POV: BASTIAN. [Flashback]— Tenemos que hablar. — Midas entra sin permiso a mí habitación a las siete de la mañana. — Y no, no pienso darte un día más de tiempo.Ya te has tomado toda una semana para contarme que le sucedió a mi prima. — Tenía los ojos hinchados y enrojecidos. — Tiene que ser algo muy grave, porque Tara y tú se han olvidado de mí cumpleaños. — Cálmate.No nos hemos olvidado de tú cumpleaños, ya mandé a pedir un pastel para celebrar esta noche. — Si. Bueno, pues ahora puedes llamarlo el pastel de la traición. — Dice encogiéndose de hombros. — O puede que la llames: El pastel con sabor a mentiroso. Ese último le pega más. — Por enésima vez: Tara ha estado bajo mucha presión, esta estudiando para los parciales, solo necesita concentrarse. — Le asegure con sesguridad. No podía delatarla, aunque no estaba de acuerdo con su decisión. No hubo manera de hacerla cambiar. Ella necesitaba ayuda, incluso debimos montar una denuncia pero se negó rotundamente. — Ella nunca
POV : ACE.Solo había una cosa peor que levantarse los lunes a las cinco de la mañana: Y era levantarse sabiendo que el resto de la semana la ibas a pasar trabajando para tú futuro suegro. «Un cabrón misógino verdaderamente irritante, pero que desayunaba, almorzaba y cenaba acuerdos» Y, sí. Aún sigo con la idea de casarme con la fea, han pasado tres años desde que la conocí y aún sigo inmutable en mí decisión, especialmente por que los negocios de mí padre no han resultado bien, esta es mí única oportunidad para mantener la vida que me merezco y a la que estoy acostumbrado. Me había convertido en un ejecutivo de traje de diseño y reloj de cinco mil dólares. ¡Bip! ¡Bip! ¡Bip! El sonido de la alarma interrumpió mis pensamientos, lo primero que hice fue encontrar mí móvil y comenzar a revisar los correos electrónicos y mí agenda. Al abrir mi bandeja de entrada conseguí un correo de Mathias Parvatti. Para estar de orador en una convención este fin de semana.Lo último que quería hace
EXTRA...POV: DEMIAN HUDSON. La figura del poderoso y exitoso Doménico Ford, ha sido objeto de fascinación y admiración en la sociedad durante años, incluso muchas personas buscan imitar su estilo de vida, su éxito empresarial y su habilidad para manejar situaciones difíciles resolviendo problemas con eficacia. Sin embargo, el caso de Doménico Ford, es una muestra clara de cómo ese poder puede corromper a una persona y llevarlo a cometer actos atroces e inconcebibles, de manera inhumana y cruel...Nadie conocía realmente el lobo que se escondía bajo esa piel de cordero.Nadie, excepto yo. Toda mí vida había trabajado para esta familia, mí pobre madre era muy cercana a los abuelos de Doménico, después de la muerte de mí progenitora, el abuelo Ford, se hizo cargo y fue una figura paterna para mí. Razón por la cuál se creó un vínculo de lealtad entre ambos y juré servirles hasta el final. Al principio lo consideraba un tipo justo y respetable, era el único varón entre cinco hermanas
* * * * * * * * * *Aquella avasalladora injusticia me partía el corazón y lo retorcía cómo si tuviera contracciones, a mí hija le habían arrancado su inocencia y yo dejé que sucediera. Ella pudo ir a la universidad, pudo haber sido feliz pero yo dejé que ese hijo de puta la lastimara. Hacía mucho tiempo que no me sentía tan mal, la oleada de dolor, tan viva y punzante crecía a cada segundo. Un cable de acero me ceñía el pecho con tanta presión que me pareció sentir que me ahogaba y tuve que abrir mi boca para encontrar aire. Subí hasta la habitación ignorando los gritos de pánico de Cecilia, la punzada de dolor aferrada a mi pecho me impedía razonar. Y, tampoco era como si quisiera hacerlo. Me interne en el interior del closet buscando entre los cajones hasta dar con la Beretta que guardaba por razones de seguridad, tomé el cartucho y la escondí bajo mí chaqueta del uniforme. — ¡No, papá, no vayas! ¡Por favor, no lo hagas!. — Cecilia se atravesó frente a la puerta. — Tú no con
POV : TARA. Acaricié el marco de mí título universitario y suspiré al leer las palabras que habían escritas al final del documento. «Especialista en Publicidad y Relaciones Públicas» Había alcanzado mí sueño, me gradué un año antes de lo esperado y con honores en mí especialización, incluso obtuve un empleo por mis propios medios en la revista "Élite", el pináculo de la industria empresarial.El problema es que no era tan fantástico cómo lo imaginaba. Llevaba meses dentro de un cubículo de metro y medio, corrigiendo notas administrativas y tenía la esperanza de optar para el puesto de redactor, pero sospechosamente mí jefe (Rush Norton) nunca tenía tiempo para escuchar mi presentación. Algo que no era impedimento para mí, pues no estaba dispuesta a rendirme, quería ser alguien importante para demostrarle a mí padre que puedo mantener el control de mí propia vida. Una vida que funcionaba en piloto automático desde el día en que abordé aquél avión para separarme de Sebastián. Entend
POV : BASTIAN. Observaba los preparativos del funeral de mí padre desde la ventana, mí expresión era triste, a partir de ahora muchas cosas cambiarían en mi vida, el día se veía más oscuro y la soledad parecía mí último refugio, por eso prefería mirar por la ventana cómo el mundo seguía rotando sin percatarse de mi dolor. Tal vez la perdida se me haría más soportable si hubiese podido despedirme, desde hacía un tiempo nuestra relación no era la mejor y justo cuándo tendría la oportunidad de enmendar las cosas, sucede esto. La cuestión es que también me sentía abandonado, solo había una única persona en el mundo a quién quisiera ver pero sabía que ella no estaría aquí. Había comprendido que nada era lo que parecía, el que reía de último, no siempre reía mejor, sino que a veces lloraba. Querer no siempre era poder y sobre todo el "siempre estaré a tu lado" podría resultar la mentira más vil. — Bastian, cariño por favor. Come algo ¿si? — Dijo Kelsi desde la puerta, se había empeñado
POV : TARA. Es gracioso como esos encuentros felices pueden cambiar la dirección de tú vida, aunque ahora que lo pienso "Feliz" no es quizás la palabra correcta.La luz de verificación del motor no deja de parpadear, había un extraño sonido chirriante y después comenzó a salir humo de debajo de la capota. Fue entonces cuándo Bastian detuvo su viejo auto. — Demonios, nos hemos quedado varados en este lugar. — Reflexionó Bastian, saliendo del auto. — Déjame ver qué sucede. — Abrió la puerta de su lado para bajar, dió la vuelta y me invitó a salir pero mí brazo quedó atrapado en el cinturón de seguridad haciendo que me tropezara.Cuándo me agarró del codo para estabilizarme, una corriente prendió fuego en todo mi cuerpo. Lo miré a los ojos. Estaban ardiendo, atravesando los míos y avivando las llamas que parpadean en mi vientre. — No hagas eso. — Le digo, separándome de él. — ¿Hacer qué? — Lo que siempre haces con tus ojos. Estas tratando de hacerme sexo ocular. — Me lanza una
POV: ACE. [Parte I] — Llegas tarde, otra vez. — Megan levantó la cabeza para mirarme cuándo entre al cuarto de baño. — Llevo horas esperándote. — Se quejó. — Lo siento, cariño. — Solté el nudo de mi corbata y tomé asiento en el borde de la bañera. — Me olvidé de una reunión a la hora del almuerzo que tengo mañana y quería asegurarme de que contaba con los documentos necesarios. — Ella niega con su cabeza. — Tienes que decirle a tú suegro que te mereces un bono extra y un aumento adicional por todo lo que haces. Incluyendo enamorar a esa estúpida fea. — Ya soy el ejecutivo mejor pagado de la ciudad, Meg. — Pues, todavía no es suficiente. — Dijo mientras se recogía el pelo en una delicada coleta, luego recostó su espalda en la bañera dejando a la vista sus dos montículos asomándose a través de la espuma. «Delicioso» — Yo creo que es más que suficiente. — Saqué mí móvil y lo coloqué sobre una toalla mientras me desvestía. — Lo que me das no me alcanza, no quiero que un día est