: +21El siguiente capítulo contiene lenguaje explícito, escenas de sexo y contenido que puede herir la sensibilidad de algunas personas, léelo bajo tu propia responsabilidad.***POV : TARA. [PARTE I]— Estás loca, lo sabes, ¿Verdad? — Mi compañera Aislyn, se atravesó en el marco de la puerta con preocupación, y yo me apresuraba a meter los pies en mis zapatillas. Resultó que después de leer Nietzsche toda la tarde y en vez de hacer los deberes de matemáticas del día siguiente me animé para salir a bailar. Había estado demasiado absorta en mi lectura hasta que mí madre habló para reclamar sobre la pequeña broma que le hice a mí futuro esposito. Así que para celebrar me había puesto un vestido corto de lentejuelas, sería una noche memorable y para la historia. — Seguramente lo estoy, Lyn. — Contesté con una sonrisa enorme en los labios. — Pero puedo asegurarte que jamás volveré a ver la cara de Ace Beringhelis en mí vida.Es que debiste ver su rostro y el de su familia
* * * * * * * * POV : TARA. [PARTE II]«¡Nunca debí entrar ahí!» Era la frase que se repetía en mí cabeza una y otra y otra vez. Cómo pude había llegado a la fraternidad DELTA, me interne en la oscuridad a través del entramado de sombras que proyectaba la luna sobre el césped húmedo, mis piernas débiles luchaban por mantenerse mientras cruzaba el pequeño támesis que atravesaba los terrenos del campus y dividía la zona residencial.Había estado pocas veces aquí para colarme en la habitación de Bastian, pero sabía exactamente dónde encontrarlo, pues el camino permanecía nítido en mí mente. Atravesé la puerta y subí por las escaleras de incendios, todo permanecía en silencio al llegar al pasillo. Tras una neblina de confusión di dos toques a la puerta, pero no obtuve respuesta, más que el eco de mí llanto.— ¡Bastian! — Dije con una voz que no fue más que un graznido. Mi ropa estaba sucia, apestaba y tenía la garganta seca, mí cuerpo ya no resistía un minuto más y estaba consideran
POV: BASTIAN. [Flashback]— Tenemos que hablar. — Midas entra sin permiso a mí habitación a las siete de la mañana. — Y no, no pienso darte un día más de tiempo.Ya te has tomado toda una semana para contarme que le sucedió a mi prima. — Tenía los ojos hinchados y enrojecidos. — Tiene que ser algo muy grave, porque Tara y tú se han olvidado de mí cumpleaños. — Cálmate.No nos hemos olvidado de tú cumpleaños, ya mandé a pedir un pastel para celebrar esta noche. — Si. Bueno, pues ahora puedes llamarlo el pastel de la traición. — Dice encogiéndose de hombros. — O puede que la llames: El pastel con sabor a mentiroso. Ese último le pega más. — Por enésima vez: Tara ha estado bajo mucha presión, esta estudiando para los parciales, solo necesita concentrarse. — Le asegure con sesguridad. No podía delatarla, aunque no estaba de acuerdo con su decisión. No hubo manera de hacerla cambiar. Ella necesitaba ayuda, incluso debimos montar una denuncia pero se negó rotundamente. — Ella nunca
POV : ACE.Solo había una cosa peor que levantarse los lunes a las cinco de la mañana: Y era levantarse sabiendo que el resto de la semana la ibas a pasar trabajando para tú futuro suegro. «Un cabrón misógino verdaderamente irritante, pero que desayunaba, almorzaba y cenaba acuerdos» Y, sí. Aún sigo con la idea de casarme con la fea, han pasado tres años desde que la conocí y aún sigo inmutable en mí decisión, especialmente por que los negocios de mí padre no han resultado bien, esta es mí única oportunidad para mantener la vida que me merezco y a la que estoy acostumbrado. Me había convertido en un ejecutivo de traje de diseño y reloj de cinco mil dólares. ¡Bip! ¡Bip! ¡Bip! El sonido de la alarma interrumpió mis pensamientos, lo primero que hice fue encontrar mí móvil y comenzar a revisar los correos electrónicos y mí agenda. Al abrir mi bandeja de entrada conseguí un correo de Mathias Parvatti. Para estar de orador en una convención este fin de semana.Lo último que quería hace
EXTRA...POV: DEMIAN HUDSON. La figura del poderoso y exitoso Doménico Ford, ha sido objeto de fascinación y admiración en la sociedad durante años, incluso muchas personas buscan imitar su estilo de vida, su éxito empresarial y su habilidad para manejar situaciones difíciles resolviendo problemas con eficacia. Sin embargo, el caso de Doménico Ford, es una muestra clara de cómo ese poder puede corromper a una persona y llevarlo a cometer actos atroces e inconcebibles, de manera inhumana y cruel...Nadie conocía realmente el lobo que se escondía bajo esa piel de cordero.Nadie, excepto yo. Toda mí vida había trabajado para esta familia, mí pobre madre era muy cercana a los abuelos de Doménico, después de la muerte de mí progenitora, el abuelo Ford, se hizo cargo y fue una figura paterna para mí. Razón por la cuál se creó un vínculo de lealtad entre ambos y juré servirles hasta el final. Al principio lo consideraba un tipo justo y respetable, era el único varón entre cinco hermanas