*Lucifer Tenía muy poco tiempo, tengo que hacer algo inmediatamente. Andrea estaba despierta, pero ausente, Beka salió del cuarto de Tania, sentí coraje al verla tan golpeada, pero estaba más enojada en ver a mi esposa irreconocible. — Deja llevo a Andrea a bañar, necesito quitarle esos harapos—. Dijo con tristeza — vigílala, por favor BekiNo debía quitarle la vista a mi hijo, no podía dejar que me lo volvieran a quitar. Por una vez en mi vida desearía egoístamente que mi hijo "si fuese autista", que no hubiera tenido nada que ver conmigo. Le traje infelicidad a mi mujer, a su mamá y a mí mismo.Llego samanta con su esposo, la preocupación y la angustia le había pasado factura, con una delgadez extrema.A la vez, apareció Nolasca frente a nosotros.Tuve que detener a todos el paso hacia el cuarto, no quería que vieran en el estado que estaban a Tania y a Andrea.— Porque tienes a mi ahijado ahí— dijo CarlosPase mi mano con exasperación sobre mi cara.— Una cosa a la vez, no tengo
Pasaron cinco años desde que me case, quizás en mis planes no estaba tener aún hijos, pero a los seis meses de casada, quedé embarazada. Entre el estrés de la escuela y el trabajo, mi cuerpo no pudo soportarlo, perdí a mi primer hijo.Quizás no estaba preparada, pero aun así, me emocione mucho porque dentro de mí llevaba al fruto de mi amor por mi esposo Carlos, no habíamos compartido la noticia, porque no estábamos preparados para ello, ni siquiera lo habíamos planeado. El día que lo perdimos, se quedó a mi lado en todo momento, apoyándome, me decía que ahora tendríamos un ángel en el cielo. Entre mis rezos lo encomendé a los ángeles, ahora que somos testigos de su existencia, pedíamos e implorábamos su intervención y me dieran la oportunidad de quedar embarazada otra vez, cuando por fin hayamos superado la muerte de nuestro primer hijo y ya estuviéramos preparados.Un año y medio después, volví a quedar embarazada, mi madre estaba emocionada, pero al mes, tuve un aborto espontán
* VerónicaHabía terminado una competencia de clavados en una playa, donde íbamos a una vertiente y el más temerario saltaba desde la altura más alta, todo esto por puro gusto recreativo.Próximamente, habría una competencia de beber cerveza y estaba emocionada por ir.Andando de paseo, me encontré con un grupo de jóvenes de entre los veintitrés a los treinta y muchos años, conversaban casualmente sobre qué irían a esquiar, hablaban de cómo alguien se habría quebrado un pie, y como próximamente se uniría de nuevo en el equipo, iban de paso a la localidad, pero se unirían al día siguiente.Llegue hacia ellos y haciéndoles pláticas le pedí que me dejaran unirme a ellos. Contaban de sus viajes y empecé a contarles de los míos, me sentía muy a gusto con ese grupo.Matías y Giselle me aceptaron inmediatamente en el grupo, tuve que ir de compras con ellos, ya que yo no tenía material para esquiar, y la verdad no sé qué carajos es eso, yo solo iría a divertirme.Al llegar al país, se me hizo
Mi nombre es Andrea Alonso y hoy les contaré la historia de como me metí en grandes problemas y sin siquiera haberlos buscado.Les contaré mi historia, es un poco corta, no, no me crean.Soy huérfana de padre y madre.Mi mamá murió cuando me daba a luz, Así que no la conocí, y mi papá murió cuando tenía 12 años de causas naturales y desde entonces vivo con mi abuelita paterna.Mi abuela se llama Nolasca, Noli como todos la conocen, una abuelita tierna, dulce, amorosa, pero con un gran carácter, no puedes contradecirla porque de inmediato se enoja y para contentarla ¡uff! Es difícil.Al morir mi padre, mi abuela me acogió en su casa, debo destacar que desde muy pequeña no me sentía cómoda andando por la casa de mi abuela, ya que no me dejaba andar por ningún lado, ahí empecé a ver a mi abue con diferentes ojos… Era la primera vez que me hablaba con gran seriedad, al prohibirme ciertos lugares de la casa.*Andrea 12 años —Queda prohibido que entres a la parte norte de la casa. Por ning
*Recuerdo: "Primer día de escuela"Al llegar a la escuela me senté cercas de la puerta del salón, para cuando llegara la hora de salir y huir del lugar, no tener que ir detrás de nadie.— Buenos días, jóvenes— saludo una mujer alta, de cabello negro, en voz muy fuerte y autoritaria.Se acomodó en su escritorio, saco una lista y empezó a tomar... ¿Lista???Cada que mencionaba a un alumno volteaba a verlo, después de varios alumnos nombrados se detuvo.— Valla, valla, tenemos compañera nueva— dijo la maestra mientras buscaba en el salón...Todos voltearon a verme, fue fácil para la maestra encontrarme, juro que quería morir de vergüenza.No es que fuese tímida ni nada de eso, simplemente no quería ser el centro de atención de nadie, solo quería pasar desapercibida.— Señorita Andrea, puede ponerse de pie y presentarse al grupo.La maestra no pidió, exigió que me presentará. Como el pueblo era pequeño, casi todos venían de la misma escuela, vecinos o familiares, por eso fui yo la única
Termine el maldito trabajo yo sola, lo miraba de reojo y pude ver que él, muy sin vergüenza, me miraba directamente y con una sonrisa retorcida, que a decir verdad lo hacía ver muy guapo, pero a mí me hacía enojar más.Sonó el Timbre de salida, el profesor no apareció y claro que no le iba a pasar apuntes, pero el idiota arrebató mi cuaderno de la mochila y se salió del salón apresurado, lo vine alcanzando cuando Estelita ya estaba en la entrada con el auto, encendido.— ¡Cómo les fue, chicos!— Excelente abue, Andrea es excelente amiga— dijo el idiota sacándome de mis casillas.Lo odié al instante.No quise contrariarlo y hacer sentir mal a Estelita, así que me fui enojada todo el trayecto a casa.Así pasaron varios meses, él me molestaba, yo me fastidiaba e incluso a veces lo golpeaba. No había día en que no nos regañara el profe o la maestra por estar distraídos,Julio o más bien Jewl (yuul), como le dice su abue de cariño, hizo que nos movieran a Sami y a mí en el equipo, convencí
Escuche esas palabras y mi corazón dio un salto, y empezó a agitarse muy rápidamente, una sonrisa escapo de mi boca, y no tengo la más mínima idea del porqué.No tenía idea de lo que él veía en mí en ese momento. — Desde hace mucho tiempo comenzaste a gustarme, no me atrevía a decirte, porque tampoco quiero arruinar nuestra amistad. — Ya no quiero ser más tu amigo Andrea— tomó mi mano—. Si me permites, yo quiero ir un poco más allá— volteo a verme justo cuando yo levante el rostro para mirarle. Si el chico me gustaba, pero no me imaginaba que para otra cosa, ya que los tres teníamos una relación estupenda. Muchas veces, me pregunté, el "por qué" no podía andar con él, siendo un chico guapo, bien parecido, con la carita más linda que he visto y su porte de chico malo de película. Al principio, yo creía que a él le gustaba Sami, ya que a ella le hablaba muy bien, mientras a mí me fastidiaba, luego poco a poco, nos trataba casi igual, pero con la diferencia que seguíamos molestándo
* Recuerdo Andrea, 5 años de edad. Estábamos en casa de mi tita, ella es la abuelita más cariñosa de todo el mundo, me hace galletas y pasteles, por eso la amo. Comía mis galletas con leche sentada en una mesita de plástico para niños que tita me compro. Mientras comía tarareaba una canción que me enseñó papi. Mi papá y mi tita hablaban en vos muy baja, papa tenía su cara roja, parecía que haría boom. — ¡Princesa!— llamó papa — Ti — Por qué no vas a dar una vuelta a la casita bebe — ¿Puedo salir? — No bebe, está lloviendo fuerte — Puedo ver las fotos de tita — Nada más no las vayas a agarrar, ni a tirar. — Ti papi Me bajé de la silla y empecé a cantar mis canciones favoritas mientras veía las fotos de mi abuelita. Estrellita donde estás, quiero verte titilaaaar... Cantaba y caminaba mientras recorría la sala. Había un sapo, sapo, sapo, que nadaba en el río, río, río, con un traje, vede, vede, vede, que temblaba de fío, fío, fio... Entre caminando, saltando y cantand