Punto de vista de Max

La rabia me invadió al verla con el idiota de Luck, quién la beso sin descaro, Hannah apenas tiene diecisiete años y sé bien lo que él pretende.

Ella clavó sus ojos en mí aún así no se detuvo, luego desaparecieron de mi vista, no permitiré que ese bastardo toque a esa niña.

Me acerqué hacia su ubicación muy molesto, por qué nadie debe tocarla, ella está bajo mi protección.

Hice que se marchara en su auto, con el estado en el que está es muy probable que provoque un accidente. Tomé del brazo de Hannah y la lleve hacia mi coche.

.........

_No hay mujeres que se resistan a mí, incluyéndote, brujita.

_¿De qué estás hablando, idiota?", me preguntó haciéndose la desentendida.

_Solo digo lo que veo, en tus ojos, en tu cuerpo, en tu respiración...

_Si me acerco un poquito más, tu pulso comenzará a acelerarse...

Ella se quedó en silencio aunque negaba con la cabeza, a mí no puede mentirme.

_Eres un idiota, por qué arruinas mis planes.

_El imbécil de Luck estaba borracho, esto no tiene nada que ver contigo, no te sientas tan especial. Lo hubiese hecho por cualquiera, ese tonto no puede conducir en ese estado.

_Yo me las hubiese arreglado con él, no quiero que te vuelvas a meter en mis asuntos. O caso te importa lo que haga con Luck...

No pude evitar molestarme con su comentario, es obvio que me molesta, porque justamente es a ella quien la diosa de la luna escogió para mí, y no puedo tan solo tomarla, por qué es mi hermanastra... pero tampoco soporto ver qué otro la toque.

Siento que voy a perder la cabeza.

Puse en marcha el coche, mientras aseguro la puerta, ella empezó a gritarme, pero no me interesa lo que diga.

Subí el volumen de la música, luego pise el acelerador a fondo, haciendo que la velocidad del auto y la música pueda calmar lo que siento...

“Detente, Max, ¡por favor!", escuchó decir. Pero no me detengo, quiero que sienta lo mismo que estoy sintiendo yo...

La miró, mientras la escucho gritar mi nombre, es una mujer muy bonita, sin tan solo pudiera la haría mia esta misma noche.

Bajo un poca la velocidad cuando me acerco a un risco, mi lugar favorito. Apague el coche, nos quedamos un minuto en silencio, en el cual no me atreví a siquiera mirarla, por qué estoy molesto, pero a la vez triste y la odio por ser la responsable de esto.

Baje del auto, me pare en la punta mientras a lo lejos observó el inmenso cielo estrellado, y como se ve con el reflejo del agua. Me senté y dejé caer mis pies en el aire.

Ella aún está en el auto, pero no me interesa, le dí un buen trago a mi botella de vodka, mientras intento dejar mi mente en blanco.

_Oye idiota, ¿por qué me has traído hasta aquí?, interrumpió mis pensamientos.

_Yo no te he traído hasta mi lugar favorito a tí, yo vine por qué quiero, sabes manejar, puede marcharte, le dije con poco interés.

_¿Por qué te comportas como un idiota?, me pregunta.

_No tengo ganas de escuchar tus escenas infantiles, Hannah. Toma el auto y marcha a casa, tu madre está esperándote.

_Bien, ¿vamos?, me dijo haciendo señas con las manos.

_Quiero quedarme aquí hasta el amanecer, niña.

No tenía más que decir, no quería ni verla. No sé en qué estaba pensando mi padre cuando decidió traerla aqui, y mucho menos fingiendo que todos somos simple humanos.

Ella me quitó la botella, luego se sentó a mi lado y eso me sorprendió, miré en sentido contrario para disimular mi cara de felicidad.

En realidad, queria que esta noche se quede conmigo, agradecí en silencio.

_Me quedaré contigo hasta que se termine la botella, luego nos vamos, ¿qué dices?"

Yo solo asentí, no quiero mostrar mucho interés por qué esto no está bien.

_Aquí en Escocia, son muy extraños, pero esta zona lo es aún más, tienen algo diferentes, es como si todos fuesen una gran familia".

_¿Extrañas tu hogar, o a alguien especial en Inglaterra?

_Si, a mi abuela y mis amigas.

_Te has marchado muy pronto de la fiesta, tu novia estará como loca buscándote.

_No, no lo hará, sabe que no debe molestarme.

_Y cual de las cinco era, ríe al preguntarme.

_¿Cuál es tu interés en ese asunto?, pregunté sin vueltas.

_Quiero saber quién es mi cuñada, además, es un motivo de conversación, no está mal compartir o charlar de lo que te hace feliz.

_Tengo muchas chicas, escoje a cualquiera, por mí está bien, respondí.

_Entonces significa que no hay ningún especial, comentó, no sé porqué insiste con el asunto.

Tengo a todas las mujeres, pero justo a la que quiero y debería tener no se puede.

_Puedo percibir qué algo te pasa, me dijo tomando mi mano.

_Sé que hace poco nos conocemos, pero puedes contarme si quieres, me pareció un gesto muy lindo, no pude evitar ver cómo acaricia mi mano, y por su bien, no debería tocarme.

Muerdo mis labios, luego dirijo mi mirada hacia ella. Maldigo por lo bajo por las terribles ganas de besarla que tengo.

_Estas hermosa está noche, dije lo que pienso, ella se sonrojo.

_¡Gracias por el cumplido!

_De nada, pero si sigues comportando como hoy, te llevaré a casa embarazada, Hannah.

_Puede ser, aunque siempre puedo cuidarme, dijo con un sonrisa, pero su chiste no me hizo gracia.

_No jodas con eso, ahora eres parte de la familia Hannah, debes comportarte como una señorita.

_Eso no tiene nada que ver por cómo me vista, además, no necesito de tu aprobación, dijo con risa.

Nos quedamos en silencio un buen rato, la botella de vodka se terminó hace tiempo y aún está a mi lado, pero no quiero que esta noche se termine, no aún.

Quiero soñar por un momento en que estamos juntos, y guardar está imagen en mi mente.