_Habla ahora... ¿Dónde está tu líder?

_¿Por qué te lo diría?, respondió Alya enojo.

_Tu al igual que mal nacido de Bartolomé, deben pagar.

_Ese resentimiento no te llevará a ningún lado. Has sufrido mucho, al igual que todos nosotros, entiendo mejor que nadie tu dolor. Pero tenemos que responsabilizarnos también...

_Responsabilizarnos?, preguntó aún más molesta.

_Todos hemos sido víctima de la crueldad de Bartolomé, todo lo que hemos vividos ha sido culpa nuestra, por permitirlo. Siempre tenemos opción... Conocías su planes. Debes parar con ésto, porque en final no serás diferente a él, te convertirás en lo que odias. Cientos de personas sufrirán por culpa de él... Ha fallecido hace tiempo, y aún sigue haciendo daño a través de tí.

Las lágrimas de Alya comenzaron a recorrer sus mejilla y sus sollozos no pudo ser ignorados. Las palabras de Ronald le mostraron todo lo que había provocado, debía terminar con Bartolomé y todo el dolor que le había causado. Se derrumbó en el piso y lloró